Corria a toda velocidad mientras sentía como las bombas empesaban a caer a mi alrededro... estaba a sustada, de eso estaba completamente segura, corria con todo lo que me daban las piernas hasta que llegue al bendito baño.

- ¡Lizzi!!! -. Grito con todos mis pulmones, mire a dentro, pero no se veía nadie... maldición...

camine lentamente viendo por todos los cubiculos de baños, ella no estaba, que iba a hacer, si llegaba sin una niña Stef me mataría y me recriminaría el resto de la vida por ello...

- Ayuda... -. era una voz completamente destrozada, camine asta donde provenia, caminaba lentamente, no iba a ser capaz de aguantar mucho tiempo... si es que ella tenía ese olor a sangre que tanto deceaba...

- A donde estas, sigue hablando... -. pero mis peores sueños estaban hay, ella tirada en el piso, la mitad de una tared se le había caido encima y de su frente caía una gran cantidad de sangre que hizo que mi boca estubiera llena de esa sustancia...

camine lentamente a ella, pero ya no era yo, esa felina que se acercaba lentamente para que la niña no la viera no era yo... ese olor me tenía completamente ensimismada... ella no debería esperar ayuda de mi parte, sino más bien escapar de mí.

Llegue a su lado antes de lo esperdo, pero algo me hizo salir del trance, una nueva bombe había caido cerca de hay y ese olor me hizo ver las cosas con claridad.

la tome en mis brazos, intentaba con todas mis fuerzas no respirar, era casi imposible, ella lloraba, sentía como sus huesos ya no estaban juntos en algunos de sus brazos y sus piernas estaban casi completamente destrozadas.

sentia algunos pasos en el pasillo, probablemente ellos podrían ayudarla mucho mejor que yo, me encamine hasta donde se encontraban... era un hombre alto, el otro no tanto, traían unas capas completamente negras y caminaban por los pasillos riendo y jugando con los escombros, por alguna razon temia... era como si ya hubiera estado con ellos antes...

- Que crees... ojala aya una niña jugosa demetri -. me estremeci, a que se referían con niña jugosa.

- Sabes que solo venimos a supervisar, a Aro no le agrada que cacemos más de la cuenta y la verdad es que con esta guerra e comido suficiente... -. ¿Comer que?

Por un instinto de supervivencia solo me limite a estconderme, había algo que me decía que no debía salir, ellos no eran lo que aparentaban o no se eran algo más de lo que aparentaban...

La pequeña en mis brazos se estaba desangrando, pero que podía hacer, de seguro que si saliamos estarían ellos esperandonos, quizas no fueran tan malos...

- Sientes ese aroma -. uno de los hombres hablaba mientras comenzaba a sonreír.

- Si... es algo demaciado esquicito... es como el nuestro con algo de humana además de ese hermoso aroma a sangre fresca... -. ellos eran como yo, pero yo jamás lastimaría a alguien, solo bebia de los pequeños animales que podía...

Esto estaba mal, muy mal... demonios que iba a ser, estaban solo a unos centimetros de nosotras... mi corazon empezo a acelerarce demaciado, hasta yo podía sentir ese maldito palpitar que casi arrancaba mi corazon...

- Renessme!!! -. escuche a lo lejos y demonios si que me alivio cuando ya no sentí sus pasos acercandoce.

- Aqui estoy -. Stef aparecio a mi lado con una cara de miedo terrible.

- Estas herida -. sonreí.

- No, pero la muchacha, creo que... -. era cierto, no lo podía creer, la muchacha estaba muerta en mis brazos y yo lo único que podía hacer era abrazar el pequeño cuerpo de la pequeña quien tenía una sonriza en sus labios... eso era lo que todas en ese maldito lugar esperabamos que alguien nos protegiera aunque esa persona no fuera la que queríamos...