Levanté mi mano con suavidad hasta tocar el frío vidrio de la enorme puerta que conducía al balcón. Mire la zona en la que recientemente nos acabábamos de mudar, sin dejar de asombrarme por la belleza del lugar: el camino principal adornando por árboles cubiertos por una espesa capa blanca de nieve que indicaban la mitad del invierno.

Mis labios pálidos dibujaron una tierna sonrisa. Suspire profundamente al bajar la mirada al enorme anillo de matrimonio que lucía con orgullo en el dedo anular, gire mi rostro en dirección a la cama donde aún se encontraba MI esposo durmiendo placidamente.

Me recoste después de una larga dia en la oficina. Me quede de frente a Jake, contemplando embobada esos negros cabellos que resaltaban gracias a la piel canela del dueño.

Trate de dormir un poco pues últimamente el trabajo, gracias a la promoción de una nueva plaza para la dirección de mercadotecnia, me había mantenido constantemente nerviosa, estresada y fatigada; cosa que era más que obvia por las enormes ojeras que se habían agregado a mi rostro sin permiso... pero bien valía la pena lucir de esa manera de vez en cuando, si eso me permitía continuar con mi sueño de ser la nueva directora.

Cerre los ojos al sentir la vista cansada y mi cuerpo adolorido, seguramente por no haber dormido como debería en las últimas semanas; aunque antes de que Morfeo consiguiera llegar hasta mi, mi estómago gruñó, recordándome que tampoco había tenido una comida decente en mucho tiempo.

Intente recordar que alimento era el último que había probado hasta que comprendi que lo único que hice fue comer lo que se encontrara cerca cuando mi cuerpo pedía combustible.

Consiente de que no podría dormir bien hasta que me alimentara de algo medianamente saludable, junte las fuerzas que aún me quedaban para intentar levantarme. Algo me lo impidió. Gire mi rostro para encontrarse con unos ojos negros, además de que su mano me sujetaba alrededor de la cintura.

-         Jake... —murmure—, lo siento, no era mi intención despertarte.
- No importa —contestó el al tiempo que me acercaba  más a su cuerpo—. ¿No se te olvida algo?

Acerque mis labios a los labios de Jake para así depositar un diminuto beso.

—Estoy en casa

-Bienvenida

No eran muchas palabras, pero bastaban para describir la felicidad de nuestro amor, el mejor momento por el que nuestra relación estaba viviendo, además de que no podríamos desear nada más. Senti nuevamente las molestias de mi estomago pidiendo de comer.

-Nohascomidonadaverdad??- dijo bostezando
—Iba a hacerlo ahora mismo —susurre
—Ven por tu desayuno te acompaño... —dijo.

Pero al intentar imitar a Jacob, senti un fuerte mareo que me obligó a caer sentada en la cama, haciendo que Jake se acercara inmediatamente a mi.

—¿Qué pasa? —preguntó mientras que con la mirada  me analizaba—¿Nessie? —agarró mi brazo, puesto que nuevamene estaba mareada
—¡Jake! —grite, aferrándome a la playera de mi esposo
—¡¿Pequeña, que sucede?! —dijo
—Jake, comencé a ver todo doble y borroso...

Suficiente. Esas palabras bastaron para que Jacob se levantara, se vistiera ante mi sorpresa y en cuestión de minutos agarrarme para que salieramos de la habitación.

—¡Espera! —decía sin entender lo que ocurría y la razón por la que Jake me jalaba afuera de nuestro hogar—. ¿A dónde vamos?
—Al médico —contestó sin más.
—¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!

Nos dirigimos al auto, el abrió la puerta del coche para literalmente subirme dentro y enseguida subirse al asiento del piloto. Arrancó sin molestarse en escuchar todos los reclamos que venían de mi boca.

—¡No es necesario ir al hospital! —grite finalmente.
—Vamos por que yo lo digo —espetó, lleve la mano hasta mi boca para cubrirla. Mis ojos formaron unas pequeñas lágrimas y mi expresión ilustraba muy bien lo que sentía en ese momento: tenía ganas de vomitar.

Trate de contener las nauseas porque por supuesto, lo último que quería hacer era manchar el costoso automóvil de Jake, afortunadamente no pasó de un simple asco repentino y ya que me sentía demasiado fatigada me acomode en el asiento para al menos dormir un poco.

Se estacionó en el hospital privado más famoso de la ciudad, dispuesto a que fuera atendida de la mejor manera posible. Salió del coche, dándole la vuelta para abrir mi puerta.

Amor, despierta —mencionó en voz alta—, ya llegamos.

Entreabri los ojos, que reflejaban un terrible cansancio y a duras penas lograban mantenerse fijos en el rostro de Jacob.

—No puedo —solloze—. Jake, estoy muy cansada... —cerrando nuevamente los ojos.

Se agachó para cargarme entre sus brazos e inmediatamente me acurruque más al sentir la calidez de su cuerpo. Al verlo entrar, una enfermera se les acercó corriendo, asustada de que algo grave hubiera pasado.

POV JACOB

—Sólo esta dormida —explicó al tiempo que otra enfermera se acercaba con una silla de ruedas

Estaba sentando en una silla frente a la cama donde mi niña descansaba. Hacía más de tres horas que no daba muestras de querer despertar y eso solamente me ponía nervioso. Necesitaba hacer una llamada para relajarme pero como me lo impedían ahí adentro, la única forma de hacerlo sería lejos del edifico, cosa que no quería hacer.

—Jacob?... —voltee inmediatamente cuando escuche la voz de mi viijeo amigo Carlisle, era el quien iba a atender a Ness. Cuando recién llegamos, inmediatamente le extrajeron sangre del brazo para comenzar con los análisis y así detectar cualquier enfermedad.
—Hola —me limite a decir. Carlisle miró los papeles que traía en su mano
—Estoy un poco confundido de que no lo hallan notado antes...

-Quieres decirme que tiene?? —pregunte y el solo sonrió.

—son…buenas…noticias.
—¡¿En qué parte del universo el hecho de desmayarse, marearse, vomitarse, perder y subir de peso tan rápido y encima de todo estar completamente agotado son buenas noticias?! —explote.

El rodó los ojos, sabiendo que para cualquier persona debería ser obvio lo que sucedía al enlistar de esa manera las cosas.

—Jacob, seré breve y franco contigo —recitó mientras yo me cruzaba de brazos en espera por la bendita explicación—, lo que tiene tu esposa es muy simple y se puede aliviar fácilmente.

Como le encantaba a los médicos hacer de emoción las cosas…
—Lo que tu esposa tiene, es que está embarazada.

Todo se quedó en silencio, permitiendo que la respiración de Nessie fuera lo único que se escuchara. Mi expresión era la que más señales de vida hubiera dado hasta ese momento, pues en definitiva la noticia me había tomado por sorpresa... ¿Renesmee embarazada?...Mi Nessie?? Sabía que no es que fuera algo imposible pero... ¿Un bebé?, ¿de verdad estaban hablando de un hijo?
Carlisle seguía mirándome sin comprender todas las emociones que se centraron en mi corazón. Por supuesto, ambos ya estabamos casados y podríamos darle todo lo que el niño o la niña necesitara...

—¿Qué? —eso fue lo único que logre articular después del shock inicial. 
—En cuanto tu esposa despierte queremos hacerle los estudios necesarios para saber como se esta desarrollando el feto, pues el embarazo en mujeres tan jovenes es más riesgoso, además de que como tu comentaste, ha estado sometida a mucho estrés. 
—Sí —respondi, aunque realmente no escuche como debería y tampoco note cuando el salió de la habitación.

Me sente en la silla donde momentos antes estaba, sin dejar de ver a Nessie, que ahora simplemente no parecía ser la misma chica con la que había estado viviendo por más de tres años.

Toque su tersa piel blanca recorriéndola hasta llegar a su vientre, lugar donde ahora se estaba desarrollando a pasos agigantados una nueva vida que juntos habíamos creado...

Y ahora nuevos pensamientos llenaban por completo mi mente: Nuestro futuro hijo entre mis brazos, viéndolo crecer... ¿A quién saldría más parecido? ¿A Nessie o a mi?... Por favor si eres niña no seas como Alice, la prima de mama que esta obsesionada con las compras…pensé…  

Mi mano había llegado hasta su estómago... cuán distinta se vería dentro de unos meses, sin duda la vería brillar más intensamente. No terminaba de creerlo, ¡Un hijo! Formaríamos una familia...

POV NESS

Abri los ojos: Jacob sonreía, no abiertamente, pero era esa sonrisa única y especial que sólo me dedicaba a mi

—¿Qué sucede? —pregunte aún adormilada pero extrañada al sentir su mano tocando mi estómago—, ¿Jake...?

No termine de hablar, pues el se acercó , depositando un beso en mi frente

—Distraida —dijo con una absoluta seguridad, después de años de haberlo comprobado—, ¿Por qué no te diste cuenta?
—¿Eh? —dije

—Eres más distraidaa de lo que creía —me miraba divertido por la expresión de contrariedad que debía tener-¿De verdad no lo entiendes? —murmuró al tiempo que continuó rozando con suavidad mi vientre.

No reaccione durante varios minutos…
Mis ojos  se llenaron de lágrimas al comprender lo que ocurría pero sin acabar de creerlo. Había soñado tanto tiempo con este momento, el que por algún momento crei que era un sueño imposible hasta el día en el que un año antes me habían confirmado que sí, efectivamente era fértil. Agache mi rostro, escondiendo un llanto alegre, entrelazando mi mano a la de Jacob, para de esta manera tocar juntos el producto de NUESTRO amor.

—¿Estoy... embarazada? —pregunte casi sin creerlo

—Distraida —resopló por quinta vez—. Entiéndelo de una buena vez... vamos a ser padres.

"Padres" esa palabra se oía tan diferente ahora que iba a ser una realidad, ahora que podriamos ver juntos crecer a nuestro bebé... ahora que por fin podríamos tener la familia con la que tanto habíamos soñado.

Nos miramos, para segundos después hundirnos en un apasionado beso que pronto se convertio en un acto algo inapropiado.

—Buen... —interrumpió una enfermera que por supuesto no tenía porque pedir permiso para entrar a la habitación—, ah... lo lamento, no quise —se justificaba la pobre chica totalmente sonrojada
—No te preocupes —dije riendo. 
—Venía a ver si ya se encontraba despierta para tomar su presión —informó la chica

 Recargue mi codo en la mesa que estaba a un lado de la cama mientras la enfermera encontraba la arteria mayor para localizar fácilmente el pulso, colocando el estetoscopio y el esfigmomanómetro. La chica hizo una anotación, para después liberar mi brazo—. El doctor vendrá en unos minutos —les dijo antes de salir—, y muchas felicidades, señores Black.

Sonrei conmovida por la alegría que ya comenzaban a mostrar por mi embarazo

—Jake...
—Dime
—Este... —junte los dedos tímidamente en un acto decididamente infantil—, me muero de hambre...

 Hasta el momento no había logrado alimentarme, lo cual hizo que Jacob se preocupase otra vez. Ahora más que nunca, debería vigilar que mi alimentación fuera algo primordial y lo más saludable posible.

—Enseguida ordenaré a una de las enfermeras que le traiga algo —dijo Carlisle que había entrao en la habitacion

—Hola Nessie —dijo con una sonrisa—Me parece que ya te han informado de tu embarazo, ¿Verdad?
—¡Sí!
—Me gustaría hacerte unos estudios aprovechando que estas aquí.
—¿Sucede algo malo? —pregunto Jake
—La enfermera que vino hace un rato, informó que su presión está elevada.
—¿Eso es peligroso? —pregunte .
—No si se atiende cómo debería —sonrió —, de cualquier manera, te recomiendo por el momento descansar mucho y nada de presionarte.

Como podía pedirme eso!!, pues estabamos en plena época de la elección para el nuevo director de Mercadotecnia y no podía dejar a medias el trabajo y la oportunidad por la que había luchado por meses

—Si me cuido y me presiono lo menos posible... ¿Crees que este bien?
—Ness...
—Te seré sincero—se acercó a mi—, podrás continuar con tu trabajo pero no por mucho tiempo. Tienes que cuidarte, pero si por el momento no te exiges demasiado y si te tomas los medicamentos, me parece que todo estará bien.

—¿Quieres saber cuanto tiempo de embarazo tienes?
—¡Sí! —grite feliz.

Me acomodó correctamente y Jake se sentó a mi lado, esperando impacientes mientras Carlisle aplicaba un poco de gel en mi vientre. Me puso el transductor sobre el área que tenia gel, dando paso a unas difusas imágenes en la pantalla.

Después de analizarlas por unos cuantos minutos, Carlisle llegó a un diagnóstico.

—Aproximadamente unas diez semanas.

... Mi bebé tenía ya diez semanas creciendo dentro de mi, esperando pacientemente por el momento en el que nosotros, sus padres deberíamos conocerlo...

...esperando por ser recibido con todo el amor del mundo...