Escapa (+18)

Autor: OvejaSwanCullenBlack
Género: + 18
Fecha Creación: 24/01/2014
Fecha Actualización: 27/04/2014
Finalizado: NO
Votos: 5
Comentarios: 29
Visitas: 12690
Capítulos: 15

Escapar, correr sin mirar atrás, huir de todos mis males. Es la única respuesta a todo lo que he vivido. No me importan las ramas lastimando mis brazos, no me importan las raíces haciéndome tropezar en la oscuridad, solo me importa llega al otro lado del bosque y encontrar mi salvación. 

Y si esos ojos color esmeralda lo son...

¡Bienvenido seas a mi vida!

 

Los personajes pertenecen a S. Meyer. La historia es de mi autoria. 

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 15: Es mi desición.

PERDOOOOON!!! Si, lo sé, dos meses sin capítulo, sé que es mucho. perdón ! mi inspiración se fué, se esfumó, con decirles que hace un mes y medio que estoy escribiendo este capítulo! :S todos los días decía.... tengo que escribir, abría la campu, abría el word (que por dos semanas no me andubo) y ahí estaba... sin escribir... no podía seguir. ! :S pero bueno, aquí esta.... lo mejor que pude hacer en este tiempo... sabiendo que me podrían matar, Maru ya me quiere matar jijiji! pero bueno... LOS QUIEROOOO! :D 

besoooos! :D 

 

Capítulo 14: Es mi desición .

 

El camino de vuelta fue en un silencio un poco incómodo. Sentía cómo Jake quería decirme algo, pero no se atrevía y yo tampoco pensaba alentarlo. Además, apenas me dejaba dar un paso sin sujetarme del brazo pidiéndome que tuviera cuidado. Su única respuesta a mi mirada enojada era “puede hacerle mal al bebé”, lo que me causaba ternura.

Al llegar a su casa, tuvimos una pequeña discusión sobre si me acompañaba o no hasta mi casa, pero termine convenciéndolo de que no era conveniente, ya que no tendría cómo volverse. Aunque le prometí que al llegar, le enviaría un mensaje de texto, prometiéndole que había llegado entera.

Durante el viaje, mi mente estaba media perdida en la imagen de mi como madre, sentía una mezcla de miedo, felicidad y horror. El miedo, era hacia la idea de ser madre tan joven, no sabía nada sobre bebés y no me sentía segura de ser buena en esto. La felicidad, era porque a pesar de todo, algo estaba creciendo dentro mío, una vida, una pequeña personita inocente que me brindaría su amor a pesar de todo. Y el horror, el sentimiento más poderoso dentro de mi mente, era por el saber que esa pequeña criatura era de aquel intento de hombre que me había ultrajado.  

Comencé a concentrarme en el camino cuando noté que me aproximaba a la entrada de la casa. Abrí el garaje con el control automático y estacioné el auto de Jazz en su lugar, entre el volvo de Edward y el jeep de Emmett. Al bajarme, le envié el mensaje a Jacob.

“Ya llegué Jake, y estoy totalmente completa. Lo juro. Bella”

Sonreí pensando en la cara que pondría al ver el mensaje y caminé directo a la puerta que comunicaba el garaje con el salón de la entrada, justo antes de pasar la puerta, recibí la respuesta de mi amigo.

“Creí que no llegarías ni a la esquina sin llamarme para decirme que se te había pinchado una rueda, es maravilloso que hayas llegado a tu casa sin un rasguño. Nos vemos mañana. Jake.”

Rodé los ojos, mientras cerraba el mensaje y entraba a la casa. Estaba por avisar que había llegado, cuando escuché unos gritos en el cuarto de al lado, y como buena curiosa, guardé silencio mientras cuidadosamente me acercaba hacia allí. Me escondí junto al marco de la puerta y me concentré en la conversación de mi familia.

-¿Cómo es que aún pueden considerarlo?-Gritaba Alice, parecía furiosa. Me sorprendí, nunca la había escuchado así, ni siquiera la vez que Emmett le tiró jugo en sus zapatos nuevos.-¡Es una locura! ¡No pueden considerar la idea de seguir con esto!-

-¡¿Y tú como puedes considerar el detenerlo Alice?!-Ahora la que gritaba era Rose. Parecía que lo que discutían era algo importante, porque jamás creí ver a las chicas pelearse de este modo.-¡Es un bebé, una criatura que aún no nace!-¿Un bebé? ¿De qué están hablando? Cada vez estaba más intrigada.

-No le hables así Rosalie.-Gruñó Jasper, defendiendo a su novia.- No te olvides de dónde viene ese bebé, no es algo deseado. Ella no tendría por qué sufrir eso y ese bebé solo la haría recordarlo constantemente. ¿Acaso eres tan egoísta como para pensar más en un bebé para malcriar que en tu “tan querida hermana”?- La manera en la que dijo las últimas palabras, me causó una opresión en el pecho. ¡Se estaban peleando por mi bebé! Estaban decidiendo que pasaría con él. O ella.

-¿Y tú Jasper? ¿Pensaste en que ese bebé es una persona? Es una pequeña criatura hermano. Y tú estás pensando en asesinarlo. En no darle la oportunidad de nacer siquiera.-La voz de Emmett estaba llena de furia mientras le gritaba a su mellizo.

-¡Aún no nace, no es una persona!-Gritaron Alice y Jasper al mismo tiempo. Escuché el ruido de la madera ser arrastrada por el piso, y supuse que ahora los cuatro estaban de pie.

-Su corazón late.- Protestó Rosalie.- Mamá ¿tú qué opinas?- Presté más atención ahora, aunque sentía que me desvanecía de la furia.

-Yo no opino nada Rose. Yo no puedo opinar sobre el embarazo de otra persona. Bella es quien decidirá lo que haga con su hijo. Porque es su hijo, no menos de lo que lo es de aquél hombre. Sea cual sea su decisión, yo la apoyaré. Porque ese es mi deber como madre, acompañar a mis hijos en el camino que tomen y, sobretodo, porque así lo deseo.-Sus palabras me alegraron y me hicieron caer unas lágrimas de felicidad. Agradecía su apoyo con todo mi corazón.

-Opino lo mismo que Esme chicos. No podemos querer decidir sobre lo que Bella haga con su embarazo. Es su vida y no la nuestra. Y ella es la que decidirá, lo único que haremos nosotros es acompañarla y aconsejarla en lo que necesite. Y ustedes, no deben pelarse por esto.-Habló Carlisle con esa sabiduría que lo caracterizaba. La sala se quedó en silencio por unos minutos, en los que estuve tentada a entrar, pero aún faltaba que hablara un miembro de la familia, el único por el que cambiaría de opinión.

-¿Tú que dices Edward?-Preguntó Rose más calmada. Se escuchó un suspiro que solo podía salir de él, y el movimiento de una silla, como si se estuviera acomodando en su lugar.

-Yo creo…-Empezó con la voz temblándole, como si no estuviera seguro.- Creo que, sea lo que sea que Bella elija estará bien para mí. Es su vida y no puedo obligarla a tomar decisiones. Decida lo que decida, seguirá siendo mi Bella.- Casi lloro con sus palabras.- Y para ustedes debe ser igual. No tendríamos que estar discutiendo entre nosotros sobre lo que ella va a hacer, deberíamos estar pensando en cómo ayudarla. No se olviden que esta mañana decidimos por ella que no fuera al colegio, y terminó escapándose, enojada con nosotros. No estoy de acuerdo en invadir sus decisiones y menos en que las quieran tomar por ella.

Decidí que ya había esperado y escuchado lo suficiente, sentía una mezcla de furia, tristeza, felicidad y sobre todo mucha confusión.

-Gracias.-Murmuré con los ojos aguados. Todos se voltearon a verme asustados y sorprendidos. Miré a cada uno con un sentimiento distinto en mi mirada y le sonreí a mis padres y Edward.- Gracias por defender mi opinión. No sé cómo habrá salido el tema en su conversación o si se sentaron a hablar de eso justo cuando llegué, que sería mucha casualidad, pero solo quiero decir unas palabras, que tratándose de un tema sobre mi vida, creo que son importantes.- Noté como Alice bajaba la mirada y agarraba la mano de Jasper, apenada.- Venía hacia aquí con una decisión tomada, creyendo que lo que había elegido estaba bien. Venía contenta y realizada, con la idea de comentarles mi decisión y que me brindaran su ayuda. Pero al llegar, me encuentro con que estaban discutiendo, opinando sobre mí, sin esperar a saber lo que había elegido. Sin esperarme. Sin estar yo presente.- Emmett y Rose desviaron la mirada.- Creo que es justo para mi decidir sobre mi hijo o hija. Porque eso es lo que es, mi hijo. Decida o no tenerlo, es mi hijo. Y no seré una asesina si decido dejarlo.- Gruñí girándome a Rose.- Ni una estúpida por no hacerlo.- Ahora me giré hacia Alice.- Solo quiero que me acompañen y me ayuden en esta experiencia nueva para mí. Apenas tengo dieciséis años, pero sé que puedo hacerlo. Sé que puedo ser madre.- Todos me miraban, realmente sorprendidos. – Y lo único que pido es que me apoyen en esto ¿Si?- Pregunté soltando una única lágrima que sequé rápidamente. –No me enojaré con ustedes, pero quiero que sepan que, aunque lo haya repetido muchas veces ya, no pueden decidir por mí.- Edward se levantó y caminó hacia mí, agarró mi mano y la apretó suavemente.

-Yo te apoyaré Bells. Siempre te apoyaré. Y te ayudaré en todo lo que necesites. Estoy aquí para ti y para tu bebé. Seré lo que tú quieras para él, seré su tío, su amigo y hasta su padre si tú así lo quieres. Te quiero, y mucho más de lo que crees, y no me importaría que tu hijo y el mundo exterior a esta casa creyera que yo soy el padre de ese pequeño.- Dijo llevando nuestras manos unidas hacia mi plano vientre. Con mis ojos llenos de lágrimas de emoción lo miré y lo abracé con fuerza.

-Gracias Edward, muchas gracias. Me encantaría que fueras el padre de mi hijo. Me encantaría decirle que tú eres su padre más que decirle la verdad.- Murmuré agradecida soltando todas las lágrimas. Pude ver a Esme levantarse con una sonrisa, acompañada de Carlisle.

-Entonces… ¿Eso quiere decir que seremos abuelos?-Preguntó con una sonrisa emocionada. Yo asentí y ella corrió a abrazarnos.- Gracias Bells, consentiré mucho a ese bebé.- Y no negaba que pudiera ser verdad. 

Capítulo 14: PERDON!

 
14439859 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10757 usuarios