Esperando por tí / El tiempo y tu recuerdo

Autor: Honbatz
Género: General
Fecha Creación: 05/05/2015
Fecha Actualización: 19/06/2016
Finalizado: NO
Votos: 3
Comentarios: 15
Visitas: 28160
Capítulos: 23

¿Qué pasa si por complacer a los demás, lastimas a la persona que amas?

Pero sobre todo ¿Qué pasa si no  puedes disculparte a tiempo?

Esta es la historia de Edward Cullen (príncipe de Masen) y Bella Swan…. Después de comprometerse ambos viajan a Masen con el objetivo de preparar la boda real, pero a pocos días de casarse,  Edward desiste creyendo que era lo mejor para el reino de Masen y se compromete con otra…….. ¿Cómo tomará Bella este cambio de planes?...

 

 No se pierdan esta historia y recuerden “cuidado con lo que se desea…….. Porque puede volverse realidad…… y el resultado podría no ser el esperado”

 

Disclaimer: los personajes pertenecen a Stephenie Meyer, algunos de ellos yo los invente. La historia es de mi autoría.

 

Di no al plagio ;)

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Este es mi primer fic, al fin lo publico despues de jugar con los petalos de una flor a "subo el fic o no lo subo" (jejejeje) finalmente me decidi,  ojala lo disfruten.

 

 

PD. agradecimientos a...... Sasha_amane camarera chocoaventurera, sus fics y consejos / tips  me han ayudado e inspirado , (especialmente "la camarera", pero las otras historias no tienen nada que envidiarle a la camarera pues tambien  son interesantes y antes de salirme por la tangente jajaja les invito a que se pasen por alguna de las historias de esta autora, no se arrepentiran)  

 

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Capítulo 10: Secuestro


Holaaaaaaaaaaa nuevamente, he vuelto con actualizacion, espero no me maten por hacerlas esperar tanto tiempo y ...... no las entretengo mas.....

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 POV Edward:

Después de aquel episodio tan poco divertido, salí de Twilight, subí al volvo, a gran velocidad me aleje de aquel lugar, al llegar a lo que consideraba mi refugio personal, comencé a planear el siguiente paso, estaba decidido a hacer llorar a esa mocosa por su atrevimiento…. Las horas transcurrían mientras tomaba en cuenta cada detalle…..

Finalmente sonreí en cuanto todo estuvo listo para la venganza fase 2…. Finalmente me recosté en la cama con una sonrisa en los labios y descansé plácidamente...

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Hoy era Domingo, un día memorable, una vez duchado bajé a desayunar.

-Buenos días joven Edward – saludó Carmen con una sonrisa

-Buenos días Carmen, ¿Cómo amaneciste hoy?

-Muy bien joven ¿Qué desea desayunar?

-Huevos revueltos con tocino y zumo de naranja, por favor.

-Siéntese y en un momento le sirvo

Asentí a las palabras de Carmen, tomé asiento, el desayuno estaba exquisito, nunca me arrepentiría de haberla contratado.

-Joven Edward – interrumpió Carmen – disculpe pero hace un par de horas llamo una señorita preguntando por usted

-¿dijo quien era? – pregunte

-Si, su nombre es Fernanda, pidió que le diera un recado

-¿Recado?

-Así es joven, dijo que le esperaba en la cafetería "la vie" del centro comercial de Brooklyn a eso de las 10:00 de la mañana

Fruncí el ceño, para empezar ¿Quién rayos era Fernanda? ….. después de un momento haciendo memoria la recordé, era la amiga de Jacqueline, pero ¿Por qué querría verme?... me encogí de hombros mentalmente y opte por aceptar el encuentro.

-¿Pidió que le llamara para confirmar?

-No joven

-De acuerdo, puedes retirarte Carmen – ella solo asintió y entro nuevamente a la cocina.

Cerca de las 10:00 salí del apartamento con dirección al centro comercial, en cuanto llegue aparque el auto, baje y entre al centro comercial, una vez dentro de la cafetería, inmediatamente ubiqué una cabellera rubia, la chica al parecer también se percato de mi presencia porque comenzó a agitar los brazos como posesa. Lentamente fui acercándome a la mesa ocupada por ella, note que el exceso de maquillaje era inversamente proporcional a la cantidad de ropa…

 

"¡Hey! ¿Desde cuándo eso es un problema para ti?" – volvió esa molesta voz, la que creí haber callado hace 2 días

"no es asunto tuyo" – rezongué

"oh, pero claro que es asunto mío, soy yo quien tiene que sufrir con esas imágenes indecentes"

"hablas como si fuera un gran sacrificio"

"pues aunque no lo creas, ahora que conocí a una hermosa castaña si que lo es"

"otra vez con eso" – mascullé

"si, y te lo recordaré millones de veces más y punto…"

 

Gruñí mentalmente, dejando en el olvido aquella voz….

-Hola ¿Fernanda? – salude algo distraído

-Oh, recuerdas mi nombre, eso es un gran halago Edward – sonrió coquetamente, sonreí también con cierta extrañeza, esperé unos minutos a que ella explicara el motivo de haberme citado en este lugar, pero la espera fue en vano…..

-Y… ¿Cómo has estado? – intente romper el incomodo silencio con afán de crear conversación.

-Oh, excelente querido, por lo visto no hay necesidad de preguntarte a ti, se nota que estas magnifico – habló con voz seductora.

-Gracias por el cumplido….. De hecho Fernanda, no quisiera parecer grosero, pero como conseguiste mi número telefónico y tampoco has mencionado el motivo por el cual me has llamado a mi apartamento.

-Por supuesto que no eres grosero, en realidad llame porque quería volver a verte, preferí no decirlo abiertamente a tu criada, te formarías una idea errónea sobre mi persona y rehuirías, además no trato ese tipo de asuntos con la servidumbre o cualquiera que esté por debajo de mi nivel – dijo con una sonrisa presuntuosa - con respecto a tu numero me lo proporcionó tu amiga Jacqueline, espero no te moleste - ¿mi amiga?¿no se suponía que también era amiga de ella? trataba de controlarme y no decirle a la cara unas cuantas palabras, sin duda ella acertó en cuanto a que rehuiría de ella, es decir ¿acaso tenía cara de estúpido? durante la noche anterior estuvo flirteando con otro, incluso puedo asegurar que pasó la noche con ese otro, además, ¿Cómo se atrevía a hablar así de Carmen? Ella es una persona muy apreciada, en Masen todos se valoran, no por el dinero a su disposición sino por los valores humanos y eso me lo inculcó Carlisle hace mucho tiempo, a estas alturas estoy orgulloso por esa educación. Por otra parte ya arreglaría asuntos con Jacqueline.

 

"¿celoso, frustrado?"

"para nada, simplemente odio que crean que estoy desesperado por entrar en la cama de la primer mujer que se me cruza en el camino, yo el gran Edward Cullen elige donde, cuando y con quien, no al revés" – afirmé.

"de acuerdo, no desesperes…. ¿Qué hacemos con esta mujer entonces?

"lo mismo que haría cualquiera en mi lugar…huir" – sonreí

 

-Comprendo Fernanda, sin embargo – fingí mirar el reloj – en breve tengo una reunión importante.

-¿trabajas incluso los Domingos? – preguntó asombrada, a lo cual asentí

-Así es, soy un hombre con muchas responsabilidades encima

-Comprendo, mira, te propongo algo, tú vas a la dichosa reunión, mientras yo voy a tu apartamento a ponerme cómoda mientras planeo una estupenda noche para ambos, con el fin de sacar el estrés de tu cuerpo – agregó seductora, mientras me observaba de pies a cabeza, fue extraño, tenía una mirada depredadora y por primea vez me sentí incomodo ante el escrutinio de una mujer.

-Eso está bien para mí, pero la reunión será larga y al finalizar la primera apenas dispongo de tiempo para llegar a otra, llegaré tarde y lo suficientemente cansado como para derrumbarme en el suelo apenas ponga un pie en mi apartamento, claro si consigo llegar, posiblemente me aloje en algún hotel cercano – suspire con pesar, pero debía continuar la escena, de lo contrario esta mujer es capaz de aparecerse frente al apartamento, destruyendo mis planes, ¡No! Eso no lo puedo permitir - pero no te preocupes, te llamaré en cuanto disponga de tiempo.

-¿y si te acompaño? así estaré cerca cuando me necesites – decía mientras uno de sus pies rozaba mi tobillo debajo de la mesa – no sé, tal vez te convenza de no acudir a la segunda reunión.

-Lo siento Fernanda, pero no acostumbro mezclar trabajo y placer, son una mala combinación, - hablé - las reuniones son importantes para la empresa que dirijo y nada ni "nadie" modifica los planes relacionados a ello – aseveré, recalcando la palabra "nadie", esperando que ella comprendiera la indirecta, tal parece que así fue porque agregó

-Es una lástima, pero estaré esperando ansiosa tu llamada – acto seguido se levanto de la mesa, la imité e inesperadamente me besó

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Suspiré en cuanto entre al apartamento, esa mujer no era normal, en la cafetería prácticamente se abalanzo, pegándose a mí como si de una lapa se tratara, una vez conseguí apartarla, pague la cuenta y salí prácticamente huyendo de ahí.

Por lo menos tenía el consuelo de llevar a cabo mi plan esta misma noche…. Mis pensamientos fueron interrumpidos por el timbre del celular, al revisarlo solo pude gemir de frustración, había olvidado los 3 eventos de este día, hice una nota mental, la próxima vez pediría a Jane agendar solo 4 eventos y todos para el sábado, liberando el Domingo o mejor aun traspasárselo a otros, de algo debía servir el tener tantos empleados …. ¡claro! esa era la solución, enviaré a alguien más a los eventos, sonreí satisfecho ante la idea.

Llamé a Jane exponiéndole los nuevos planes, fue difícil pero logre convencerla…. bueno más bien la obligué a buscar otras víctimas para representar a la empresa en conferencias, cenas y esas cosas planeadas para el día de hoy. Sin embargo mis planes son prioritarios, con esa idea comencé a preparar la bienvenida a mi futura huésped, pedí a Carmen preparara una cena exquisita, por mi parte salí a comprar vino tinto y algunas velas, a la mayoría de las mujeres les gusta cenas a la luz de la velas, estaba decidido a impresionar a la bella Marie…..

Una vez todo estuvo listo, entre a la ducha, cuando salí comencé a buscar algo adecuado para vestirme, elegí una polera piqué manga larga oscuro, cazadora de cuero y vaqueros. Satisfecho con mi atuendo, baje a l estacionamiento, una vez en mi volvo plateado puse marcha rumbo a Twilight.

 

cazadora de cuero

polera

vaquero

 

En cuanto llegue, entregue las llaves al valet parking, el día de hoy el bar no estaba atestado de personas aunque tampoco estaba desierto, como era rutina de mi parte, ingresé a la zona vip, desde ahí, tal como sucedió la noche anterior, me dedique a buscarla a ella, el tiempo pasó y comenzaba a desesperarme al no verla, tampoco pretendía salir a buscarla, temía encontrarme una escena similar a la noche anterior, presentía que en esta ocasión no podría contenerme y mandaría al suelo a ese tipejo, no me quedó alternativa que llamar a la camarera que me atendía esa noche para preguntarle…..

-Disculpe señorita, ¿podría venir un momento? – la llame, en cuanto estuvo frente a mí, habló

-¿Desea algo más caballero?

-Si, … en realidad no sé cómo decir esto…. ocurre que en este establecimiento trabaja una amiga mía… y hoy decidí hacerle una visita sorpresa, pero hasta el momento no la he visto por ningún lado. ¿podría usted informarme donde está ella? – la camarera dudo por unos instantes pero después asintió.

-¿Cuál es el nombre de su amiga?

-Marie – respondí con una sonrisa

- Oh, lo siento señor, pero supongo que Marie no le comentó que hoy es su día libre - ¡¿Qué?!, tuve ganas de gritar, mi plan se fue al carajo con eso, quería darme de topes con la pared, como no pensé en los días libres, ¡Maldición! - ¿algo mas en lo que pueda ayudarle? – agregó sacándome de mis pensamientos

-No…. Cambiando de opinión traiga la cuenta

-Enseguida – giro sobre sus talones y se alejó, al volver con la cuenta, la pagué y antes de dejar ir a la camarera, le hice prometer que no comentaría con nadie, especialmente Marie sobre mi presencia en el club y mucho menos que pregunté sobre ella, le hice creer que aun planeaba darle la sorpresa a mi querida "amiga".

Salí del lugar totalmente frustrado, pero que estúpido era, me había vanagloriado con el plan "perfecto", pero con esto, el dichoso plan era porquería. ¿ahora que hago? Me pregunté mientras conducía de vuelta al apartamento, una vez ahí me senté en la mesa que debería haber compartido con ella, suspiré y destapé la cena, no lo puedo negar, Carmen es una excelente cocinera, al finalizar la cena fui a la sala, encendí la tv pantalla plana de 60 pulgadas, incrustado en la pared, justo a tiempo para la transmisión de noticias, "que interesante" pensé irónico, una vez el cansancio comenzó a ganar terreno entré al dormitorio, mañana era Lunes, otro día de trabajo, otro día para…. ¡claro! esa era la solución, mi plan seguía en pie, Marie tenía día libre los domingos pero no el resto de la semana, bien podría ejecutar todo la próxima noche, una sonrisa se fue dibujando en mi rostro, al final nada estaba perdido y así con una sonrisa caí rendido en la cama.

Me encontraba en un parque, veía a los niños corretear por doquier, "algún día veré a mis hijos así" pensé, de un momento a otro sentí una cálida mano en el hombro, al girar el rostro, me encontré con una imagen hermosa, era Marie, sonreía, lentamente note como eliminaba el espacio entre nuestros rostros y "ring" "ring"

Abrí los ojos para descubrir que era un nuevo día, maldición, solo fue un sueño, excepto por aquel molesto tono, causante de despertarme a las….. 5:50 am, aun faltaban 10 minutos para que sonara la alarma y ….. un momento, aquel ruido no provenía de la alarma ¿entonces, que rayos...? busque con la mirada la fuente de aquel tono, mis ojos se posaron en la mesita de noche donde estaba el celular, la noche anterior lo deje en modo vibrador y ahora veía las consecuencias de aquello, pues junto al celular estaba un vaso de cristal y al vibrar aquel aparato del demonio chocaba con el cristal provocando ese molesto ruido, tomé el bendito aparato y contesté sin ver el numero.

-Diga, habla Edward Cullen

- Edward Anthony, me puedes explicar ¿Qué significa la gresca publica que armaste? – hablo una más que molesta voz del otro lado.

- Hola papá, amanecí excelente, gracias por preguntar – ironice tratando de quitar tensión al ambiente.

- Me importa un reverendo rábano como amaneciste, estoy esperando una explicación respecto a la nota publicada por los diarios locales esta mañana.

- ¿De que hablas papá? ¿Qué nota?

- Sal de la cama holgazán y revisa el periódico, en este instante.

Salí de la cama con el ceño fruncido, llegue a la sala donde como siempre estaba esperando ya un ejemplar del New York Times, en cuanto vi lo que Carlisle mencionaba, prácticamente se me cae la quijada al suelo, en los titulares, con letras grandes se leía "El magnate y reconocido Edward Cullen, arma escándalo por lio de faldas", rápidamente busqué la pagina donde se extendía la nota:

 

"Edward Cullen arma trifulca"

El fin de semana siempre nos trae sorpresas, y esta vez

fue el turno del exitoso empresario Edward Cullen, según

testigos, aseguran que el Viernes pasado, Cullen y amigos

ingresaron al famoso club Da Revin en compañía de chicas

muy guapas por cierto, sin embargo, al parecer Cullen comenzó

a ingerir bebidas alcohólicas de más, lo cual le llevó a una

pequeña disputa con la reconocida modelo Victoria Lefevre

novia del también reconocido boxeador James Gigadent,

este ultimo salió en defensa de su novia, golpeando a Cullen,

pero el contraataque de nuestro sexi empresario no se hizo

esperar, armándose un gran lio en Da Revin, fue necesaria

la intervención de guardias de seguridad para separar a este

par, ambos quedaron mal parados frente al otro, e incluso se

rumorea que Culllen ingresó al hospital central de Brooklyn,

(dato aun no confirmado), se espera entonces más datos

en relación a este incidente, es obvio que ahora Edward Cullen

estará bajo la lente de más de un paparazzi.

 

En la parte inferior estaban algunas imágenes de aquel altercado, la mayoría borrosas.

Esto no podía sucederme a mí, especialmente en este momento, debía evitar a los malditos buitres esos, pero sobre todo evitar el posible titular: "Edward Cullen, secuestrador de camareras"

-¿Sigues ahí? ¿Has leído la nota?– inquirió Carlisle aun molesto

- Si Padre, en realidad las cosas no sucedieron así, no estaba ebrio y en ningún momento ofendí a la chica, solo conversábamos cuando inesperadamente el cavernícola orangután ese que tiene por "novio" me atacó por la espalda.

- No importa los ¿Cómo o porque? del lío en sí. Lo relevante es que te viste involucrado en una gresca, por dios Edward, esas actitudes son las que deben evitarse al máximo en un príncipe, para empezar no tenias motivos para ir a un club, ya sé que eres joven y los jóvenes hoy en día salen a "divertirse" por ahí, pero un club nocturno no es la única opción, lo sabes . Mira por el momento tu madre aun no sabe nada respecto a "tu atractiva vida" en Nueva York, trataré de vitarlo aunque lo dudo, ahora dime Edward ¿fue por eso que dejaste Masen, cierto? Para dártelas de chico malo e irresponsable.

- Por dios, no, ese no es el motivo, respecto al alboroto es la primera vez que ocurre algo así, puedes investigar si no crees en mi palabra.

-De acuerdo hijo, te daré el beneficio de la duda, pero si llego a enterarme que andas armando mas alborotos y poniendo en vergüenza a nuestra familia, poco me importara que tengas 23 años y ni tu madre ni nadie evitaré que te ponga sobre mis rodillas y atice ese trasero tuyo tan aclamado por las neoyorquinas.

- No te preocupes papá, te prometo que no se volverá a repetir – mientras pueda evitar que lo publiquen, agregue para mí mismo.

- Bien, espero no recibir más sorpresas poco agradables, adiós hijo, estaremos en comunicación.

- Hasta pronto papá – ambos colgamos el teléfono, solo pude suspirar, no todos los días te despierta una llamada de tu padre, quien además te reprende y amenaza con una buena zurra.

Volví a la habitación donde después de ducharme y vestirme, entre a la cocina, desayuné unas deliciosas crepas, al finalizar, me despedí de Carmen y salí rumbo al trabajo, al llegar como siempre, Jane esperaba en la puerta de mi oficina, con el infaltable café y documentos.

-Hola Jane, supongo que amaneciste excelente.

- Ciertamente fue así, especialmente después de deleitarme por los titulares de esta mañana - dijo irónica

- Muy graciosa Jane, agradece que te tenga aprecio, de lo contrario estarías a un paso de firmar tu dimisión.

- Si claro, lo que digas Edward – dijo agitando la mano, restándole importancia al asunto.

Entramos a la oficina y como si se tratara de una tradición surgida en tiempos remotos, Jane comenzó con su listado de pendientes…

- por ultimo lamento informarte Edward que la reunión con ejecutivos de Surley, se canceló y lo han reagendado para la próxima semana

-¿Cómo? Eso no es posible, necesitamos cerrar el contrato hoy mismo.

-Lo sé y a menos que vueles a Washington esta misma tarde, no tendremos dicho contrato.

-Entonces envía a Scott

-No será posible Edward, el contrato requiere la firma del presidente de la constructora.

-No es posible – suspire frustrado - si no existe otra solución iré, cancela todos los compromisos por 2 días.

-Ya está hecho, Edward, se ha cancelado todas tus obligaciones durante una semana.

-Pero solo será unos 2 días y odio tomar vacaciones innecesarias.

-No serán vacaciones Ed, en realidad estarás trabajando y mucho, hace unos momentos me han informado que hay problemas con los hoteles CM en Inglaterra, te he programado vuelo desde Washington con destino a Londres. Y… no quisiera arruinar tus posibles planes en estos días, ya sabes por la una nota sobre ti en la revista del corazón.

-Ni lo menciones Jane, suficiente tuve con la reprimenda de Carlisle esta mañana.

-Oh, pobrecito, en fin aquí te dejo la revista, supongo que las fotos te ayudaran a no extrañar tanto a Fernanda

Inmediatamente tomé la revista y efectivamente aparecían fotos de mí y ¿Fernanda?, en la cafetería esa, en otra se veía claramente como Fernanda me besaba, había otras fotos las cuales fueron tomadas en el "tour" que di a Jackie y sus "amigas". El texto decía lo siguiente:

 

"Edward Cullen no pierde sueño ni tiempo en cuanto a mujeres se refiere"

Luego de tantas y tantas relaciones esporádicas,

nuestro sexi empresario, Eward Cullen fue visto

el fin de semana en compañía de una bella mujer,

se desconoce su identidad, pero por las imágenes

podemos comprobar que su nombre no será un secreto

por mucho, Durante el fin de semana se les vio

muy acaramelados dando un recorrido por las calles de

Nueva York, posteriormente en una cafetería del centro

comercial de Brooklyn, lugar donde compartieron un

ardiente beso a la vista de todos los presentes.

¿Será posible que finalmente ha aparecido la mujer

capaz de robarnos a nuestro soltero empedernido de Nueva York?

 

 

 

Genial, esto se estaba poniendo cada vez mejor…

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Una semana después…

Viernes 10:00 am – aeropuerto de Nueva York

Estaba entrando en la sala de espera del aeropuerto con las maletas, esta semana fue agotadora, recién firme el contrato con Surley, tuve que salir inmediatamente rumbo al aeropuerto de Washington donde aborde un avión con destino a Londres, los hoteles me retuvieron mucho tiempo, las finanzas estaban por los suelos, después de ajustar valores y despedir al gerente general tuve que esperar haciendo entrevistas para el nuevo gerente, una vez localizado el candidato adecuado, tuve que ponerlo a prueba por 2 días, lo peor fue que mis planes con cierta camarera, se vieron suspendidos indefinidamente, pero al fin había vuelto, y esta noche seria el gran día, pero primero debía irme a descansar no sin antes despedirme de Carlisle y Esme, pues hoy volvían a Masen, de hecho su vuelo salía en poco minutos.

-Hijo – saludo Esme con un abrazo – crei que no alcanzarías a llegar y despedirnos correctamente

-Lo bueno que ya estoy aquí mamá, sinceramente les deseo buen viaje - dije hablando a ambos.

-Gracias hijo – dijo Carlisle antes de abrazarme, mientras me susurraba en el oído – por cierto vi esas notasen la prensa rosa, no sabía que había alguien en tu vida hijo, es significa que mi plan no servirá, pero estoy feliz por ti, por haber decidido sentar cabeza.

-No padre, no tengo ninguna relación en este momento, no creas una palabra de ese tipo de revistas – antes de darle tiempo a Carlisle de responder, oímos el tercer llamado para abordar el avión que tomaría Carlisle y Esme. Nos despedimos entre abrazos, besos, consejos y buenos viajes. Antes de irse Carlisle me entregó una nota.

Al salir del aeropuerto Jane me esperaba fuera, me llevo al departamento, de camino a casa lei la nota de Carlisle "Ya hablaremos después", en cuanto llegue al edificio donde vivía suspire aliviado, al fin podría descansar y finalmente hacer de las mías por la noche.

Dormí felizmente por 7 horas seguidas, desperté cerca de las 6:00 pm, comencé a alistarme para esta noche, nuevamente le pedí a Carmen preparara una cena suculenta antes de salir para dirigirme al club Twilight, tenia planeado entrar al club, pero recordando lo atestado que estaba en días como hoy Viernes, opte por ir a la cafetería, el ambiente era el mismo que la samana pasada pero por fortuna en esta ocasión había una mesa disponible, tomé asiento y esperé me atendieran, finalmente lo hicieron y fue nada mas y nada menos que Marie.

-Hola preciosa, nuevamente volvemos a vernos – sonreí de lado

- Así es, señor último escándalo Cullen – dijo con sorna

- Veo que los cotilleos vuelan

- Sí, bueno es difícil ignorarlos, especialmente cuando llenan las portadas de todos y cada uno de los diarios.

- Supongo que si – dije encogiéndome de hombros.

- En fin ¿Qué desea ordenar?

- Un café romano y… pay de piña

- De acuerdo, enseguida vuelvo

Entre tanto repasaba mentalmente los pasos del plan, recibí una llamada de Seth

-¡Eddy! - ¿Dónde estás?, estamos fuera de tu apartamento, listos para hacer una gran fiesta, hay chicas preciosas.

- Lo lamento Seth, no estoy en casa, estoy con .…con el mecánico, si eso es, con el mecánico, mi adorado volvo se averió.

- Bien, entonces proporciónanos la dirección y en un santiamén te recogeremos para dar inicio a una noche alocada.

- ¡No!, quiero decir, no es necesario, además no estoy de humor para fiestas, tuve una semana muy pesada.

- Ya veo, por lo menos no quedaste atrapado en una cena de negocios como Garret, bueno suerte con el volvo. Hablamos después.

- De acuerdo, adiós Seth….

Había pasado un par de horas en la cafetería Luna Nueva, iba por mi quinto café e incluso el descanso de Marie había finalizado, estaba feliz de poder observarla, pero me obligue a salir de la cafetería, sería demasiado sospechoso si continúo sentado con la mirada fija en mi castaña.

Una vez fuera de la cafetería, fui por mi preciado volvo, estacioné a una cuadra de distancia para no levantar sospechas, ahora solo restaba esperar a que finalizara el turno de Marie.

Tranquilamente esperaba con la vista fija en la puerta de salida cual si fuera un halcón asechando su presa. Inesperadamente oi una voz conocida que me hizo gemir internamente.

-Edward, oh por dios eres tú

- Hola Fernanda, que coincidencia encontrarte aquí

- Lo mismo digo querido, ¿sabes? He intentado localizarte toda la semana, quería pedirte disculpas por las notas, ya sabes las que aluden a un supuesto romance entre nosotros, te juro que no tuve nada que ver.

- Tranquila Fernanda, no te culpo, además, pronto lo olvidaran – dije con una sonrisa forzada, intentando dejar zanjado el asunto, pues quería se fuera pronto, pero no podía gritarle ¡lárgate!, para mi mala suerte ella se recargo contra el auto y agregó seductoramente

-Entonces, que te parece si vamos a bailar un momento

- Seria agradable, pero tuve una semana pesada, estoy agotado y no tengo ganas de nada.

- Ya veo, pero dime ¿Qué haces aquí tan solo?

- Solo quería salir a ….. contemplar la noche – callé abruptamente pues justo en ese instante iba saliendo Marie, si Fernanda no se iba pronto ….." no, otra vez no" me repetía, no es posible frustrar mi plan nuevamente. Lamentablemente Fernanda captó la dirección de mi mirada y agregó

-Ahí van la recta señorita – dijo en tono de burla

- ¿La conoces? – cuestioné

- Por supuesto, me robo a mi adorado novio el año pasado, pero al parecer Tyler se cansó de ella y solo por lastima le ha dado trabajo como camarera en su club.

Una inesperada e incontrolable ira me invadió al saber a Marie en manos de otro, no quería que nadie la tocara, pero ya me encargaría de ello una vez fuera mi amante.

-Y ese tal Tyler, ¿te ha llamado últimamente para volver contigo?

- No, y aunque lo hiciera, no lo aceptaría nuevamente, tengo algo mejor en mente – dijo mirándome seductora, necesitaba alejarla ¡ya! Y finalmente vino a mi una maravillosa idea, mataría a dos pájaros de un solo tiro.

- Puedes desquitarte de ella si lo deseas – la incité

- No veo como

- Simple, solo debes distraer a los guardias apostados en la entrada del club y la cafetería, yo me encargo del resto

- Uhm, suena interesante, ¿acaso la odias también?

- No precisamente, pero sería interesante jugarle una broma

- Estoy de acuerdo, pero dime ¿Qué obtengo a cambio querido?

- Satisfacción al ver a tu enemiga totalmente intimidada, incluso suplicando – ella dudó un momento

- No lo sé, ¿Cómo piensas intimidarla exactamente?

- Eso no es relevante en este momento, pero no te parece atractiva la idea, o pongamos la situación de esta manera ¿Qué te gustaría a cambio? – antes de que ella contestara, vi como Marie comenzaba a caminar en mi dirección y rápidamente dije – lo que sea que quieras, puedes pedirlo pero ahora debes distraer a los guardias

– De acuerdo – e inmediatamente se alejó – no necesitas esperar mi respuesta, quiero una cita … - deje de prestarle atención, ahora debía actuar y rápido.

Con el auto fui acercándome lentamente mientras observaba la actuación de Fernanda con los guardias, sigilosamente fui acercándome a Marie, por fortuna tuve la sensatez de vestirme de negro, sería más fácil. En el momento justo detrás de mi objetivo, ella al parecer noto mi presencia, porque pude ver claramente como tensaba el cuerpo, pero no tuvo tiempo de nada porque cual se tratara de un felino al acecho de su presa, me abalance sobre ella cubriéndola con una manta negra mientras con la mano libre le sujetaba la boca, impidiendo que gritara, al principio comenzó a retorcerse tratando de liberarse, aplique más fuerza en el agarre que mantenía a la altura de sus antebrazos, e intentando ocultar mi voz normal, le dije al oído:

-Tranquila preciosa, no querrás impacientarme ¿o si? – no esperaba que mi voz fuera tan rasposa, quedé impresionado y ella también porque dejo de luchar por unos instantes, los cuales aproveché para cubrirla totalmente con la manta, atándolo por los lados, con ayuda adicional de la música proveniente del club sus gritos fueron amortiguados perfectamente, la cargue sobre el hombro, colocándola en el maletero del auto, sin perder tiempo subí al volvo y conduje como poseso hacia mi apartamento.

Una vez en el estacionamiento del edificio, abrí la cajuela, viéndola retorcerse por liberarse de la manta, volví a cargarla sobre el hombro no sin antes advertirle

-Mantén la boca cerrada niña, en este lugar hay tipos peores que yo y si te descubren no tendré problemas en dejar que se diviertan con tu delicado cuerpo – la amenaza surtió efecto porque dejo de moverse, con una sonrisa en el rostro, salí del estacionamiento, saludé con un asentimiento de cabeza al guardia en turno quien me observó con el ceño fruncido por el saco sobre mis hombros, en vez de dirigirme hacia los elevadores por temor a encontrarme con vecinos curiosos, decidí hacer el recorrido por las escaleras, pues nadie solía usarlas, por fortuna la chica no se movió, tranquilamente ingresé a mi apartamento, llevándola directamente a mi habitación y sin encender la lámpara pues no era necesario, la luna iluminaba la estancia, suavemente la coloque sobre la cómoda cama. Comencé a desatar la manta que la cubría, en cuanto se vio libre ...

-Hola Marie, preciosa.. – no termine la frase porque ella me arrojo algo a la cara, dando en el blanco, trastabillé hacia un costado con expresión sorprendida, mientras ella retrocedía para volver a atacarme con su bolso.

-Eso fue por asustarme, ¿Quién eres? – Demandó antes de golpearme nuevamente -– ¿Dónde estoy? - Bang, otro carterazo - ¿Cómo sabes mi nombre? – Bang, instintivamente alce un brazo para proteger la cabeza de un posible traumatismo craneoencefálico, pero un nuevo bolsazo golpeo mis costillas, y dios, siempre me he jactado de ser un hombre fuerte pero eso dolió, en serio dolió, la sorpresa ante tan feroz ataque y el golpe en sí, me hizo tambalearme un poco, intente recuperar el equilibrio pero no fui lo suficientemente rápido para evitar otro bolsazo en pleno pecho, sujeté el bolso de sus manos lo más rápido posible al tiempo que ella lo impulsaba hacia adelante para un nuevo ataque, la acerque a mi cuerpo y mientras mantenía fijo el bolso con una mano, con la otra rodee su cintura con firmeza.

-Dios mío – exclame con incredulidad – estoy seguro que eres cinturón negro en la técnica de ataque con bolso. Pensar que yo como un idiota la tenia por una mujer frágil y delicada que necesita ser cuidada con suma suavidad, cuando al parecer que el que necesita protección soy yo.

-¡Usted! - habló sorprendida pero instantes después Marie apoyó ambas manos contra mi pecho y empujó con fuerza, no me moví un solo centímetro -¡Suélteme! -gruñó

En lugar de obedecer, lance una risita

-¡Bueno, bueno! –dije

-¡Nada de "bueno, bueno" conmigo!

-¿Entonces qué quiere que haga?

-Si no me suelta inmediatamente, lo morderé, y fuerte.

No dudaba que cumpliría su amenaza, en esta ocasión obedecí y la solté con una sonrisa. Marie retrocedió, se alisó la ropa, se pasó la mano por el pelo y ….. perdí todo sentido a mis pensamientos al quedarme sin aire, ella….. me dio un puñetazo en el estómago con una sorprendente fuerza, aun dolorido agarre su puño antes de que me pegara nuevamente

-¿Qué diablos te sucede, dijiste que no habría agresiones si te soltaba – gruñi

-Corrección, dije que no te mordería, en ningún momento hable sobe no golpearte – habló con suficiencia, al ver que aun no me enderezaba, comenzó a caminar por la habitación – Es imaginación mía o me has traído a tu casa.

-Es mi apartamento, te hice creer lo del secuestro porque obviamente no aceptaría venir de buena gana.

-Tienes razón, pero ¿Por qué querías que viniera? – hablo con el ceño fruncido – Mira Cullen juro que si me dices que pretendías que me abriera de piernas en esta cama te golpearé con…. Con este jarrón -dijo tomando un florero.

-¡Hey! No, solo quería invitarte a cenar…. Y después en agradecimiento tú podrías – calle nuevamente al verla arquear una ceja y acercarse amenazadora – no quise decir eso.. solo…

-Claro que quisiste decirlo, pero dejémoslo en el olvido, ahora que lo mencionas, aun no he cenado, así que donde están tus modales de buen anfitrión – dijo colocando los brazos en jarras en su cintura.

Sorprendido ante inesperados cambios, finalmente pude enderezarme sin sentir dolor y le indique tomara asiento frente a la mesa colocada convenientemente por Carmen en mi habitación, note en su mirada la indecisión, por lo cual deduje que estaba incomoda en mi habitación, propuse salir y cenar en la sala.

-¿Sabes? – hablo pausadamente – es la primera vez que me secuestran solo por una invitación a cenar, estas medio loco ¿lo sabías?

-Sí, pero trato de ignorar esos comentarios la mayor parte del tiempo – agregue

-No lo dudo

- quiero proponer algo

- Usted dirá señor secuestrador Cullen

- Con que estamos graciosos ¿eh?.....  en fin,  propongo que comencemos de nuevo ¿que te parece?

- ¿Quieres decir que no harás mas locuras en cuanto a mi persona se refiere y por lo tanto no tendré el glorioso placer de golpearte por ello?

- No puedo prometer dejar las locuras, pero lo intentaré, todo sea por evitar tus ataques, ciertamente no deseo ser desfigurado,  hasta el momento casi me dejas cojo, manco, con daño cerebral irreparable…. Bueno entonces ¿Qué dices? . Hola soy Edward Cullen, empresario, masoquista y no pienso hacer nada estúpido… por ahora.

-De acuerdo. Hola soy Isabella…. Soy camarera, y me gusta golpear a empresarios locos y masoquistas – dijo con una sonrisa.

-Un momento, ¿Isabella? …. ¿Entonces por qué te haces llamar Marie en tu trabajo?

-Efectivamente, ese es mi nombre, por cierto, tenemos tregua ¿recuerdas?  Eso no significa que vaya a revelarte todos mis secretos, algún día lo sabrás, por el momento mantén la esperanza – finalizó con una sonrisa.

Después de aquel breve intercambio de palabras la cena continuo en silencio, al finalizar me ofreci a llevarla a su casa, lo cual se negó, argumentando que prefería ir en taxi, intenté negarme, pero en vista de nuestra reciente tregua cedí, no sin antes convencerla de que yo pagaría el taxi, por fortuna no puso objeción, en cuanto llego el taxi, la acompañe abajo y vi como se alejaba en la distancia….. Sencillamente este día fue loco, descubrí que debería andar con precausion respecto a Marie quiero decir Isabella de ahora en más, esa chica era de armas tomar, con una sonrisa, volví a subir, quizás la noche no concluyo como esperaba pero al menos obtuve algo bueno de todo esto.

Capítulo 9: Plan Capítulo 11: Venganza (parte I)

 
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