Blind (+18) (Completo)

Autor: VictoriaMarie
Género: + 18
Fecha Creación: 20/01/2010
Fecha Actualización: 26/07/2010
Finalizado: SI
Votos: 59
Comentarios: 58
Visitas: 349517
Capítulos: 49

 Minusvalía no significa que no seas capaz. Edward puede superar su discapacidad y encontrar la felicidad con alguien que se preocupe intensamente por él. ¿Hará cualquier cosa para convertirse en todo para ella?



Esta historia pertenece a Jayeliwood,  su traducción esta hecha por Isu (http://www.fanfiction.net/s/4667969/1/Blind) yo solo soy una mera intermediaria para que conozcais esta fantastica historia sobre Edward y Bella, y la  superación de cualquier obstáculo.

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 21: Capitulo 21

Bella Swan

“Vale, vale…”Murmuré y sonrió triunfante. Se inclinó hacia delante y besó mis labios rápidamente.

“Entonces ¿Qué vas a pedir?”Preguntó, su sonrisa era aun más brillante.

“No lo sé… lo único que vi antes de dejar caer el menú fueron los precios.”Dije con sinceridad.

Se rió por mi respuesta.”Ya sabes lo que tienes que hacer, no mirar los precios. Tienen filete ¿Te apetece?”

“Sí, eso está bien.”Traté de no pensar en el pequeño número, pero era difícil.

Vi como Edward pasaba rápidamente los dedos por los relieves.”Veamos, creo que el petite filet mignon con espárragos salteados, podría gustarte.

Se me hizo la boca agua.”Suena maravilloso.”

“Pediré lo mismo. Suena bien.”Sonrió su madre alegremente.

“Hola, bienvenidos a William B's ¿Puedo traerles algo para beber?”Dijo el alborozado camarero.

“Ya estamos listos para pedir todo.”Carlisle se hizo cargo de inmediato. Pero de forma amable. Esperó a que el camarero sacase su bloc de notas y un bolígrafo.”Querría las costillas de cordero asado, medio hecho, con una ensalada picada con vinagre balsámico. Y el petite filet, medio hecho, con espárragos. También, traenos vuestra mejor botella de Pinot Nior. ¿Edward?”

Así que, de ahí es de donde lo sacó, pensé para mí.”También nos gustaría el petite filet, medio hecho y con espárragos. Y dos coca colas.”

Me incliné hacia él sonriendo. Aspiró el aroma de mi cabello antes de besar mi oreja.

“Así que, Bella, queríamos hablar contigo acerca de algo.”Dijo Carlisle suavemente.

Toda la ansiedad que antes se había esfumado, volvió. Me moví incomoda, poniendo la espalda recta.”¿Sí, señor?”

“¡Oh, querida, pareces tan asustada! Como un ciervo frente a los faros de un coche. No es nada malo.”Esme soltó una risita., tocando la mano de su marido. Él continuó para ella.

“Nos preguntábamos si podríamos robarte a Edward durante navidad.”

“Oh…Sí… Por supuesto.”Dije en voz baja. Mordí mi labio inferior y miré a Edward. No parecía sorprendido o algo así, pero estaba atento a la conversación.

“Bueno, dije que sí, pero con una condición.”Finalmente, llegó el momento.

“¿Cual?”

“Si vienes conmigo.”Se inclinó más cerca.

“No, no podría invadiros así. Edward vete, pásalo bien. Además, no tengo dinero para-“Me tapó la boca con la mano.

“Fue idea suya. No nos invadirás y piensa en ello como parte de mi regalo de navidad.”Sus suaves dedos se posaron en mis labios hasta que terminó de hablar. Los apartó lentamente.”¿Por favor?”

“Bella, estaríamos encantados de que te quedases con nosotros. Por favor.”Agregó su madre. Miré a ambos. Oh, de ella es de quien sacó lo de poner pucheros. Estaba aprendiendo mucho de Edward con solo ver a sus padres. Al parecer no necesitaba verles para copiarles a la perfección. Quizás estuviese en su naturaleza. No podía ganar contra los dos.

“Sí.”Dije en voz baja.

“¿Vendrás?”Preguntó Edward entusiasmado.

“Sí, no puedo ganar contra esa cara.”Murmuré con un suspiro.

Me cogió y me dio un gran beso.”Gracias.”Me besó otra vez.”Estoy impaciente.”

Solté una risita por su felicidad.”¿Cuándo saldremos?”

“Mañana por la tarde, si te parece bien ¿Tendrás tiempo suficiente para hacer la maleta?”Preguntó Carlisle.

“Sí, señor. Creo que sí.”

“¿Qué te parece si te quedas hasta el primer día de año nuevo?”Preguntó Esme.

Me mordí el labio. ¿De verdad podían querer que me quedase con ellos tanto tiempo?”Sí, señora. No tengo planes para las vacaciones.”

“Los tienes desde ahora.”Edward estaba prácticamente rebotando por la emoción. Esto me recuerda a Alice, pensé sonriendo.

El camarero volvió y nos trajo nuestras bebidas, las coca colas y la botella de vino. También trajo cuatro copas. Carlisle vertió un poco en cada vaso y nos las pasó. Miré el líquido de color rojo, arremolinándose en mi copa lentamente.

”Salud.”Dijo el Dr. Cullen sonriendo, chocando su copa contra la de su esposa.

Edward se inclinó un poco y susurró junto a mi oreja.”Por el amor de mi vida.”Chocamos nuestras copas y cuando lo hice, mi sonrisa creció. Bebí el líquido a sorbos. Le di un trago e intenté no hacer muecas.

Charlamos educadamente durante la cena sobre distintas cosas de Chicago. Sinceramente nunca había oído hablar de la mayoría de ellas, lo que me hizo sentir bastante inculta y maleducada. Edward cogió mi mano por debajo de la mesa, frotándomela haciendo círculos con su dedo pulgar.

“¿Desean algo de postre?”Preguntó el camarero con una gran sonrisa.”Esta noche tenemos nuestro pudin con vainilla y salsa de Whisky y nuestra mundialmente famosa mousse de chocolate.”

“Bella ¿Te importaría compartir el postre conmigo?”

“Claro, elige lo que quieras.”Dije mientras sonreía.

“El pudin de vainilla y salsa de whisky, con dos cucharas.”Le dijo al camarero. Sonreí, recordando nuestra primera cita. Obviamente él estaba pensando lo mismo.

“Bueno, estoy lleno. Edward ¿Te importaría si tu madre y yo nos fuésemos a jugar un rato?”Preguntó, refiriéndose al casino.

“Bien, adelante. No perdáis demasiado.”Bromeó cuando sus padres se levantaron.

Edward Cullen

Probablemente mis padres todavía no habían salido del restaurante cuando puse a Bella en mi regazo.”Gracias.”

“¿Por qué?”Preguntó dulcemente.

“Por venir conmigo. No tienes ni idea de lo feliz que me hace.”Aspiré el aroma de su cabello.

“Tengo curiosidad por saber donde naciste.”Dejó su cabeza sobre mi hombro, poniéndose más cómoda.

El camarero nos trajo el postre. Cogí una cucharada y lo acerqué a sus labios. Hizo un ruido de admiración mientras lo probaba. “¿Está bueno?”

“Mucho.”

Me incliné y apreté mis labios contra los suyos. Podía saborear el dulce cremoso en los rincones de su boca.”Tienes razón, está muy bueno.”

“Edward…”Gimió suavemente, tan solo yo pude haberlo escuchado.

“¿Si?”

“Vacilón.”Murmuró.

“Te prometo que no te vacilaré esta noche.”

“¿No tienes que hacer la maleta?”Se movió un poco sobre mi regazo, para encararme un poco mejor.

“Solo tengo que guardar algunas cosas. Ya tengo ropa allí. Esta noche te haré compañía mientras tu hacer la maleta y…”Me incliné y la besé otra vez.”Hasta que tengamos que ir al aeropuerto.”

“Oh, Carlisle, mira lo adorables que están juntos.”Oí a mi madre susurrarle audiblemente a mi padre. Pude sentir el calor de la carne de Bella cuando se dio cuenta de que mis padres estaban allí. Trató de moverse pero la retuve firmemente.

“¿Tuvisteis suerte?”Pregunté en tono coloquial.

“Algo. Pero entonces la camarera comenzó a flirtear con tu padre, así que tuve que ponerle fin.”Se burló mi madre de mi padre.

“No flirteaba, estaba siendo educada.”

“Eres tan ingenuo. Sencillamente no sabes lo guapo que eres.”

Gemí por el coqueteo de mis padres y Bella soltó una risita.”Siempre estas así.”Susurré.

“Creo que es maravilloso lo enamorados que están.”

“Espero que estemos igual de enamorados cuando tengamos su edad.”Susurré junto a su oído besándola suavemente.

“Creo que nos están llamando viejos, Esme.”Dijo mi padre en voz alta. Sonreí en su dirección.

“Sí, creo que sí. Nosotros lo viejos nos vamos. Dejemos a estos dos jovencitos en casa. Mañana será un día largo.”Se burló de nosotros mi madre.

Bella Swan

En el viaje de vuelta a casa permanecí en la limusina en silencio. Edward y sus padres charlaron pero yo tenía demasiados pensamientos como para concentrarme. Edward había dicho varias cosas esta noche que causaron que estallaran un número masivo de pensamientos en mi cabeza.

“Amor, ya hemos llegado.”Me susurró junto a mi oído. Debía de haber supuesto que estaba dormida o algo así.

“Querida me lo he pasado maravillosamente, mañana nos veremos.”Esme se acercó y me abrazó con fuerza, poniendo un suave beso en mi frente.

“Gracias, Esme, Carlisle. Me lo he pasado muy bien esta noche.”Dije saliendo del gran coche negro. Edward salió después de mí.

“Estaremos aquí sobre las cinco, cuando estemos listos. Pasad una buena noche.”

“Muy bien, papá. Comportaos.”Rió entre dientes Edward.

“Y, yo pensaba que era el padre.”Contestó sonriendo. Carlisle me guiñó un ojo antes de cerrar la puerta. Oí como Esme soltaba una risita tonta desde dentro.

“¿Siempre están así?”Le pregunté mientras caminábamos por la acera.

“Oh, sí. En realidad lo hacen para molestarme. Ahora… todavía me incomodan algo pero entiendo su comportamiento.”Se encogió de hombros.

Solté una risita por su respuesta.”Oh ¿Ahora lo entiendes?”Abrí la puerta.

“Sé como es la sensación de estar enamorado.”Respondió suavemente. Dio un paso, sujetando mi brazo. Cerró la puerta y me empujó contra ella.”Como es el no poder contener las emociones que crecen en tu interior. Sentir que tienes que soltarlas, o estallarás.”

“¿Estás seguro de que vas a licenciarte en filología inglesa?”Mascullé. Siempre se expresaba mucho mejor que yo. Estaba bastante celosa.

“Bella, no puedo explicarte con palabras lo maravillosamente bien que me haces sentir. Podría hablar una docena de idiomas y no tendría suficientes palabras para explicarte lo hermosa que eres.”

Puso sus manos contra la puerta, a ambos lados de mi cabeza. Se inclinó hacia mí, sus labios estaban a pulgadas de mi oído, pero no habló, en lugar de eso, acarició mi mandíbula con su nariz, apenas rozándome.

“Edward, quiero preguntarte algo…”Dije tranquilamente, no quería molestar a su suave caricia, pero tampoco quería perder los nervios.

“Lo que quieras.”Respiró.”Te daré el mundo sobre una bandeja si o deseas.”

Junto nuestros labios y cerré los ojos.”¿Soy el amor de tu vida?”

“Sí.”

La respuesta fue corta y dulce. Ni siquiera la tuvo que pensar. Fluyó por sus labios con facilidad.
Llevó su boca a la mía y luego me besó profundamente. Hundí los dedos en su pelo, atrayéndolo más a mí.

“Un día, voy a poner un anillo en ese perfecto dedo que tienes, y pasaré el resto de los tiempos tratando de encontrar nuevas formas de hacerte sonreír.”Susurró junto a mi oído, haciéndome temblar.

Sentí como si mi pecho fuese a estallar. Me encontraba feliz y asustada al mismo tiempo. ¿Era una proposición? O solo estaba siendo romántico. No importaba. No forzaría el asunto. Salíamos desde hacía cuatro meses. Demasiado pronto para casarnos, aun cuanto sabía que iba a pasar el resto de mi vida con él.

“Tú eres suficiente. No necesito nada mas.”Le susurré.

“Por eso es por lo que quiero darte el mundo entero, porque no me lo pides. De hecho, me gustaría que aceptases mis ofertas y proposiciones con más facilidad. Quiero mimarte. Quiero comprarte ropa de seda y dulces perfumes. Quiero darte cualquier cosa que tu corazón desee.”

“Aunque yo no quiera que me mimes.”

“Bella.”Gruñó mi nombre.”Me haría feliz.”

“Quiero darte tanto como tú me das y no puedo. ¿Sabes lo duro que es?”Le rogué suavemente, apoyando la cara en su cuello.

“Pasar el tiempo contigo es un don precioso. Es todo lo que podría pedir.”

Capítulo 20: Capitulo 20 Capítulo 22: Capitulo 22

 
14439152 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10756 usuarios