CAPITULO 3

La habitación del hotel estaba fría, las frazadas demasiado livianas. Había comenzado ya a llover y yo me moría de frío.

Me desarme antes de caer dormida en un sueño profundo, un sueño en el que me encontraba sola.

Me desperté algo desorientada, no sabia donde estaba. Lo supe cuando mire hacia la ventana. Si, el hotel.

Llame a papa desde un teléfono público para decirle que me tomaría unos días, yo sabia que eso no podría hacerlo ya que era una empleada mas, pero intentaría encontrar otro empleo, uno en el que estuviera fuera de la ciudad, cuando menos un tiempo.

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El tiempo paso. Los dos días que pensaba tomarme se convirtieron en semanas y luego en meses. Había conseguido un trabajo como mesera en un bar en Spring, no era un gran empleo, pero al menos podía mantenerme a mi misma.

Había perdido el contacto con casi todo el mundo excepto con mamá, yo sabia que ella no le diría a Jacob donde es que me encontraba.

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Camine como todas las noches desde el bar hasta mi pequeño apartamento, no estaba muy lejos, solo eran tres cuadras, me sorprendí cuando vi un auto plateado frente al edificio, se veía demasiado lujoso para estar en esta colonia.

Entre desapercibida y tome las escaleras hasta el piso tres, camine hacia el apartamento 6 y justo antes de llegar alguien me tomo de la mano.

— mi amor — el mundo se me vino encima. Seguía tan guapo como lo recordaba, llevaba un poco de barba y lo hacia lucir sexy. Yo lucia como una pordiosera, mi cabello estaba sujeto en una simple coleta y mis uñas mordidas por los nervios de la última semana. Mi blusa era muy amplia, ocultando así aquel pedacito de Jacob que crecía en mi.

— ¿que haces aquí? — quise saber, el me observo unos segundos y luego me jalo para acercarme a su cuerpo y besarme salvajemente

— mi amor, mi cielo, mi vida... ¿acaso no es obvio? Vengo por ti, volvamos a casa — negue con la cabeza mientras me alejaba de el

— vete, no quiero verte mas — fruncio el ceño y bajo su vista a mi vientre. Perfecta hora para que mi bebe se moviera. Si bebe, es tu papa, pero este hombre nos engaño con mi mejor amiga.

— estas... Cielo santo... — Movió sus manos para levantar un poco mi blusa y ver mi abultado vientre de 5 meses y medio

— Renesmee... — me gire para ver a Matt, mi vecino gay.

— ya voy amor, me encontré con un amigo y solo lo saludo — mi amigo gay, tenia ese aire masculino que a muchas chicas les gustaba. El lo entendió todo al verme el rostro, se acerco a mi y tomo mi mano

— hola, soy Matt Johnson, el novio de Renesmee y el padre de este precioso bebe — dijo estirando su mano hacia Jacob. El lo observo mientras sus ojos se oscurecían.

— no. El padre de ese bebe soy yo — alce ambas cejas y luego Sonreí

— no Jacob, Matt es el padre de mi bebe —

— si, y el conejo de pascua es real, vamos, ambos saben que eso no es verdad — Matt sonrió, descubriendo así nuestra gran mentira. Cielos Matt, ¿no sabes guardar un secreto?

— ¿te la llevaras? —

— tengo que cuidar de mi mujer y de mi hijo —

— solo permiteme darle algo que compre para el enano — Matt se alejo de mi y me dejo a solas con mi ex esposo. Suspire y el me tomo entre sus brazos.

— puedes ver al bebe, lo tendrás contigo y tu esposa algunos fines de semana —

— tu eres mi esposa. Rompí los papeles. La noche en que te fuiste, estaba pensando en lo celoso que me ponía cuando tu hablabas con Collin, o cuando hablabas con Seth, en el fondo no quería separarme de ti. Y se que me equivoque con lo de Jane, y que quizás nunca puedas perdonarme eso, solo Dejame recuperarte, volveré a hacer que te enamores de mi. Nuestro hijo nos necesita juntos —

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Estaba terminando de empacar mis cosas, que afortunadamente no eran muchas. No me iría con Jacob. Iria a vivir con mis padres, aunque no estaba muy segura de como tomaría papa esta noticia, no había hablado con el en los 5 meses y medio que estuve fuera.

Jacob parecía feliz mientras leía el instructivo para armar la cuna que Matt le había comprado a mi bebe.

Me contó que la noche en que yo salí de casa el había ido a hablar con Jane para terminar con ella, el quería recuperarme esa misma noche, pero cuando regreso yo ya no estaba ahí. Me busco por toda la ciudad junto con mi padre, hasta que hace dos días mama le dijo donde estaba, aunque no le comento sobre mi estado de embarazo.

Me dormí durante todo el camino a Aspen, cuando desperté Jacob me llevaba en brazos rumbo a mi habitación en la casa de mis padres.

— iré a casa a Darme un baño para ir a trabajar, cuando salga vendré por ustedes para llevarlos a cenar... Los voy a recuperar —

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Las nueve de la noche se llegaron y Jacob nunca apareció. Me fui a mi habitación y me quite el vestido con el que saldría. Una llamada entro en mi celular nuevo. Jacob...

— si amor... Si, así... Sigue, sigue... — decía la voz de una mujer... Jane.

Mis lágrimas cayeron y corte la llamada. El era un mentiroso, solo quería tenerme cerca para mostrarme que no me amaba como el decía.

Cuando amaneció fui a comer un poco de cereal. Me senté en la sala para ver las noticias mientras mis padres se arreglaban para ir a trabajar.

Jacob entro silbando con un ramo de flores en sus manos, me miro y se acercó a mi sonriendo. Intento besarme y yo gire mi rostro.

— hola amor... Salí tarde ayer, no creí conveniente venir tan tarde —

— se lo que hiciste ayer. Vete, Jacob, conmigo no tienes mas oportunidad... Esta vez soy yo quien quiere el divorcio — fruncio el ceño y después su rostro cambio a sorpresa

— ¿que? No mi amor, no —

— si Jacob... Quiero el divorcio —