Estaba todo de color musgo, café y verde, mientras caminaba tomada de la mano con Edward pensaba en que podía hacer, era un bosque genial como para escalar arboles

-¿te gusta escalar?-pregunto

-claro que si-dije animada

-te echo una carrera hasta la punta de ese árbol-dijo señalando un árbol de al menos unos 20 a 30 metros de altura

-no se vale, eres un vampiro-dije riendo

-te prometo ir lento-dijo devolviéndome la sonrisa

-Está bien-dije mientras corría y apoyaba mi pie en una roca para saltar y caer en la primera rama del árbol

-nada mal para ser una humana-dijo ya al lado mío

-prometiste ser lento-le recordé

-está bien, tranquila-dijo indicándome la siguiente rama-después de ti- Yo apoye el pie en una rama pequeña y me afirme con los brazos de una que estaba más arriba, comencé a balancearme y luego me solté aterrizando en otra rama que estaba un poco más arriba de la anterior, luego observe hacia arriba e inspeccione el árbol para ver una estrategia para llegar rápido a la punta, estuve un buen rato ahí hasta que encontré la manera y comencé a escalar unas pequeñas ramas que sobresalían del árbol. Luego de unos 10 minutos me senté en una rama bastante firme y grande para descansar

-no tan lenta-dijo Edward asustándome de la impresión

-no puedo más e escalado como 10 metros en 10 minutos y tú los escalas en cosa de segundos-dije picada

-quieres tener una experiencia muy genial-dijo sonriendo

-claro que si-dije animada Edward me tomo las piernas y me puso en su espalda con firmeza

-sujétate bien-dijo riendo, entonces comenzó a escalar como bala, nunca había sentido algo igual era tan genial y tan extraño, pero no duro mucho -aquí estamos-dijo soltándome en una rama y agarrándome firmemente

-guau! Qué hermoso-dije sorprendida

-así es mi mundo, tendrás que acostumbrarte-dijo mientras besaba mi cabeza

-claro que si-dije contemplando el hermoso paisaje en donde estábamos, estuve un buen rato viendo a lo lejos las montañas verdes y grandes. De repente ciento la mano de Edward tensándose alrededor de mi cintura y eso solo pasa cundo le molesta algo o está nervioso

-¿Qué sucede?-le dije angustiada

-Charlie esta cerca-me dijo con una voz seria y con la vista clavada al suelo, el cual estaba muy lejos

-¿Cómo lo sabes?-dije sorprendida

-lo huelo, ven aquí-dijo mientras me agarraba y me ponía cómodamente en su espalda

-cierra los ojos-dijo sonriendo. Entonces los cerré y lo único que sentí fue un muy fuete viento en mi cara, el cual se acabo en unos segundos, en ese entonces abrí los ojos y ya estaba en el piso

-¿pero cómo?-dije sin justificarme

-soy vampiro, ¿no lo recuerdas?-dijo sonriendo

-tienes razón-dije sonriendo y un poca confusa, pero de repente sentí unos pasos muy duros y en ese momento Edward se puso serio y sele oscurecieron los ojos

-¿Qué pasa?-dije

-Charlie-dijo en susurro mientras daba un paso hacia adelante y yo me protegí en su espalda

-ay no-dije preocupada

-Charlie!-dijo Edward con una pausa-no lo agás, te vasa a destruir a ti mismo con esos pensamientos que tienes-dijo en voz alta, entonces apareció Charlie con la misma escopeta de hace unos días atrás

-tú que sabes de mis pensamientos

-mira, no me da miedo nada, si estoy con ella no me importa nada-dijo con voz dura y clara

-yo te creo ni la mitad-dijo con la escopeta apuntando hacia el frente

-Charlie no volverás a hacer lo mismo, porque esta vez no te lo perdono-dije decidida a dejar todo

-Bella, eres una inepta-dijo

-¿inepta yo?-dije enfadada y acercándome a él-inepto tú, el que no se a dado cuenta que se está destruyendo poco a poco, quedándose solo. No me vas a hacer cambiar de opinión, por que el hombre que ves ahí en frente, es el hombre de mi vida-dije enfadada y apuntando a Edward

-ves, este estúpido te a metido todo esto-dijo enfadándose y apuntando con la escopeta a Edward

-si no hubieses tenido una segunda vida, todo esto no estuviera pasando. Esto es tú culpa y solo tuya-dije enfadada y casi llorando, en ese momento retrocedí y abrase a Edward, el cual me rodeo con sus brazos. Entonces Charlie cargo la escopeta y apunto

-no creo que lo quieras hacer-dijo Edward con voz baja y vista clavada al suelo

-te arrepentirás Charlie, te lo aseguro-dije muy seriamente

-por culpa de ustedes perdí a todo mi familia, he perdido a mis dos hijos y a mi prometida-dijo llorando y tiritando, Charlie me apunto y cuando estaba a punto de apretar el gatillo…

-no!-gruño Edward, entonces desvió la escopeta, la tomo y la partió en dos

-¿pero qué has hecho?-dijo Charlie sorprendido

-acabo de salvar a la chica que amo-dijo mirándome, retrocedió y me dio la mano mientras caminaba, pero de repente Charlie se abalanza sobre él y le comienza a pegar

-Charlie! No por favor-dije desesperada, pero Edward se lo saco de encima sin ningún problema, como su fuese una almohada que estaba encima de el

-no seas niño-dijo Edward mientras se sacudía la tierra, mientras Edward asía eso Charlie sacaba una pistola de su bolsillo trasero y le apuntaba

-Charlie no!-dije gritando y tirándome encima de él, entonces cuando estaba en el suelo Edward me tomo, rectifico que Charlie no tuviera mucha vista y me tomo en brazos y comenzó a correr, se sentía el mismo viento brusco en mi cara como el de hace unos minutos atrás, pero sucedió lo mismo, se detuvo en un instante.

-sube al auto, rápido-me dijo mientras el se subía al auto y yo reaccionaba, cuando reaccione me subí al auto y me puse el cinturón

-debemos irnos ahora, Charlie quiere acabar con migo y con tigo, no dejare que pase eso- dijo apresuradamente mientras aceleraba el auto a una velocidad de 120KM

-¿Qué vamos a hacer ahora?-dije desesperada y angustiada

-mantenernos juntos amor, eso aremos-dijo con la vista al frente y sin expresión -pero, ¿Dónde vamos?-dije insistentemente

-Carlisle tiene una casa en Alaska, podremos quedarnos ahí por un tiempo-dijo fríamente

-ya que-dije un poco triste, pero luego pensé, iba a estar sola en Alaska y con el hombre más guapo de todo el mundo, ¿Qué malo podría pasar?

-o no-dijo un poco asustado-Charlie viene detrás de nosotros-

-imposible-dije sorprendida-no pares, no quiero hablar con el-dije mientras me acorrucaba y cerraba los ojos

-dulces sueños amor, yo lo desviare, te lo prometo-dijo con voz dulce

-te amo-dije con voz baja