Mi nombre es Isabella Marie Swan pero prefiero que me  llamen bella estoy a 5 meses de cumplir los adorados 18.

Vivo en Los Ángeles con mis padres René y Charlie, de los mejores agentes del F.B.I. aunque nada mas éramos ellos y yo ya que yo era hija única y no teníamos a nadie más que a nosotros.

Aunque bueno era mas solamente yo, ya que ellos casi nunca estaban.

Yo era simple por así decirlo 1,60, era delgada o más bien flacucha aunque me mi madre siempre me decía que yo tenía curvas y así era solo que no era algo como para presumir, tenía la piel pálida como la nieve, tenía los ojos de color café achocolatado como mi padre, el cabello ondulado natural como mi madre, largo como hasta por la cintura de color Castaño con reflejos rojizos que solo se notan a la luz del sol.

No era la típica nerd pero si era muy inteligente pero como mi papa y mi mama eran del F.B.I. pues era por miedo por lo que muchos no me hablaban aparte de que creían que me sentías mas que los demás por quien era pero no era cierto.

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Pero para que saber de mi solitaria y aburrida vida ahora…sino saber lo que pasa después…

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Estaba en mi clase de literatura leyendo en el rincón del salón cuando fueron entrando todos mis compañeros porque había sonado el timbre y ya estaban casi todos cuando…

Al fin llega el profesor Williams, uno de los que mejor me caían en especial creo por la materia que daba.

Buenos días alumnos…    -dijo el profesor

Buenos días…-respondieron los alumnos

Sonaba siempre igual, digo, no es que no haya entusiasmo pero hacer eso todos los días para mí era demasiado rutinario y aburrido.

Bueno hoy tenemos a un nuevo alumno así que denle la bienvenida al señor Edward Cullen…-anuncia el profesor

¿Chico Nuevo?

Nuevo objeto de miradas, objeto de deseo según qué tan guapo se le hiciera a las chicas y por ello, nuevo objeto o juguete de la zorr…cualquiera popular mayor.