No podía creer aun todo lo que había pasado, ahora tenía miedo de lo que Charlie pudiera hacer, aun sabiendo que tenia a un chico inmortal el cual me protegería. Ahora ¿deberé escapar?, ¿o qué?, ¿de mi propio padre?, tenía muchas dudas pero que sacaba con cuestionarme, tenía claro que iba a ir a hablar con Charlie y decirle todo lo que pensaba y lo que iba a hacer, aunque no sabía, pero igual. De repente mire hacia el lado y estaba Edward contemplándome

-¿Qué haces ahí?-le pregunte

-simplemente observaba tu belleza- me dijo mientras se acercaba a mi

-no creo que te lleve mucho tiempo-dije avergonzada

-me llevara una eternidad-dijo posándose a mi lado con una sonrisa encantadora

-debo ir donde Charlie-dije un poco preocupada

-Carlisle dijo que estabas mejor y que podrías salir-dijo con delicadeza

-¿podre hoy?-pregunte

-claro que si hermosa-dijo acariciándome la mejilla

-¿me puedes acompañar?, necesito hablar con Charlie-dije con voz baja

-claro que si, estaré aquí para lo que necesites-dijo con voz dulce y convencida

-gracias-dije aliviada

-te amo-me dijo al oído en un susurro. En ese momento me quede perpleja, tenía que recapacitar lo que me había dicho, el hombre más sexy y hermoso del mundo me dijo te amo, ¿estaré soñando?

-yo igual-reaccione

-ya lo creo-dijo Entones me levante de la cama y agarre mi mochila mientras el se levantaba y me guiaba a la salida con su mano en mi cintura, su casa era tan grande y hermosa que parecía una casa de esas revistas que leía René.

-por favor-me dijo abriendo la puerta principal y señalando con la mano

-gracias- le dije casi sin voz. En ese momento vi hacia atrás para observarlo, pero ya no estaba allí, ahora estaba posado en el capot de su auto con la puerta del copiloto abierta, to me apresure para subirme y en el momento que me subí el cerro la puerta y en un abrir y cerrar de ojos ya tenía el motor encendido del auto.

-rápido-dije con voz de sorpresa

-tendrás que acostúmbrate a tener un novio vampiro-dijo mientras sonreirá y ponía el marcha el auto. Cuando dijo “novio” todo se me aclaro, no quería sacar deducciones yo sola, porque me podría ilusionar mucho.

-emm… hay un problema-dije angustiada

-¿Cuál?-pregunto

-no me acuerdo en donde está la casa de Charlie-dije avergonzada

-no te preocupes-dijo sonriendo curvamente

-pero… -

yo sé cuál es el camino- me interrumpió

-¿Cómo lo sabes?-dije confusa

-luego te diré algunas cosas sobre vampiros y todo eso-dijo mientras se detenía

-aquí es ¿o no?-dijo mientras se bajaba a abrirme la puerta

-sí que me tienes que decir cosas sobre vampiros-dije sorprendida mientras de bajaba del auto y el me tomaba de la mano

-¿estás lista?-me pregunto. Entonces mire nuestras manos tomadas y luego lo mire

-ahora si-dije con la vista perdida en sus ojos color caramelo

-entonces vamos- me dijo mientras el comenzaba a caminar Yo me sonreí, pero cuando alce la vista hacia la casa esa sonrisa se fue más rápido que una ardilla, comencé a caminar con la vista hacia el frente y al momento de llegar a la puerta antes de tocar la puerta pensé, estoy con el hombre de mi vida ¿Qué me puede pasar?, dije convencida, entonces toque la puerta sin pensar, espere-pensé que habían pasado minutos, pero eran segundos- de repente abrió la puerta una mujer-Elizabeth-

-¿bella?-dijo ella sorprendida

-si, emmm… ¿y Charlie?-dije. En ese momento salió corriendo un niño pequeño gritando “mama, mama mi papi me quiere atrapar”, entonces apareció Charlie con una gran sonrisa y gritando como estúpido. Entonces se percato di mi y se puso derecho y me miro, en ese momento me recordé una escena similar que había pasado hace ya casi 10 años en el cual Charlie me estaba persiguiendo y una mujer llama a la puerta, Charlie abre la puerta y le da un beso en la mejilla. Entonces me dice “bella tengo que atender un asunto importante, quédate con tu madre” entonces yo decepcionada le dije “pero lo prometiste, no te vayas ahora” y él se fue con la mujer, dejándome a mi llorando en la puerta. Luego volví a la realidad y mire a Elizabeth y recordé la cara de esa mujer, y me di cuenta que era ella, Charlie había estado engañando a René mientras ellos seguían juntos. Pero de repente el me interrumpió los pensamientos.

-hijo ve arriba-dijo Charlie con dureza

-pero papá lo prometiste-dijo el niño recordándome a mi misma

-ve arriba te he dicho-dijo, pero el niño no reacciono

-no vas a hacer lo mismo que hiciste hace 10 años-dije con firmeza

-¿de qué estás hablando?-dijo confuso

-no creo que quieras que se quede llorando en frente de la puerta, justo donde yo quede cuando me dejaste plantada por una mujer, que según tu tenias que arreglar un asunto importante-dije mirándolo fijamente y con enojo, y en ese momento todos se quedaron mudos y mirándome

-creo que será mejor que me baya-dije dando la vuelta

-Bella-me dijo Charlie, entonces Edward me detuvo sosteniendo mi brazo

-no te baya-dijo con tristeza

-no cometas los mismos errores que cometiste con migo-dije decepcionada-espero que cuando el crezca no quieras matar a su novia-dije cínicamente

-Elizabeth ¿puedes llevar a Carlos a la pieza y dejarlo haciendo las tareas?

-pero papá-exclamo el niño

-te prometo que luego jugaremos e iremos a jugar béisbol, solo si haces las tareas-dijo convenciéndolo

-está bien-dijo el niño mientras subía las escaleras

-Bella, pasa por favor-dijo, Edward me miro y me izo un gesto, entonces entre a la casa de la mano con el

-¿podrías entrar solo tú?- Dijo mirando a Edward enfadado

-si te molesta tanto, entonces no te molestes en invitarme a pasar-dije dando la media vuelta

-no!- exclamo-no importa-

-está bien, acabemos esto de una vez-dije mientras entraba y me sentaba en el sillón junto a Edward

-hija, ¿por qué estas tan enfadada?-dijo incrédulamente

-¿y tienes cara para preguntármelo?-Dije con los ojos entrecerrados

-Bella, tranquila no te alteres-dijo Edward con su voz angelical mientras me acariciaba la pierna. Entonces pose mi cabeza en su hombro derrotada, estuve un rato ahí, estaba muy helado su hombro pero me encantaba y entonces me enderece y comencé.

-mira Charlie- dije con pausa

-papá- me interrumpió el

-está bien “papá”-dije fastidiada- mira lo único que quiero es que me dejes y no solo a mi sino que a él también, estos últimos días has perdido los estribos muy fácilmente, tanto así que me disparaste-dije pausando, pero Elizabeth se asomo y quedo mirando a Charlie

-¿es verdad eso que dice?-dijo mirándolo fijamente

-fue un accidente-dijo avergonzado

-no puedo creer que haya una persona que llegue a tal punto de locura-dijo un poco enfadada

-por favor-dijo, entonces ella se retiro y él se agarro la cabeza

-¿podrás hacer lo que te pido por tu pequeña como dices tú?-dije para retirarme

-déjame hablar con Edward un rato a solas-dijo con amabilidad-ve a tu habitación

-papá! , por favor en esta casa ya no tengo habitación y tampoco soy una niña pequeña-dije un poco enfadada

-entonces ve a otro lado-dijo insistiendo, yo me levante de el sillón y mire a Edward el cual me respondió con una sonrisa, luego me sitúe en la escalera para escuchar algo, pero no logre escuchar nada, me puse muy nerviosa al pensar que le iba a decir a Edward, pasaron los minutos que se me hicieron horas hasta que apareció Edward con una sonrisa

-vamos-dijo tranquilo, yo me levante y le tome la mano

-que estén bien-dijo Charlie también tranquilo -

que este bien jefe-dijo Edward sonriendo

-lo haré-dijo alzando la mano, Edward dio la vuelta y me llevo de la mano, pero cuando llegamos a la puerta y me detuve

-¿Qué ocurre?-me dijo Edward y justo llego Elizabeth a sí que iba a aclarar algo

-¿papá?-dije mientras me daba vuelta

-¿Qué pasa?-dijo curioso

-¿era ella?-dije refiriéndome a Elizabeth y a la mujer de hace 10 años

-¿Quién?-dijo confuso

-Elizabeth era la mujer, ¿verdad?-dije aclarando

-¿Cómo lo supiste?-dijo sorprendido

-memoria simplemente-dije como si fuese Obvio

-¿solo querías eso?-dijo

-¿Cuántos años tiene Carlos?-dije curiosa

-tiene 11años-dijo avergonzado

-muy bien-dije un poco enfadada. Salí olvidando a Edward en la casa pero el salió junto a mí

-perdón!-grito Charlie

Me pose en el capot del auto amarrándome la cabeza y llorando un poco, Edward llego a mi lado y me abrazo muy firmemente-me sentí muy segura en sus brazos- solo sabía que Charlie era un Patán, siempre me dio pena, pero ya no, me seque las lagrimas, me solté de Edward, lo bese y en ese entonces decidí que no iba a permitir que me pasaran a llevar

-pase lo que pase, siempre te amare-dije mirando a Edward a sus ojos color caramelo

-pase lo que pase, estaré con tigo-dijo sonriendo y besando mi frente, en ese entonces Edward desapareció y ya estaba posado al lado de la puerta del auto señalándome para subir, luego de subir Edward ya estaba allí, echo a partir el motor y comenzó a andar

-¿A dónde va señorita?-dijo coqueto, luego de un rato

-a mi casa, señor-dije siguiéndole la corriente. Edward se sonrío y siguió conduciendo mientras le miraba fijamente, al verlo me envolvía y me sentía viva, segura y fuerte

-ya llegamos su señoría-dijo curveando su boca, al momento de reaccionar alce la mano para abrir la puerta, pero el ya estaba allí esperando a que yo bajara, entonces me baje y le tome la mano con firmeza.