Inicio de Jane Vulturi.
Jane querida, prepárate ya va a llegar tu nueva mascota- dijo mi amo
Voy enseguida- murmure aburrida. Deje de leer mi libro acerca de cómo era la santa inquisición. Salí de mi alcoba y pude ver que mi hermano Alec había llegado junto con mi mascota. Vi como Félix lanzo al humano como si fuera un trapo sucio, gruñí al ver esa escena.
Dolor- susurre viendo a Félix, mientras el caía de rodillas, con un gesto de dolor. El humano se levanto sorprendido ante lo que veía, me miro y pude sentir como mi cuerpo recorrió una corriente eléctrica, perdí la concentración y deje de hacerle daño a Félix.
Hermana, te pasa algo- murmuro mi hermano mirándome preocupado.
Nada, solo que no me gusta que maltraten mis cosas- murmure enojada viendo a Aro.
Lo siento cariño- dijo Aro. Vio al humano y pude notar que él tenía algo planeado. Entonces ¿Cómo te llamas humano?- ronroneo Heidi. Pude sentir como mi sangre “hervía” dentro de mí.
Me llamo Roberto, Madame.- susurro con nerviosismo.
Cuando escuche la voz de mi humano sentí como mi corazón latió de una manera que nunca me había imaginado.
Bueno antes de que vayas con Jane, necesitas un cambio de look, porque el que traes te ves del asco- murmuro Chelsea.
Pude notar que mi humano tenía miedo. El volvió a mirarme y puedo jurar que con sus ojos me mandaban señales para que lo salvara.
Eso mi incumbe a mí, Chelsea- gruñí. Vi como ella alzaba las manos para luego irse.
Bueno Jane, llévate a tu mascota. Ya que si lo haz notado tenemos hambre y déjame decirte que se me está haciendo agua la boca- dijo Cayo molesto.
Asentí con la cabeza, fui hacia donde estaba el, agarre su brazo y me lo lleve de la explanada de cuervos. Vi como Roberto se quejaba pero no podía soltarlo hasta que sintiera que estuviera a salvo, además de que me gustaba esa sensación que me transmitía.
Llegamos a mi cuarto, abrí la puerta y lo deje pasar primero.
Lo siento si te lastime- dije cuando ya estaba adentro de mi cuarto.
No te preocupes, el tal Félix, fue quien me lastimo- murmuro lastimosamente
Escucha, no soy quien crees que soy. Soy una vampira desalmada, ya viste cual es mi don. Así que no confíes en mi.-murmure lastimosamente al decir la verdad.
No me importa, confió en ti. Y la verdad es que me siento muy seguro al estar en tu lado- dijo. Vi cómo se acercó hacia a mí y me abrazo.
Fin de Jane Vulturi.
|