El sol enviaba algunos rayos de luz entre las nubes, desperté y baje a la cocina a ayudar a la mamá y hermana de James a preparar el desayuno, después de todo lo sucedido seria un día especial, tal vez hoy se arreglarán las cosas, tal vez me diría que me ama y que lo que me había dicho era solo por enojo pero que no quería estar lejos de mi.

Los últimos meses con James habían sido un poco difíciles, no sé cómo o cuando fue que las cosas cambiaron, de un momento a otro nuestras discusiones eran constantes, no había un solo día que no discutiéramos, nuestros celos eran la mayor causa, nos habíamos alejado un poco de nuestros amigos, los que permanecían cerca eran Victoria y Jacob, ella por ser su hermana y él, muy a pesar de James, era mi mejor amigo, hubo un tiempo en el que Jake se alejo de mí, no quería verse inmiscuido en mis asuntos con James, además de que sentía que nuestra amistad no le permitía tener amistad con los demás, me dolió mucho, fueron como dos semanas en las que estuve deprimida, James parecía muy contento y estuvo pendiente de mi, las cosas cambiaron cuando le dije que Jake había vuelto a hablarme, que era como si no hubiese pasado nada; los celos de James volvieron, pero además de eso su actitud conmigo ya no era la misma, me gritaba, me trataba como si mi presencia le molestara, yo le decía que si ya no me amaba solo me lo dijera y que ahí dejábamos las cosas, después de decirle eso volvía a ser tierno y cariñoso conmigo. Ni su mamá, hermana y yo entendíamos que sucedía con él, tal vez se dejaba influenciar por sus nuevas amistades, ya no salía con nosotros, se escapaba de la escuela muy seguido, hasta donde yo sabía, él había estado bebiendo y fumando, así que nuestras sospechas llevaban más probabilidad de ser ciertas que puras figuraciones de nosotras, aunque yo tenía una sospecha más… algo dentro de mi sentía que si estaba tan distante conmigo era porque estaba interesado por alguna de las chicas de su nuevo grupo de amigos, y por más que yo le suplicaba que me lo dijera siempre lo negaba. Hace algunos fines de semana había estado a punto de lastimarme, no me esperaba su reacción:

Flashback

• Vicky, prepara la ensalada en lo que yo termino de preparar la comida – le pidió su mamá, yo me encontraba con ella sentada al otro lado de la barra de la cocina.

• Si ma’, ahorita lo hago – le respondió ella mientras seguía conversando conmigo y mensajeandose con su novio, desde que lo había conocido no había poder humano que la separara de él. James volvía de hacer algunas “tareas” con sus amigos y de haber pasado al súper a comprar lo que hacía falta para comer.

• Vicky!!... deja ese celular y ayúdame – repitió su mamá.

• Ahorita voy… o dile a mi hermano.

• James, ayúdame con la ensalada, por favor.

• Y yo porque??!! – respondió él todo alterado – yo ya fui a comprar lo que te hacía falta!!.

• Porque es una orden y te estoy mandando yo! – le dijo su mamá en el mismo tono.

• Pero es que mamá – se acerco a preparar la ensalada, tomo el cuchillo y comenzó a cortar lechuga – siempre es lo mismo, Victoria no hace nada, todo lo tengo que hacer yo, yo soy su…

• Mira James, si no quieres hacer las cosas no las hagas, todo el tiempo te estás quejando – se metió Victoria a la cocina, ya los tres estaban discutiendo. Yo intente calmar las cosas.

• Ya cálmense, yo hago la ensalada, no discutan. – tome la mano de James donde tenía el cuchillo.

• No!!! Yo lo hago – y jaloneo el brazo pasando el cuchillo cerca de mi cara, yo me espante y lo solté. Tal vez pudo percibir mi miedo cuando cruzo su mirada con la mía, nos quedamos en silencio sin saber qué hacer, hasta que él arrojo el cuchillo a la barra y salió de ahí.

• Hija, estas bien?? – me pregunto su mamá mientras se acercaba.

• Si mami, no te preocupes. – así le llamaba yo de cariño.

•  Nena, discúlpanos, es que ya sabes cómo anda mi hermano.

• Si no se preocupen, estoy bien, solo fue el susto de que me hubiese lastimado.

• No, mi hermano podrá alterarse todo lo que quieras pero nunca hará nada por lastimarte – claro, era su hermano y tenía que defenderlo, pero ella no vio pasar un cuchillo cerca de sus ojos.

El resto de la tarde James no salió de su habitación, me envió un mensaje pidiéndome disculpas, no tenía cara para hacerlo de frente. Al llegar la noche, nos encontrábamos en la sala viendo la televisión, él se nos unió pero nadie comento nada a cerca del incidente anterior. Ya era algo tarde, sus papás se fueron a dormir, después les siguió Victoria y por ultimo yo, me despedí de él pero me siguió tomándome de la mano hasta la habitación donde yo me quedaba. Me causaba un poco de temor que alguno de sus papás o hermana entraran y malinterpretaran las cosas pero yo quería estar un rato más con él. Me recosté en la cama mientras él sólo se sentó pasando su brazo debajo de mi cabeza, estuvimos platicando un rato cuando el sueño me ya vencía, le pedí que saliera de la habitación pero:

• No bebe, me quedare aquí hasta que te duermas. – me dijo acomodándose junto a mí con su brazo bajo mi cabeza, me pareció algo muy tierno, así que gustosa comencé a acomodarme.

• Entonces – saque su brazo de debajo y lo iba a acomodar para que cuando me durmiera no tuviera problema al sacarlo pero creo que él malinterpreto las cosas…

• Entonces qué?? Si no quieres que me quede mejor dímelo!! – me dijo a los gritos, me empujó y comenzó a levantarse.

• No, bebé espera!! – lo tome del brazo e intente retenerlo, pero él era más fuerte que yo y se soltó con facilidad.

• Bebé nada… ya te lo dije, si no me quieres aquí dímelo, para mi que quien ya se aburrió eres tú y buscas culparme a mí, pero cuando tú quieras yo no voy a querer!! – me grito por última vez y salió azotando la puerta.

Mis ojos picaban, tenía las lágrimas contenidas, por qué me trataba así, que le había hecho, estaba enojado eso era seguro… ya no aguante más y me solté a llorar hasta que me venció el sueño.

Fin de flashback

Así eran todos nuestros días juntos, discutíamos por pequeñeces, él se enojaba, yo suplicaba, nos reconciliábamos e iniciábamos de nuevo con el ciclo. Anoche había llegado muy tarde, yo me quede a dormir con su hermana como era nuestra costumbre los fines de semana, cuando llegó solo me saludo, discutió con su hermana y se metió a su habitación.

• Hija estás aquí o por donde andas, estás muy distraída – me decía su mamá mientras agitaba su mano frente a mis ojos.

• Si mami, disculpe, es que andaba pensando otras cosas.

• Si, es lo que veo, pasa algo??

• No!! Solo son cosas de la escuela, tareas, presentaciones, ya sabe- trate de sonar convincente, pero por sus ojos yo sabía que no me estaba creyendo.

• Mmm está bien… tú crees que James no quiere bajar a desayunar, ya fue Vicky pero tampoco con ella quiso – tal vez se sentía incómodo conmigo.

• Y si voy yo,  a lo mejor lo convenzo – podía intentarlo, al menos aclararle que no tenía porque sentirse así.

• Ve hija si quieres, solo espero que este chamaco no te haga alguna grosería.

Llevaba el pulso acelerado, esto era lo más cerca que iba a estar de él, después de toda esta semana. Entré a su habitación, lo vi tendido en la cama, durmiendo como un bebé, como mi bebé, de quien yo estaba enamorada, cuándo había cambiado tanto?... con cuidado me senté a observarlo por unos instantes, no pude evitar llevar mi mano a su rostro para acariciarlo, en cuanto sintió mi caricia y despertó, se alejo tanto como pudo de mi en la cama.

• Que haces aquí?? – estaba entre extrañado, enojado y… triste?

• Eehh… vine a decirte que el desayuno está listo – por un segundo olvide a que había ido realmente.

• Si ya lo sé pero no quiero, ya le dije a mi mama y a Victoria, porque insisten.

• Es por mi??, te incomoda que yo esté aquí??

• No! Claro que no, solo no tengo hambre, porque piensas esas cosas.

• Será porque es tu desayuno favorito y ni aun así dejas de estar de flojo?? – intente bromear pero él no sonrió – además porque, ve como reaccionas ante mi presencia, mira, yo se que las cosas entre tú y yo…

• No Bella, no es eso – Bella?? Dolía como mil espinas clavadas en el pecho que me llamara por mi nombre – solo no tengo hambre, sabes que llegue tarde anoche, tengo sueño.

• Si pero… - baje un poco la cabeza, no quería que sonara a chantaje ni nada pero mis ojos comenzaron a llenarse de lagrimas y solo pude decir – pensé que si hacia tu desayuno favorito bajarías a comerlo.

• Ven – tomo mi mano y nos levantamos de la cama – espérame aquí – entro al baño, a los pocos minutos salió, por lo que vi se aseo un poco y cambio su ropa – Listo, vamos a desayunar – sonrió con esa sonrisa que me alimentaba el alma, sus labios, los extrañaba tanto, me acerque un poco más a él, pero me tomo del brazo y bajamos a desayunar.

• Que le dijiste?? – me pregunto su mamá al oído.

• Nada, solo que era su desayuno favorito.

• No se porto grosero?? Tardaron un poco. – en sus ojos había cierta complicidad.

• Ah! Es que no quería despertarse – sentí mis mejillas arder, será que su mamá sabía que era lo que pasaba entre nosotros??.

El desayuno siguió tranquilo, platicando y haciendo bromas como otras veces, pintaba para ser el día en el que pudiéramos hablar, iríamos a las albercas pero el clima no tenia los mismos planes, estaba nublado y se sentía un poco de fresco así que tendríamos que cambiar al plan B cuando Jane llegó.

• Ya sé! Vamos al cine, hay una película buenísima que me recomendaron – dijo Jane muy entusiasmada.

• Si vamos, yo estoy muy aburrida aquí – le siguió Victoria, yo no tenía muchas ganas de ir.

• Yo creo que mejor vayan ustedes y yo me voy a mi casa. – lo que realmente quería era que se fueran para que yo pudiera hablar con James.

• Ay que decirle a mi hermano a ver si quiere ir – Victoria corrió hacia la sala, donde estaba James con su música.

• James!! Quieres ir con nosotras al cine??

• No, gracias… tengo flojera – parecía muy entretenido con su celular, a quien estaría mensajeando??

• Ay ándale no estés de aguado igual que Bella – le suplico ella.

• Mmm… déjame pensar… quienes van??

• Jane, Bella y yo – entre Jane y ella se miraron creyendo que así yo ya no tendría escapatoria.

• No! Yo no voy, dije que me iría a mi casa – como siempre querían salirse con la suya.

• Está bien, solo esperen a que me bañe – se levanto del sofá y fue a su habitación.

• Ni modo Bella, ahora somos tres contra una, vienes con nosotros – dijo Victoria con ese tono de suficiencia que le caracteriza.

• Pues ya que… - me sentía molesta, yo lo que quería era hablar con James, en toda esta semana solo habíamos hablado por mensajes, necesitaba que aclaráramos las cosas en persona, esto me estaba matando por dentro un poco más a cada minuto que pasaba, tenía muchas dudas.

• Bueno, en lo que se baña tu hermano, cuéntanos cómo vas con Laurent – Jane lucia emocionada… de las tres, Victoria era la única, técnicamente, que tenía novio, ya no pertenecía al clan de las “forever alone”.

• Pues, vamos bien, es tan lindo y atento conmigo… ya sé que les dije que no sería cursi, pero con él todo es tan natural – se notaba lo enamorada que estaba, le brillaban los ojos y su sonrisa era autentica.

• Y Edward, no lo has visto?? – Edward, como estaría pasándola con esto, perder prácticamente a su mejor amiga, tal vez estaba como yo cuando Jake decidió alejarse de mí por un tiempo.

• Mmm ni me hables de él – se habrían peleado?... – anda enojado conmigo.

• Para mí que él quiere algo contigo – soltó Jane, sería cierto, a estas alturas todos sospechábamos eso pero a lo que sabíamos nunca anduvieron.

• No!!, es que se puso a criticar a Laurent y yo le puse un alto, porque yo no ando criticando a las chavas con las que él sale, pero hubiesen visto, fue la discusión del año… y me dijo que era una tonta, que como podía andar con Laurent, habiendo tantos chavos buenos y que realmente me quieren como él...

• Veees!! Te lo dije, él está enamorado de ti.

• Pues a lo mejor, pero es un tonto, porque no me lo dijo antes??, tal vez…

• Tal vez hubieses andado con él?? – de pronto la tristeza y la duda me invadieron, no sé porque sentí un pequeño tirón en mi estomago, tal vez era por pensar que ellos si se amaban, no como… James y yo.

• No!! Él es mi amigo, muchas veces nos preguntaron eso, pero no!! Con decirles que hasta hemos dormido juntos – Jane y yo la miramos sorprendidas, esto sí que no lo sabíamos - pero esperen no piensen cosas!! No ha pasado nada. Es como mi hermano.

• Si pero al parecer él no te ve así.

• Listo!! Vámonos!! – grito James al pie de la escalera.

En el cine fue un triunfo que nos pusiéramos de acuerdo para elegir qué película ver, aun nos quedaban unos 40 minutos para que empezara la función así que decidimos ir por un helado.

• Cuéntanos James, como vas con tus amigos, que han hecho? – esa Jane, siempre sacando platica de todo, pero bien para mi así se respondían algunas dudas sin que yo preguntara.

• Pues bien, ayer fuimos a la feria, y seguido andamos de fiesta, ya sabes para “conbeber” jajaja – había algo de cinismo en su comentario pero realmente no decía nada con eso.

• Y que dice la novia?? – la sonrisa de Jane era sarcástica.

• Novia? Cual novia? Ay Jane tu siempre de chismosa – estaba incomodo y algo molesto.

• Ay y tu siempre de gruñón, ya cásate!! – Jane se voltio a platicar con Victoria, mientras yo me sumergía en mis pensamientos, si ella le había preguntado eso por algo sería, no acostumbraba a preguntar cosas sin sentido, además, tanto Victoria como su mamá decían que andaba raro y no se despegaba del celular, incluso más que cuando platicaba conmigo.

• Bella!! Ya te acabaste tu helado y no me diste!! – cuando reaccione los tres me miraban, James me estaba hablando.

• Perdón, no sabía que querías – intente disculparme, no creí que quisiera de mi helado, solíamos compartirlo cuando salíamos, pero ya no.

• Nada, te has vuelto muy egoísta – me recriminó.

• De verdad… disculpa, me… hubieses dicho… yo… no sabía que ibas a querer… - me sentía muy apenada, él quería de mi helado y yo no le ofrecí ni una probadita.

• Bella, tranquila, no le hagas caso, solo está molestando… solo a ti se te ocurre tomarlo en serio – Victoria parecía entre divertida y preocupada por mí, pero miro con ojos de resentimiento a su hermano mientras él estaba a las risas… no cabía duda, ella sabía de lo nuestro, tal vez por eso fue su último comentario, “solo a ti se te ocurre tomarlo en serio”.

La película fue entretenida, pero me fue imposible no recordar cuando él hacia hasta lo imposible por estar cerca de mí, casi quería salir de ahí y perderme, pero debía ser fuerte, no podía darle el gusto de verme mal.

Al salir de la función regresamos a casa de Victoria, pasaríamos a dejarlos, por mis cosas y luego Jane me llevaría a casa, pero en el camino, como todo lo de a mi alrededor parecía estar en mi contra, Jane encendió el estéreo y comenzó a sonar la canción de “Un siglo sin ti”… comencé a cantarla y las lagrimas fueron incontenibles, no podía seguir bloqueando el sentimiento, lo único que no quería era que James se diera cuenta, él venía en el asiento de atrás con su hermana, Jane a mi lado manejando, de reojo se dio cuenta y me tomo de la mano, solo susurro un “tranquila”, ella era la única que tenía la certeza de que yo sentía algo por James y entendía por lo que estaba pasando, ella también se dio cuenta de su cambio pero siempre me decía que era una etapa, que no me deprimiera.

Llegando a su casa me baje directo por mis cosas, me despedí de su mamá, de Victoria y salí como alma que lleva el diablo en lo que Jane se despedía adentro de ellas, no quería que James me viera mal, pero para mí fortuna él apenas iba atravesando el jardín del frente para entrar a su casa.

• Ya te vas?? – me miró fijamente a los ojos, Dios!!! Odiaba que hiciera eso cuando yo me sentía mal, parecía tener el don de leerme la mirada y yo quedaba vulnerable ante él.

• Eh! Si, ya es tarde y mañana hay escuela, además tengo que hacer unos deberes – más rápido no pude haber hablado, si me entendió fue de puro milagro.

• Bueno, te cuidas – susurro a mi oído mientras besaba mi mejilla, yo me estremecí por su cercanía, sabía que mis dudas no serían respondidas, tenía el presentimiento de que sería la última vez que lo tendría así de cerca, por lo que junte los pedazos de valor que me quedaban.

• Me das un abrazo?? – apreté los puños y cerré los ojos esperando su reacción, una milésima de segundos se volvió una eternidad hasta que sentí sus brazos rodearme, lo abrace con tantas ganas, mis lagrimas amenazaban con traicionarme. – TE AMO! – le dije mientras me soltaba pero él sin decir nada me apretó más en su pecho y me dio un último beso muy cerca de los labios.