Chicas en este cap deberan bajar de Youtube la cancion Love me deYurima, mas adelante aparecera donde deben ponerla

POV RENESMEE

Abri mis ojos con dificultad. Escuche un sonido al que había aprendido a reconocer a lo largo de los últimos meses: el monitor que indicaba el ritmo cardiaco tanto mio como de la bebé. El aroma de medicamento inundaba por completo la habitación y me sentía terriblemente débil. Mis manos se movieron lentamente hasta mi vientre abultado, haciéndome sonreír.

Desvie la mirada hacia la puerta que fue tocada suavemente para después dar paso a todas aquellas que consideraba mi familia.

—Hola chicas —salude, lo más alegre que pude. Hiromi, Sabina, Camila, Tatiana, Mika y Sebastian me dedicaron sonrisas que parecían sinceras, pero preocupadas.

—¿Cómo te sientes? —preguntó Sebastian acercándose a la cama.

Pero apenas y lo escuche. Buscaba entre todos a la persona más importante que debía estar ahí. Sabina fue quién respondió a mi silenciosa pregunta.

—Jake entrará después de nosotros, no te preocupes

—Sí, mi hermano parece que quiere estar a solas contigo más tiempo, quizás deseé hacer cosas malas contigo —Tatiana soltó una carcajada y Mika le dio un golpe en la cabeza.

—¡No digas estupideces ahora! —le recriminó y todos rieron.

—Vamos, amiga —Hiromi acarició mi cabello—, ya falta muy poco para que tengas a tu bebé entre tus brazos.

—¡Sí!.

—Has tu mejor esfuerzo —pidió amablemente Sabina.

—¡Claro que lo haré!

—Más te vale que esa bebé sea un encanto o de la contrario te hará pagar todos estos meses de sacrificio.

—Ignora a Camila, debes relajarte —habló Sabina.

—Bien, no nos dejaron mucho tiempo ya que sigue Jake y después te tienen que preparar para la cirugía —informó Sebastian, a lo que asenti con una sonrisa.

—Muchas gracias a todas…

—¡Nos vemos después, Nessie!

—¡Sí, tengo que presentarles a mi bebé!

—¡Por supuesto!

En cuanto salieron, la puerta fue abierta nuevamente para dar paso a Jake. En cuanto entró, dirigió su mirada hacia mi que acostada en la cama, escuchando los latidos de mi corazón. Entrecerró sus ojos y con pasos suaves se acercó hasta quedar sentando en una silla que estaba al lado de la cama.

—Hola… —salude, dándole la más tiernas de mis sonrisas.

—Nessie —dijo, tocando mi rostro con delicadeza.

—Jake… todo va salir bien… —susurre con seguridad mientras atrapaba su mano entre la mia—, de verdad… no te preocupes.

—Lo sé… —alcanzó a decir y acercó su rostro al mio, para mirar fijamente mis pupilas.

—Jake, te amo.

—Yo también.

—Va a ser una niña muy saludable y se va a llamar Adda —dije animadamente—, ¿a quién crees que se parezca? Ojala que a ti.

—A mi??… —susurró —, a mi siempre me han gustado tus ojos.

Me sentí  más roja que una manzana. Tome su mano y la puse en  mi estomago.

—Entonces… eso será lo que te regalaré… —rei, porque desde luego, en ese momento era imposible saber como sería nuestra bebé.

—Más te vale que sea cierto —sonrió únicamente y besó mi frente, para después bajar hasta llegar a mis labios.

—Lo será —dije, cuando recupere el aliento—. ¡Ya quiero entrar a cirugía para poder tenerla entre nuestros brazos! ¡Te imaginas! Nuestra pequeña tendrá todo el amor del mundo.

—Sí —musitó, robandome nuevamente un beso.

Nos miramos en silencio, entregándonos todo el amor que nos fuera posible. Jake besó con mucho cuidado mis labio, grabando su sabor inconscientemente en lo más profundo de su ser. No entendía, pero me estaban entregando el alma con ese roce tan suave y apasionado. Cuando el oxigeno se necesito, nos separamos mirándonos profundamente, indagando en el alma del otro, intentando no olvidar el valor que ese beso nos había infundado.

Agarró mi mano, dándole un suave beso.

—Estaré esperándolas —dijo.

—Sí… Adda está ansiosa por conocer a papá y… ¿mamá? —solte una carcajada—. ¡No me había puesto a pensar en eso!

—Mamá…Te queda bien.

—Jake…

La puerta se abrió, mostrando a Carlisle, quien hizo una leve reverencia.

—Ha llegado la hora —dijo y asentimos.

—Te amo, Ness… —susurró Jake en  mi oído

—Te amo, Jake.

Se puso de pie, dándole espacio a las enfermeras que entraban con una camilla para moverme rumbo al quirófano. Carlisle lo miró, dándole una mirada que transmitía confianza.

Levante mi mano cuando pase a un lado de Jake. El la tomó enseguida, dándome la última dosis de confianza.

—Jake, cuando nos veamos de vuelta, habrá una pequeñita más.

—Más te vale que no te tardes demasiado.

Carlisle asintió con la cabeza y nos soltamos las manos. La camilla avanzó y Jake miró silenciosamente el pasillo por donde ahora nos llevaban a mi y a su hija…

POV CARLISLE

—¿Cómo está el ritmo cardiaco de la bebé…?

—Es estable, doctor.

—Necesitamos hacerlo lo mejor posible… —dije mirando a Renesmee, que yacía inconsciente en esos momentos.

—Estamos listos para iniciar.

POV JACOB

Odiaba las salas de espera, porque se trataban de justamente eso… esperar. Y era de las cosas más difíciles del mundo. Sentir que en ese instante uno no podía hacer nada… sólo suplicar porque todo saliera bien…

Sentía la homosfera de preocupación, de nerviosismo… y sí, hasta de miedo. Eso no estaba ayudando en nada… esperar… tenía que esperar…

POV CARLISLE

—¡Buaaaa, buaaaaaaa! — un llanto irrumpió en medio del silencio… aligerando el ambiente instantáneamente. Una vida llena de fuerza se hacia presente. La pequeña bebé de tan sólo siete meses pasaba de mis manos hasta las de una enfermera que estaba lista para atenderla y transportarla lo más inmediatamente posible a las incubadoras a causa de ser prematura…

—¡Doctor…! —gritó una enfermera que cuidaba a Renesmee al tiempo que todos los aparatos empezaban a hacer ruidos ensordecedores en señal de una violenta e inesperada emergencia—, ¡Crisis convulsiva!

—¡Aumenten el sulfato de magnesio!

—¡La bebé tiene dificultad para respirar!

—¡Va entrar en estado de coma!

"… sálvela a ella… a mi bebé…"

POV JACOB

Estaba recargado en un muro, con los ojos cerrados, relajando lo más posible mis pensamientos… ella me lo había prometido… todo estaría bien…

—Nessie… —murmure y en ese instante una brisa cálida me abrazo, era la misma sensación que tenia cada vez que…

—Doctor… —escuche que alguien dijo y enseguida abri los ojos, acercándome a Carlisle que caminaba con pasos lentos y sin quitarse todavía el traje de cirugía.

—¡¿Cómo están?! —exigi inmediatamente, pero un extraño sentimiento me invadió cuando Carlisle agachó su rostro para no mirarme a los ojos. De algún modo reunió el valor necesario y elevó sus ojos directamente a los mios, que ya sentía una incomodidad y mi corazón palpitaba velozmente.

—   La bebé tuvo complicaciones, fue transportada a la Unidad de Terapia Intensiva Neonatal y va tener que permanecer ahí por algún tiempo.

Los rostros  de los demás estaban desencajados, el ambiente tenso… y yo… Yo rogaba por no escuchar otra mala noticia.

—¿Y… Nessie?

—Lo siento… —Carlisle tragó saliva—, tuvo una crisis convulsiva que no logramos contener, cayó en estado de coma… y minutos después… falleció. Lo siento mucho…

—No… —sacudi mi cabeza violentamente y sin saber como, lagrimas comenzaron a empapar mi rostro—, ¡¡no es cierto!! ¡¡Estás mintiendo!! ¡¡Renesmee no está muerta!! —agarre a Carlisle con fuerza, con intensiones de golpearlo, pero la mano de Sabina me detuvo.

Mire a mi alrededor… Mika estaba siendo abrazada por Tatiana, Camila y Sebastian mantenían la cabeza agachada, Sabina cubría su rostro horrorizado con la manos y Hiromi estaba hincanda en el suelo, con la mirada perdida, también llorando.

—De verdad… lo siento… —musitó Carlisle.

No quería entender lo que mis oídos escuchaban. Nessie no podía estar muerta… ¡Me lo había prometido! ¡Esto era una estupidez! ¡No estaba ocurriendo eso! ¡Era una mentira! ¡Una broma de muy mal gusto!

Intente soltarme, quería hacer algo… correr, gritar… buscar a Nessie, pero las manos de Tatiana no me soltaron, aunque  forcejee hasta que quedar sin fuerzas, recargue mi rostro en el hombro de ella…

—Jacob… —dijo Carlisle con calma, pero había algo en el tono de su voz y en sus ojos rojos que indicaban que él también había llorado—, sé que Renesmee tenía la seguridad de que si… moría… tu ibas a ser fuerte para su bebé, la hija de ambos…

—¡Nessie! —grite desgarradoramente, hiriendo así el corazón de todos. Lloraba angustiadamente y no podía calmarme… Tatiana me sujetó más fuerte entre sus brazos, derramando también unas lagrimas…

De pronto, parecía que el mundo había desaparecido…

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Era extraño todo… había gritado hasta quedarme sin voz, llorado hasta ya podía derramar una sola lágrima más y aún así, ahora… sentía ganas de tomar una pistola y dispararme…

… ahora, en este momento… en el que veía el cuerpo de Nessie muerta en la morgue. Comenze a llorar cuando acaricie sus cabellos, pidiendo que aún fuera una broma, que Ness abriera sus ojos…

Era un sueño… un sueño demasiado cruel y doloroso…

Agache mi rostro y bese con lentitud sus labios, susurrándole un "te amo", aspirando por última vez su aroma de fresas que ni siquiera la muerte había logrado llevarse consigo.

—Ne… ssie… —intente decir con voz entrecortada, cubriéndome la boca con una mano, mientras observaba el hermoso rostro de mi esposa—, te amo… pequeña…

Fueron días demasiado oscuros. La lluvia se hacia presente, yo me negaba salir sabiendo que MI luz se había consumido. Me negaba a salir de nuestra habitación, recostado en la cama y cobijado completamente por las sabanas que conservaban el dulce aroma de mi niña. No comía, no vivía… era lo peor que me había sucedido…

No sabía si era de día o de noche, sólo estaba ahí, esperando… ¿Qué cosa? No lo sabía, tal vez esperaba que Renesmee fuera por mi…

Porque nada, nada parecía tener sentido si Nessie no estaba aquí…

Escuche el timbre, pero como se había vuelto una costumbre lo ignore. Después de veinte minutos y cuando el sonido cesó, me di cuenta de que alguien había entrado al departamento pero le reste importancia… ¿Qué más daba?... el que llegara no era su pequeña Nessie…

—Jacob?… —escuche una voz masculina y aún debajo de las sabanas, reconoci a Carlisle. No le conteste, sólo espere a que se largara, pero el insistió—. Jacob, no puedes continuar así…

El se acercó, quitándome las sabanas, que mostraban a un ser que parecía inconciente de que el mundo seguía avanzando.

Me agarro con fuerza, yo me quedó en silencio, sorprendido de que el me hubiera sujetado para que me pusiera de pie.

—¡Ya fue suficiente! —gritó molesto y literalmente, me arrastró afuera del edificio para subirme a su coche. Yo no podía defenderme dado que me encontraba terriblemente débi… ¿a dónde me llevaba?...

Aún siendo jalado, fue lanzado hasta un área bastante vigilada y cuidada del hospital. No entendía que sucedía hasta que me señaló un amplio vidrio que protegía una zona inmaculada.

Adentro de la habitación que era señalada y viéndolos a través de vidrio… abri los ojos sorprendido. Eran unas veinte incubadoras, pero de entre ellas destacaba una que se hallaba a mitad de la sala…

Una bebé movía lentamente sus manitas… y alrededor de la incubadora se encontraban ellos, la familia de Nessie, su familia…

Todos marcados por la tristeza, pero sonriéndole a la diminuta bebé que estaba conectada a un respirador…

—Jacob… —habló Carlisle—, esa pequeña, es tu hija… la hija de Renesmee y tu… la hija por la que ella dio su vida… ¿Vas dejar que ese sacrificio sea en vano?

—No…

Me coloque la bata, me limpie adecuadamente como había aprendido a hacerlo, me puse los guantes y el cubre bocas, logrando que así, las enfermeras que vigilaban la entrada, me cedieran el paso para acercarme a la incubadora.

Camine lentamente, deteniéndome frente a mi pequeña bebé, que aguardaba por su padre…

Yo sonrei cuando mi hija atrapó entre su diminuta mano mi dedo y lo miró, mostrándome su hermosas pupilas color chocolate.

"A mi… siempre me han gustado tus ojos."

"Entonces… eso será lo que te regalaré… "

—Papá… —susurre acariciando a mi pequeña—, papá hará lo posible para darte el hogar lleno de amor que Nessie siempre deseó… Adda.