BELLA POV

-Crees que despierte pronto?

-no lo sé. Debemos esperar... Su pulso se está fortaleciendo, esperaremos al amanecer.

Escuchaba diferentes voces, mi mente estaba jugándome una mala pasada, quería a Edward conmigo, quería a mis hijos conmigo. Extrañaba a mis padres y a Emett. Sobre todo a mi loco hermano. Algún día los volveré a ver? Por qué mierda no puedo escapar de Christian! Necesito ver a mi familia.

****

-hay que llevarla ahora, están esperando Abajo

-ayúdame a moverla.

-es seguro bajarla?

-Si, lo es. Rapido, no debemos dejarla aqui mucho tiempo.

Por que simplemente no terminan de matarme? No puedo moverme, no puedo abrir mis ojos, simplemente oigo voces distorcinadas de lo que hablan, quizas piensen en como matarme. Quieren despertarme para matarme lentamente mientras les veo a los ojos. Se que suena algo fatalista y quizas terrorifico pero he hecho cosas peores y se de lo que pueden ser capaces las personas por venganza.

****

-esta muy grave?

-no, no lo está. Ya está estable.

-y por que no despierta? Ya tiene 4 dias asi.

-Aun sigue en estado de shock, despertará cuando este lista.

Si estan hablando de mi, preferiblemente es mejor no despertar, no quiero toparme con la mirada gelida de Christian a mi lado, viendo como planea su venganza y como la pone en practica mientras me ve sufrir y suplicar por ver a mis hijos por ultima vez. Es mejor morir ahora que no siento nada a sentir todo cuando despierte.

***

Abrí los ojos lentamente, sentia que los parpados me pesaban, la cabeza me daba vueltas. Traté de enfocar la vista y me encontré en una habitacion blanca sin ventanas, solo habia una pequeña tv. "Lo que faltaba, el maldito me encerró en un manicomio" pensé bufando.

Traté de mirar a mi al rededor a ver si veia algo mas, entonces entré en panico. Una cabellera cobriza estaba reposando junto a mi mano en la camilla. "Christian" pense asustada.

-Christian - Susurré asustada tratando de alejar mi mano, pero estaba entrelazada a la mano de él. Cuando sentí que apretó su agarre - ALEJATE! - grité mientras me zafaba de su agarre, senti como se levantaba asombrado pero no queria verlo queria que se fuera.

-Be...

-VETE. ALEJATE - grité histerica, me iba a hacer daño, sabia que me haria daño - NO!

-Bella, Bella tranquila. - trataba de acercarse y tocarme.

-NO ME TOQUES.! AUXILIO... NO ME TOQUES - traté de alejarme lo mas que pude pero aun seguia en la maldita pequeña cama.

-Bella, soy yo. Tranquila... DOCTOR... Bella, nena tranquila. Dejame ayudarte.

-NO TE ACERQUES, MALDITO.! QUIERES MATARME? ESO QUIERES? ALEJATE!

-Bella, cielo... Por favor... Yo..

-TU QUIERES MATARME - gritè bajando de la cama y corrí como pude a un rincon. - Quiero a Edward - sollocé, abrazandome a mis piernas me dolia la pierna y mucho.

-Cielo, soy yo, Edward - escuché esa voz pero sabia que me engañaba

-que ocurre? - escuché otra voz mas gruesa.

-esta alterada, dice que la quiero matar. Que quiere a Edward pero... Soy él. Que hago?

-un momento - senti unas manos en mis brazos y volvi a gritar - Bella, abre los ojos, ahora! - exclamò, al abrirlos vi a un hombre de tez morena con bata blanca, lo miré confundida, no eran mis captores. - estas a salvo, Bella.

-Como... Como sabes mi nombre? Donde estoy? - pregunté confundida, quizas es una trampa.

-estas en un hospital en Port Angels. Y lo se por que Edward me lo dijo. - lo mire abriendo los ojos desmezuradamente.

-Edward? - jadee sonriendo - Don... Donde esta?

-aqui - escuché su voz. Su dulce voz, alcé la mirada y lo vi. Sin esperar demasiado me levante rapidamente y me lance a sus brazos. Aunque un fuerte dolor se posó en mis costillas. - Bella - susurró escondiendo su cabeza en mi cuello.

-Edward, eres tu. - susurré aun aturdida. Aguantandome donde me dolia, senti unas vendas al rededor.

-Te duele? - preguntó triste, solo asentí - ven, acuestate, aun debes estar de reposo - me acostè en la camilla y el doctor empezo a revisarme.

-es un placer conocerte despierta, Isabella. - dijo el hombre con extraño acento Indú.

-Por que lo dice? - pregunté al ver como él y Edward sonreian.

-Pues, Benjamin - señaló al doctor - te encontró en el bosque y te estuvo cuidando en su casa hasta que escapaste, nuevamente. - contestó Edward haciendo una pequeña mueca.

-Asi que no querian torturarme ahí? Vi tantas cosas que me asusté y huí. - contestè apenada.

-esta bien, cariño. Ya todo pasó - me sonrió y besó mi mano. Él doctor siguio revisandome y luego se puso su estetoscopio en el cuello y me sonrio.

-las pupilas no estan dilatadas, la fractura esta sanando bastante bien, no tiene traumas en la cabeza, tu tobillo no tiene daños asi que vas a estar bien - me dijo amablemente y sonriendo.

-gracias Doctor - le contesté amablemente.

-si me necesitan solo llamenme, ok? - ambos asentimos y él salio. Cuando cerró la puerta los brazos de Edward me rodeadon antes de poder pestañear.

-Te extrañe tanto, cariño. - murmuró en mi pecho, a pesar del dolor que sentia le abrace igual o mas fuerte. Habia pedido tanto por él que ahora que está aqui no perderé la oportunidad de abrazarlo.

-y yo a ti, Edward. Como me encontraste? Lo ultimo que recuerdo es que casi me ataca un lobo y me escondí entre unos arboles. - comenté tratando de pensar.

-el papá de Benjamin siguio tu rastro, gracias a él te encontré, llevaba semanas preocupado Bella. Los niños estan tan tristes, quieren verte!

-les dijiste que me secuestraron? - pregunté horrorizada.

-no, cielo. No los traumaria asi. Les dije que saliste a trabajar y volvias pronto.

-cuanto tiempo a pasado, se que duré una semana atada a una cama y escapé. Despues de eso deje de contar los dias.

-llevabas al rededor de una semana perdida cuando te encontró el papá de Benjamin a las orillas de un río casi muerta, y otra semana aqui en el hospital.

-TRES SEMANAS? - exclamé horrorizada. Él solo asintio tristemente. - que pasó con Christian y Peter? - pregunté luego de unos minutos.

-Estan en el piso de arriba. Peter ya esta esta estable, pero Christian tiene traumas en el cuerpo y casi pierde la mano. Sin contar que ambos estaban terriblemente deshidratados.

-Peter no se fue? - pregunté confundida.

-no, lo encontramos dentro de un armario bajo las escaleras... Tu lo hiciste, cierto? - preguntó algo apenado, lo miré y bajando la mirada asentí. - no lo sientas, cielo. Se lo merecian.

-Soy una mala persona, tengo sangre de otros en mis manos. Estoy manchada de por vida - murmuré sollozando - quien va a quererme asi.

-Yo te quiero asi. Y no estas manchada. Te defendiste, Bella. Luchaste por mi, por ti y nuestros hijos y eso no es malo. - contesto dulcemente.

-que pasará con ellos? - pregunté cambiando el tema.

-seran llevados a juicio cuando se mejoren. Mientras tanto, usted va a cenar mientras yo salgo un momento. - me dio un beso en la frente y sonrió

-no me dejes sola por favor - rogué tomandole del brazo cuando se levanto. Me sonrió dulcemente y me acaricio la cara.

-tranquila, no estaras sola - en ese momento tocaron la puerta y Emett entró.

-BELLITA - gritó cuando entró y me vio sentada en la cama.

-Emett - murmuré y sonrei - te extrañe hermano. - este se acercó y me abrazó fuerte. - haaa! - jadee de dolor.

-lo siento, lo siento, enana. Me olvide de tus fracturas. - murmuró con carita triste. Lo miré frunciendo el ceño.

-que fracturas? - pregunté confundida.

-Cielo, tienes fracturas en dos costillas y en el tobillo, imagino que la del tobillo te la hiciste en el bosque. - contestó con voz triste.

-si, aunque con los golpes ahora pareces Grich, estas toda verde. - contestó Emett en tono de burla sonriendo.

-Emett! - le reprendió Edward en tono severo y con la mirada oscura.

-lo siento - susurró haciendo un puchero.

-Golpes? Quiero un espejo - pedí seriamente.

-Bella, cielo. Mejor no - contestó Edward algo nervioso.

-Quiero un jodido espejo, Ahora! - Dije ya molesta. Él suspiro y regalandole una mirada de odio a Emett tomó un espejo de un pequeño bolso y dudando un poco me lo acercó. - Ho por Dios! - jadee al verme en él.

Tenia un ojo totalmente rojo por dentro, mi cara magullada y en tonos verdes y morados, no me habia dedicado a revisarme en realidad, miré mis brazos tambien verdosos en algunas partes, mis muñecas totalmente marcadas por las cadenas, estaban moradas y algo rojas, subí mi bata sin importarme Edward y Emett y vi que tenia una Venda rodeandome el torso, mas golpes verdes en mis piernas y una ferula en mi pie derecho.

-Nena, mejoraras pronto, si? Esos golpes desapareceran. Todo ha acabado - susurró acercandose a mi mientras tomaba mi cara con cuidado y me miraba fijamente. Asentí rapidamente mientras trataba de quitar las lágrimas de mis ojos. - vuelvo en un momento, si? - me dio un beso en la frente - cuidala Emett, ya vuelvo

-A donde vas? - pregunté triste.

-voy a comprar algo de comida, ni Emett ni yo hemos comido en todo el dia - sonrió y salió.

-tranquila hermanita, todo estara bien - se sentó a mi lado en la cama. - sabes... Extrañaba tus peleas, tus golpes y tus abrazos. Pero no se lo digas a nadie.

-esta bien, osito. No le dire a nadie - le sonreí y lo abracé - yo tambien te extrañe - susurré suavemente.

-tienes hambre? - preguntó sonriente. Asentí por que en realidad estaba muriendo por comida. - hace dias que no comes, te han dejado sopa de pollo, sabe bien, ya la probé.

Emett tomó la sopa y empezó a darme de comer en la boca, un bocado él y otro yo. Asi nos acabamos todo. Despues de terminar de comer me recosté en la cama y Emett se recostó a mi lado a contarme todo lo que Edward habia hecho para encontrarme, ahora sabía a quien le importaba, a pesar de mis errores, mis malas actitudes, mis defectos y mis trastornos, Edward me quiere por lo que soy. Me quiere de verdad.

***

-Bella? Cariño. Despierta - abrí los ojos lentamente y sentí la mano de Edward acariciar mi mejilla, enfoqué mi vista y vi su hermosa sonrisa y sus lindos ojos verdes mirandome - hola preciosa, buen dia.

-hola... Que tanto dormí? - miré a mi alrededor y Emett no estaba por todo eso - Donde está Emett?

-se fue anoche al hotel, yo me quedo contigo, tienes hambre? - preguntó dulcemente.

-no, que hora es? - pregunte aun adormilada.

-son las 8, el doctor viene en un momento. - contestó dandome un pequeño beso en la frente. En ese momento entró el doctor a la habitacion.

-Buenos dias, Edward... Isabella. Buen dia - saludo amablemente, parecia que tenia bastante confianza con él. - vamos a revisarte, Isabella.

-esta todo bien? - preguntó Edward despues de que Benjamin me revisara y me chequeara las fracturas.

-está todo bien, todo esta orden, sus valores estan estables, ya le podemos dar de alta. - le contestó a Edward y me sonrió a mi.

-Entonces, puedo irme? - pregunté feliz. Ya queria ver a mis niños y a mi familia.

-Si, Isabella. Ya podras irte, firmaré tus papeles de alta y para el medio dia podras salir.

-Gracias, Benjamin, muchisimas gracias. No sabré como pagarte todo lo que has hecho por mi y por Bella - le dijo Edward mientras le agradecia tomandole la mano.

-No tienes nada que agradecerme, Edward. Te dije que el señor Krishna nos pone en el camino de quien nos necesita.

-Gracias a Krishna, entonces - sonrió Edward. Benjamin se rió, juntó sus manos en un pequeño saludo Indú y salió de la habitacion. - pareces feliz, cariño - comentó Edward sonriendo.

-se nota? - pregunté sarcasticamente. Sabia que tenia una sonrisa enorme en mi cara. - Edward? - llamé cuando se dio la vuelta hacia él sofá. No sabia como preguntarle, aunque tampoco sabia si él lo habia hecho antes.

-que pasa, cielo? - preguntó mirandome dulcemente.

-Esto... Quisiera... - me ruboricé, estaba algo apenada - Podrias llevarme al baño? Quiero ducharme? - él sonrio dulcemente y se acercó a mi.

-Bien, cielo. Pero no puedes bañarte sola, no debes pasar mucho tiempo en pie, bastante fue con que no te rompiste mas el tobillo ayer. Yo te ayudaré - enseguida me ruboricé aun mas... Por que Edward me ayudaria? Esta loco?

-no, no tienes que hacerlo. Por Dios! Puedo bañarme sola - exclamé mientras el me cargaba y me llevaba al baño. Me sentó en el inodoro que estaba tapado y se agachó frente a mi.

-no, preciosa, no puedes... Ademas, no se por que tanto pudor? Si yo conozco tu cuerpo mejor que tu - murmuró en tono sugerente mientras enarcaba una ceja.

-Edward! - lo reprendi sonriendo mas ruborizada de lo que estaba, suspiró y sonrió.

-como extrañaba tus sonrojos sin sentido - murmuró burlonamente - cariño, soy yo quien te ha bañado y limpiado toda esta semana, Emett no lo iba a hacer. Ademas, no tienes nada que esconder, te he visto todo. Y no puedes bañarte sola, ya dije - contestó serio y al final sonrió.

-Bien - bufé ya que sabia que por mas que replicara no me bañaria sola, lo conocia bien. Empezó por quitarme la férula del pie, luego subió mi bata lentamente y me la quitó, me tapé rapidamente los senos llevando ambas manos a ellos, él sonriò y negó lentamente.

-Cariño, cuando te digo que te he visto todo, es por que te he visto todo - comentó burlonamente, miré hacia abajo y me di cuenta que no tenia ropa interior.

-Bien, deja de reirte de mi, Cullen - bramé y él se rió a carcajadas.

-tranquila, cariño. Solo es una ducha - susurró coquetamente, me quitó suavemente la venda del torso y me volvio a cargar para meterme en la ducha.

-una tina? En serio? - pregunté sarcasticamente cuando abrió la cortina y me metió en ella.

-no puedes estar de pie en una ducha, tienes que bañarte aqui. - se sentó en la orilla de la tina y me pasó el jabon. - ten, enjabonate, lavaré tu cabello - mientras me enjabonaba bajo el agua tibia, él empezó a masajear mi cabello con un shampoo que olia a fresas.

-mmmmm - ronronee al sentir sus suaves dedos masajear mi cabeza, cerré los ojos y heché la cabeza hacia atras dejandome llevar por los suaves masajes.

-te gusta? - murmuró suavemente, asenti lentamente, era una sensacion magnifica, hace mucho tiempo que no sentia nada asi. - dejate consentir, cariño.... - metio una de sus manos al agua y me quitó el jabon - dejame consentirte. - dejó mi cabello y enjabonandose las manos empezo a acariciarme el cuello suavemente, siguio por los brazos y bajó al pecho.

-Edward - jadee al sentir sus manos en mis pechos, como los acariciaba suavemente, como los masajeaba lenta y dulcemente.

-Dejate, mi amor - susurró en mi oido mientras sus manos bajaron con delicadeza por mis costados hasta mi estomago - quiero que sientas cuando te amo - soltó con voz ronca mientras masajeaba con delicadeza la cara interna de mis piernas.

-Se que me amas - jadee al sentir su mano en mi sexo, como frotaba mi zona de placer intenso, como deslizaba sus dedos entre mis pliegues y me exitaba aun mas.

-Te amo, Bella. Con mi vida, te amo - contestó con solemnidad mientras apartaba su mano de ahí, solté un suspiro molesto y sentí como reia suavemente detras de mi. - Se lo que quieres, pero Emett va a entrar en cualquier momento. - tomó la regadera de mano y sacó el shampo de mi cabello.

-BELLA, EDWARD - escuché el grito de Emett desde afuera, miré a Edward y el sonrió haciendo una mueca de "te lo dije"

-en el baño, Emett - Dijo Edward en voz alta.

-que hacen ahí, pervertidos, no ha terminado de curarse y ya estan haciendo suciedades? No les da verguenza! - exclamó Emett en su tipico tono sadico y de broma.

-me estoy dando un baño, Emett. Si quieres puedes pasar. No estoy visible - escuché como la puerta se abria y dejaba asomar a un Emett curioso, mientras Edward me hechaba agua con la regadera de mano, yo terminaba de sacarme el jabon.

-Vale, les creo. Tienes hambre, Bells? - preguntó aun sin entrar por completo.

-un poco, por que? - pregunté sonriendo.

-traje hamburguesas - canturreo mientras asomaba una bolsa de McDonals.

-Si quiero!! - exclamé sonriendo.

-bien, los espero aqui afuera. - salió y cerró la puerta del baño.

-bien, preciosa, hora de salir - comentó Edward mientras dejaba filtrar el agua, me sacò del agua sentandome nuevamente en el inodoro. - vamos a secarte - tomó una toalla y empezó a secar mi cuerpo con cuidado, me miraba serio y con el ceño fruncido mientras secaba y miraba mi cuerpo desnudo.

-que pasa, Edward. Que tienes? - pregunté confusa al ver su expresion.

-tenia que haber estado junto a ti, Bella. Esto no hubiera pasado, no estarias como estas ahora - comentò molesto.

-estabas de reposo, le salvaste a vida a mi pequeña. No puedo pedirte mas, Edward. - respondí acariciandole la mejilla suavemente.

-Nuestra pequeña, mi amor. Y debí haber hecho mas. No me gusta verte asi, Bella. Siento que es mi culpa - comentó con semblante triste.

-pero no es tu culpa, Edward. Fue mia. Asi que olvidalo. Ahora visteme que tengo mucha hambre - le contesté sonriendo. Él asintió sonrio y me tapó con la toalla.

-dejame buscarte algo de ropa - salió del baño y minutos despues entró, me puso mi ropa interior, un pantalon de chandal y una camisa blanca. - lista, dejame peinarte un poco y te sacó para que comas.

-Gracias, Edward - murmuré mientras él me peinaba.

-no tienes nada que agradecerme, amor - terminó de peinarme, me dio un beso en la mejilla y me cargo para ponerme en la cama.

-estas mas presentable, hermanita. - bromeo Emett tendiendome una bolsa de McDonals - Papas, hamburguesa, nuguets, helado y soda de limon.

-Gracias hermanito. - le contesté mientras sacaba la hamburguesa y él le tendia otra bolsa a Edward.

Comimos entre risas y bromas de Emett viendo la television. Pasado ya el medio dia, Emett y Edward me dejaron sola, la enfermera vino para ponerme la férula y las vendas mientras Emett buscaba mi papel del alta y Edward se encargaba de tener listo el avion para irnos.

-Fue en placer haberte conocido, Isabella. Espero mejores pronto y que la proteccion de Krishna este siempre contigo.

-gracias, Benjamin. No se que habria sido de mi sin tu ayuda - le di un abrazo y un beso en la mejilla.

-cuidense mucho. Que Alaáh los lleve con bien - se despidio de Edward y de Emett y nos acompaño hasta la puerta donde nos esperaba el auto, me gustaba la silla de ruedas, era bastante comoda. Al salir por la puerta miré a Elliot, Hide y el moreno.

-Bella - exclamó Elliot sonriendo, se acerco a mi y me abrazó - que bueno que estes bien, no sabes lo mal que me senti por todo esto, es mi culpa lo que te pasó.

-no fue tu culpa, Elliot. Todo esta bien. - le acaricie la mejilla y el suspiró.

-Bienvenida de vuelta señora Swan - saludó Hide formalmente pero sonriendome.

-Gracias Hide.

-Señora Swan! - saludó serio el moreno.

-cariño, él es Paul, otro de mis guardaespaldas.

-Ho! Un placer conocerte, Paul - le tendi la mano, me vio algo confundido, luego miró a Edward detras de mi y vi como Elliot y Hide trataban de ocultar una sonrisa. Me tendio la mano, asintio y se alejó.

-Bueno? - miré hacia atras y vi a Edward hablando por telefono - si, cariño... No, no me tardaré mucho... Tambien te quiero, mi amor - levante una ceja y miré a Edward bastante molesta. Nunca me pregunté si el tenia a alguien mas. Edward sonrió burlonamente y me paso el telefono. - alguien quiere hablar contigo - comentò en tono burlon.

-Bueno? - contesté aun eceptica y molesta.

-HOLA MAMI - escuché el grito de mi nenita al otro lado y sonreí.

-Hola mi amor. Como estas? - pregunté casi llorando.

-Mien mami, menes con papi? - preguntó con su tonito esperanzador.

-si, mi pequeña. Mañana estaremos en casa. Te quiero.

-y yo a ti mami, adios.

-adios, cariño - susurré con la voz quebrada y le di el telefono a Edward, las lagrimas caian incesantemente en silencio, Edward se agacho frente a mi y tomo mi cara entre sus manos.

-no llores amor. En un par de horas estaremos con nuestros hijos, si? Todo esta bien. Te amo - asentí entre sollozos. Edward me subio a un mercedes parecido al de Charlie y se subio conmigo y Emett.

-Edward? Necesito maquillaje - murmuré mientras ibamos en via al aeropuerto.

-para que, cariño? - preguntò confundido.

-no quiero que los niños me vean los moretones, por lo menos no los de la cara. - contesté triste.

-esta bien - me dio un beso en la mejilla y sonrio - Elliot, para en la tienda de cosmeticos antes de entrar al aeropuerto.

-si señor. - Elliot paró en una tienda CoverGirl y Edward me ayudó a comprar. Como no podia caminar él fue a la tienda y yo le guiaba a traves de una llamada.

-Las mujeres cambian a los hombres - murmuró Paul que iba al lado de Elliot mientras que Hide estaba con Edward.

-por que lo dices? - pregunté confundida aun con él telefono en mi oido.

-Disculpe, señora Swan - contestó apenado. - pero jamas habia visto al rey hacer algo asi por nadie.

-Paul - llamé seria y él volteo a mirarme - se podria decir que yo soy nadie - contesté con una sonrisa. Él me miró confundido y se volteo. susurró algo a Elliot y este sonrió.

-El señor Cullen es capaz de hacer cualquier cosa por Bella. Lo que sea. Es su razon de ser - susurró pero aun asi le escuché.

-Dios! No se como pueden hacer esto! - comentó Edward malhumorado mientras se subia al auto

-que paso, hermano? No encontraste nada de tu color? - preguntó burlon Emett.

-ja,ja. Gracioso - se mofó Edward - no se como las mujeres pueden comprar todo esto y como saben que color es el suyo? - preguntó aun molesto.

-simplemente lo sabemos. Gracias por ayudarme con esto, Edward - sonrei dulcemente y le di un beso en la mejilla.

-cuando quieras, preciosa - sonrio y me abrazó

-te lo dije - susurró Elliot a Paul. Llegamos al aeropuerto en cuestion de minutos y nos detuvimos en el hangar Cullen. Edward me sacó cargada y me subió al jeet y luego subieron los demas.

Me encontraba sentada en una de las butacas, miraba las nubes como pasaban lentamente mientras que Emett roncaba frente a mi y Edward a mi lado leia un libro. Parecia que estaba soñando, de verdad estaba volviendo a casa... Todo lo malo estaba quedando atras y mi vida empezaria nuevamente.

-Quieres que te lleve a la habitacion, cariño? - preguntó Edward, ciertamente estaba quedandome dormida pero no queria dormir y ver que cuando despertara seguiria en el mismo infierno de hace semanas.

-no, estoy bien. Ya solo falta media hora para llegar a Londres, no quiero dormir. - él sonrio y asintio. Tomé el maquillaje y empecé a hecharmelo poco a poco.

-eres hermosa con o si el - susurró Edward en mi oido.

-lo se, pero no quiero que los niños me vean asi.

-y que les diras sobre tu pierna y que no puedes caminar? - preguntó serio.

-no lo se, aun. Podriamos decir que su madre se volvio un poco torpe. - bromeé y él hizo una pequeña mueca.

-Bella, en algun momento van a preguntar, ellos son muy inteligentes e intuitivos, sobre todo Renesme - comentó preocupado, sonreí al recordar a mi pequeña.

-si, lo se. Se parece mucho a ti en ese aspecto - susurré recordando - aunque Tony siempre tiene esa carita de "Estoy pensando, no me molesten" que tienes tu. Es él que mas me recuerda a ti.

-son hermosos, Bella. Los amo - miré su cara y era de total devocion hacia los niños. - a los tres. - lo mire confundido y me sonrió - A ellos y a ti.

-Abrochence los cinturones por favor. El capitan dice que vamos a aterrizar - nos dijo la azafata amablemente. Me abroché el cinturon y esperamos el aterrizaje, estaba demasiado ansiosa y muy nerviosa en realidad, queria ver a mi familia, a mis niños, queria empezar nuevamente con mi verdadera familia.

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Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

volví...una semana de tardanza no mas... que rao verdad? es que estoy tratando de ponerme al dia, era hoy o en una semana mas. no creo que els gustara esperar. y como estoy reescribiedo la otra historia me estoy estrezando mucho ultimamente.

espero que les haya gustado el capitulo, iba a hacerlo mas largo pero... ñeee, me gusta mantener el suspenso, trataré de actualizar mas rápido esta proxima vez.

leo opiniones, comentarios, locuras y pedidos... soy abierta criticas. aunque soy de autoestima bipolar. en fin, agradezco que lea, voten y comenten, los quiero mucho y bueno...

Nos leemos pronto.

besos

chau chau.

@PsicodElii