Aclaración: Esto es un Extra, ósea que es algo que pasó antes del relato Actual… Los extras están en desorden.
-Vamos apresúrate- Alice desde el asiento del conductor me llamaba ansiosa.
-Valla, pareciera que fueras tú la que va a ver a su novio jugar tenis- respondí calmadamente mientras me subía a su automóvil.
-No lo es, tienes razón. Pero es como mi cuñado y lo quiero mucho, por lo cual quiero ver todo el partido no solo los últimos Quince minutos.
-Alice- la llame suavemente-. Ya cálmate, antes de salir hable con Edward y me dijo que el partido comenzaba a las 3:00 y pues nada más son las 2:15- suspire-. Tenemos tiempo.
Alice sacudió la cabeza y miro la carretera fijamente.
En efecto mi querida Prima/Hermana estaba más emocionada por el partido de mi novio que yo, aunque lo más probable era que yo ya lo había visto jugar y Alice no.
Suspire una vez más cuando mire que habíamos hecho un viaje de 35 minutos como mínimo en tan solo 20. Alice se bajó casi brincando del auto y entro en el estadio mostrando la credencial que Edward nos había entregado la noche anterior a cada una.
El partido no era muy importante, solo era para entretenerse, hacer un poco de ejercicio, pero Alice le insistió que tenía que ganar o ganar.
Todavía no podía creer que mi Prima supiera de mi relación con Edward. Y en cierto modo me alegraba ya que podía compartir con alguien la felicidad que me bridaba Edward, aunque esa felicidad se la quería expresar a mi hermano todavía no era el momento.
No estaba preparada para la reacción de Emmett, fuera la que fuera, buena o mala. No quería pensar que por un motivo la relación entre mi hermano y mi novio se fuera a dañar por mi culpa, ya que Emmett siempre había sido demasiado protector conmigo y a pesar que conocía a Edward hace mucho tiempo y sabia la clase de persona que era no sabía si lo iba a aceptar como mi pareja.
Además, quería saber primero si esta relación iba por buen camino, apenas y si llevábamos saliendo 3 meses y no quería complicar las cosas antes de saber si esto iba a funcionar.
Tampoco conocía a su familia por más de que él me había dicho que la podíamos conocer cuando quisiera, pero teniendo en cuenta que Emm sale con la hermana de él no quería pensar que podía pasara si Emm se enteraba por ella y no por mi o Edward.
Suspire mientras veía como Alice corría a la banca principal (del lado izquierdo) y saludaba con la mano a la cancha.
Mire fijamente a donde estaba Edward sentado en el banquillo principal, charlando con el que parecía el otro participante. Justo en el momento que lo iba a llamar una voz lo llamo suavemente desde el lado derecho de las bancas.
-Edward- la suave voz de la rubia subía de volumen mientras se acercaba a Edward.
Edward miraba a todos lados, con los nervios palpables en el rostro, se encontró con mi mirada y me miro asustado, extrañada trate de preguntarle que le pasaba, pero justo en el momento en el abrí la boca la rubia se le lanzo enzima.
Muda de impresión vi como la rubia le llenaba el rostro de besos y Edward con alegría correspondía su abrazo con fuerza.
-¿Quién es ella?-pregunto en un susurro Alice.
-No tengo la más mínima idea- respondí en el mismo tono.
Mientras tanto la rubia se separaba de Edward y le decía algo al oído, a lo que él se reía entre dientes y respondía en un tono lo suficiente alto para que yo escuchara:
-Yo también te quiero…y no lo dudes y le voy a patear el trasero a Mario.
La rubia sonrió encantada, mientras los ojos de Edward se fijaban en los míos.
-Bien, cariño, voy a estar hay en las gradas observando tu partido- dijo la rubia en tono peculiar, con mucho, mucho pero mucho “cariño”-. Que te parece si después del partido vamos a cenar a alguna parte y conversamos un rato te eh extrañado mucho.
-Um… no lo sé, iba hacer algo al salir…- volvió a fijar su mirada en mí.
-No, no acepto un no por respuesta- lo interrumpió la rubia-. Vamos a cenar y después vamos a casa…- la rubia término de decir algo que no alcance a escuchar.
-Vale- dijo Edward más emocionado, pero cada vez que su mirada se cruzaba con la mía, ya no veía la mirada tierna y amorosa que le brindaba a la rubia si no una mirada alarmada y nerviosa.
-¿Qué mierda…?- casi grito Alice a mi lado.
-Al…yo mejor…me voy- hable pausadamente para que las lágrimas no salieran de mi rosto.
Siempre me había considerado una persona Celosa y al ver lo que Edward hacía con la rubia algo muy dentro de mí se desarmo, porque aunque llevara con el 3 meses de noviazgo, desde que nos salvó a mi hermano y Alice de la manos de mi tío le había tenido admiración, y ahora me dolía más de lo normal porque había comenzado a amar a Edward Cullen y no soportaba verlo con otra mujer.
La rubia le dio un último beso en la mejilla y se fue contoneando las caderas. Edward dirigió su mirada a mí y me sonrió de forma cariño, esa fue la gota que desato la tormenta, tome mi bolso y me largué de allí.
Como se atrevía a sonreír sin más cuando hace menos de un minuto que estaba coqueteando con la rubia.
Salí de aquí con una rapidez admirable con Alice pisándome los talones. Ni por un momento Edward intento detenerme ni siquiera me dirigió una mirada ni una palabra.
-Maldito imbécil- grito Alice cuando ya estamos en el carro.
Fue lo último que alcance a escuchar de su monologo porque pronto la inconsciencia del dolor me llevo muy lejos.
Hola, hola, si, si, sé que no eh actualizado hace muchoooooooooo tiempo pero no eh tenido tiempo y me falta inspiración, pero creo que estoy de regreso.
Me gustaría terminar este Extra hoy mismo, porque esta es solo la primera parte, así que si alguien quiere solo tiene que dejarme un mensaje, si no hay mensaje quiere decir que nadie quiere que continúe la historia. Es para hoy, porque mañana vuelvo y me ocupo y no sé cuándo regreses.
En fin… quiero que me cuenten que les pareció el capítulo chic@s y así poder cambiar lo que no les gusta y continuar con lo que si…
Besos…
Att: Ashley C.
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