Aviso: Bueno chicos se preguntaran porque no actualizo tanto estos dias ^^, bueno primero quiero decir algo mas bien una peticion, he visto que una vez que el concurso terminó han disminuido los comentarios, si me han ayudado en votos pero quisiera si no es mucha molestia que me ayudaran con mas comentarios y votos si no lo han hecho ^^, esta probablemente sea mi ultima historia antes de que mi vida laboral me absorba y ya no pueda hacerlo :(, asi que me encantaria digamos retirarme jejeje teniendo ambos fic en los primeros diez lugares ^^, no cuesta nada soñar ^^ jejeje, en fin hay les encargo, un abrazo enorme y pues les pido 5 comentarios u votos minimos para la siguiente actualizacion, perdon ^^ no es por molestar en serio
Ah y este Capi va para mi hermanita y amiga ^^ Zay, Feliz Cumpleaños Zay! te quiero Amiga ^^ Team Zay Forever and ever XD
PARTE III
(Parte Final Del Interludio)
Casi dos años después…
Bella POV
— Cariño sé que estas detrás de la cortina ¿Por qué no sales? Saldremos dentro de quince minutos — le dije a Nessie que se ocultaba haciendo un juego mientras nos preparábamos para visitar a Charlie en el primer cumpleaños del pequeño Ethan, el hijo de Leah y Jake.
— Pero mama…— renegó aun detrás de la cortina, me acerque sin hacer ruido, sonreí un segundo antes y la abrace trayendo conmigo la cortina, comencé a hacerle cosquillas mientras sus piecitos se movían incontrolables— ¡espera…espera!... ¡está bien, si voy!
— ¿Qué no quieres ver al abuelo, o a tío Jake?— le pregunté mientras la levantaba del suelo, ahora con más de tres años ella podía comunicarse con nosotros libremente, era muy inteligente para su edad, aunque con su visión infantil sobre las cosas que solo hacía más divertido verla crecer, nuestra relación era más unida que nunca ahora que hablábamos todo el tiempo, me extraño que no quisiera ir a Forks, cuando Edward propuso el viaje creí que se alegraría
— No es el abuelo, ni el tío Jake…no me agrada Ethan…es muy aburrido, prefiero quedarme contigo y papa
— Cielo, Ethan no es aburrido, simplemente es un bebe, no puede jugar contigo como lo hacemos nosotros, él no es tan…fuerte, pero estoy segura que en unos años te divertirás mucho a su lado
— Pero no quiero jugar con él…— dijo haciendo pucheros, era encantadora con sus rizos cayendo frente a sus ojos y sus manitas en puño tratando de probar que tenía la razón, sonreí hasta que vi unas lágrimas crearse en sus ojos y que amenazaban con salir, entonces me agache hacia ella y abrí mis brazos, ella se lanzó y hundió su rostro en mi cuello mientras me abrazaba con fuerza, entonces vi la figura de Edward entrar en la habitación, solo que no era el presente, era el futuro…finalmente podía controlar un poco mis visiones
— tengo un trato, ¿quieres escucharlo? — le dije limpiando una lagrima que recorría su nariz por encima, ella levantó un poco la vista y me vio a los ojos, entre sollozos asintió— prometo que si te aburres yo misma jugare contigo en el claro donde tu papa y yo solíamos pasar el tiempo, es un lugar hermoso, te encantará Nessie, las flores son casi tan altas como tú y puedes escuchar el sonido de los arboles ¿tenemos un trato? — le dije sonriendo, su sonrisa comenzó a asomarse y tomo mi mano estrechándola, ella no sentía el frio de nuestra piel, quizá ya se había acostumbrado, quizá ella tenía el poder de soportar la temperatura, no lo sabía con exactitud pero lo había descubierto una noche de invierno cuando tenía poco más de un año apenas, me dolía acostarla en su pequeña cuna, sentía que necesitaba más calor, mismo que yo no sería capaz de brindarle, cuando me aseguré que su habitación estuviera lo más cálida posible, regresé al estudio con Edward y me recosté a su lado en uno de los sillones mientras leía, entonces minutos después, en los que luche contra el instinto de ir hacia mi pequeña y ver si le faltaba algo, sentí una manita en mi pierna, no la vi venir, quizá porque mi mente estaba ocupada en ella misma, al filo del sillón nos observaba a los dos, apenas aprendía a caminar y ya llevaba su manta, nos abrió los brazos y me di cuenta que nuestra temperatura no le afectaba, y si lo hacia, ella prefería un poco de frio a estar alejada de nosotros…yo pensaba lo mismo pero tenía miedo de hacerle daño, después de ese día ella decidía cuando estar con nosotros y cuando no, era una pequeña muy cariñosa pero independiente, en los últimos días por las noches se despedía de nosotros y se marchaba a su recamara…
— ¿No piensas invitar a papa princesa?— escuche la aterciopelada voz de Edward en el marco de la puerta, apenas me gire cuando Renesme ya se había lanzado a sus brazos, me levanté en menos de un segundo y me les uní al abrazo, entonces lo escuche en mi mente “¿crees que debamos viajar?, creí que le agradaría ver a Charlie pero no me gusta que llore”, me pregunto mientras limpiaba una lagrima de su rostro
— Creo que valdrá la pena, además…es nuestra primera salida desde que estamos aquí, ¿no extrañas Forks?— le dije y comencé a mandarle algunas imágenes del claro, del bosque, de mi antigua habitación…
— Me has convencido— dijo él en voz alta, Nessie besó su mejilla y bajo de sus brazos, tomo su pequeña mochila y salió en dirección a la cochera donde la esperaban los demás, esta vez viajaríamos solo los tres, sentí los brazos de Edward en mi cintura— ¿Cómo has hecho para convencerla?— dijo el besando la comisura de mi boca
— Mmm… la conozco y sé que le gustará estar ahí solo necesita recordarlo — le dije sonriendo — tenemos que irnos ahora si queremos llegar a tiempo— le recordé, debíamos pasar por la universidad a dejar algunos documentos…¿Quién pensaría que los vampiros se preocuparan por llevar bien sus notas?, aun después de mi transformación me seguía fastidiando la escuela, aunque no era mucho tiempo en realidad, en menos de diez minutos terminábamos lo que a los demás les tomaba semanas…quizá era eso lo que le agradaba a nuestra única compañera y amiga…se puede decir, Sally, la chica si bien no había cambiado mucho de carácter en estos últimos dos años por lo menos ya se atrevía a dirigirnos un par de palabras de vez en cuando, al principio se mostro realmente en contra de la idea de juntarnos en casa para los ejercicios de la clase, poco a poco su timidez disminuyo y finalmente logramos o logre… debo aceptar, que se sentara con nosotros durante el almuerzo, nunca hacia preguntas sobre nuestro estricto régimen de alimentos, bueno…escaso básicamente, siempre alegábamos que desayunábamos en casa y nadie nos molestaba, además quien se atrevería a responderle a Emmett, todos le temían, el gran chico musculoso novio de la modelo, así le llamaban o eso pensaban la mayoría al menos, si supieran lo juguetón que podría ser y lo inofensivo aun como vampiro…bueno les daría un poco de risa, en fin, como decía, acerca de Sally, al principio los Cullen, mi familia, me preguntaba que cual era mi objetivo o el porqué de quererla cerca, no es que la quisiera cerca, el hecho era que había algo en la chica que me recordaba a mí misma, algo que me decía que protegiera de ella, y por lo visto si no la hubiéramos acogido en nuestro grupo “VIP”, o aparentemente de gente con la que nadie se metía, bueno, ella no estaría tan tranquila como ahora, sabía lo que los demás pensaban hacer con ella, los adolescentes y jóvenes adultos podían llegar a ser…muy crueles algunas veces.
— Sabes he pensado que tal vez este sea nuestro último año aquí en Juneau, a diferencia de otros años todos nos reconocen, Bella, sé que no lo haces a propósito pero todos te adoran, muchos… literalmente
— ¿Está usted celoso Sr Cullen?
— Un poco tal vez, pero…sabes lo que intento decir, aunque sería maravilloso dejar de escuchar los pensamientos de más de tres en la clase…
— Entiendo lo que dices, yo… yo no he hecho las cosas como debería, sé que me he precipitado en muchas decisiones, pero hasta ahora creí que no afectarían a la familia…si consideran que lo mejor sería alejarnos por unos años…bien, estoy lista— le dije sinceramente
— Hablaremos de esto cuando regresemos, por ahora no te preocupes, no eres tú, este lugar es…perfecto, pero así será siempre Bella, tendremos unos años solamente y tendremos que movernos, incluso desaparecer por temporadas esperando que aquellos que alguna vez conocimos ya estuvieran… bueno, muertos, lamento que tu vida sea tan complicada ahora…
— Amor… — le dije tomando su rostro con mis manos y obligándolo a ver mis ojos—mi vida no es ni la mitad de especial de lo que jamás imagine es… cientos, miles de veces más que eso… jamás cambiaria ni un instante de todo esto, ahora…¿nos vamos?—dije cambiando de tema, no quería hablar mas de eso, Edward sabia todo el sentido de mis palabras porque se lo había demostrado en estos años juntos, no era la chica de dieciocho años que solía ser…bueno al menos no mentalmente, mi vida, mis propósitos y mis satisfacciones habían cambiado desde el momento en que él coloco el anillo en mi dedo, desde que nos habíamos unido física y mentalmente…desde que Renesme era parte de nuestras vidas…
— Vamos…
Llegamos a la universidad minutos antes de lo previsto, habíamos quedado con Sally y el profesor Jensen para entregarles el trabajo final y poder escaparnos el fin de semana sin compromisos, claro que ninguno se negó, solo nos quedaba esperar a que se completara la cita…
— Yo me encargo, ahora regreso no tardaré, lo prometo— dije tomando los papeles y dándole un beso rápido a Edward, entonces me gire y vi a Renesme cruzada de brazos, con una expresión difícil de descifrar… ¿enojo quizá?— ¿Qué pasa?, no tardare lo prometo— le dije, pero ella no cambio su rostro, me era difícil ver sus pensamientos, era como observar una red tan compleja que incluso con mi nivel no podía desentrañar, la comunicación tradicional nos venía mejor— ¿Quieres venir conmigo?— le pregunté y ella asintió finalmente sonriendo, solo en un par de ocasiones habíamos tenido que traerla a las instalaciones, siempre con su sed de conocer más del mundo por lo que le encanto simplemente todo acerca del lugar a donde íbamos todas las mañanas, le encantaba ver a todas esas personas tan diferentes entre sí, la entendía, era una niña muy querida…pero no conocía a muchas personas de su edad, de hecho solo convivía con nosotros…
— Bella…
— Edward…se los riesgos de llevarla, se que llamara la atención, pero…prometo que es el último año aquí, solo no quiero negarle algo como esto, de verdad lo desea…— le dije mentalmente, el asintió sonriendo
— Entonces ayudare quedándome aquí, no tarden— dijo el lanzando un beso hacia Nessie, ella sonrió y yo la tome en mis brazos mientras cerraba la puerta
Ella me pidió que la dejara caminar, quería sentirse un poco mas…independiente frente a los demás, me hizo sonreír su actitud, la tome de la mano y juntas entramos por la puerta principal, podía sentir las miradas de todos en nuestra dirección, yo caminaba feliz con mi pequeña a mi lado y me percataba orgullosa de que todos la adoraban con solo verla, mas allá de su poder era…simplemente encantadora.
— ¿Todo bien allá abajo?—pregunte cuando habíamos recorrido la mitad del campus, el que mi hija fuera especial no la hacía mucho más resistente que una humana de su edad, ella sonrió pero abrió sus brazos hacia mí, la tome y ella se recargo en mi hombro, finalmente llegamos al aula donde nos esperaban mi compañera y el profesor
— ¡Bella! — dijo el profesor entusiasmado se acerco a mi hombro y cayo rendido ante el encanto de Renesme
— Solo vengo para entregarles esto, Edward ha agregado su parte y solo falta afinar algunos detalles, si necesitas ayuda sabes dónde encontrarnos Sally
— Supongo que todo irá bien, ¿regresan pronto no es cierto?— dijo ella algo nerviosa
— No más de tres días, tranquila nos irá bien, por eso he llamado al profesor, ¿la ayudara no es cierto Sr Jensen?— le dije mientras me giraba hacia él compuso la cara inmediatamente y avergonzado se giro hacia nosotras, estaba jugando con Renesme
— Oh Claro Bella, la señorita…
— Stevens, Sally Stevens— le recordó ella algo irritada, y como no estarlo, más de un año en su clase y no recordaba su nombre, cuando podía claramente recordar el de Renesme…
— Oh Si Señorita Stevens, estaré aquí si me necesita, Bella ¿Necesitaran algún permiso de prorroga? Saben que pueden pedir lo que sea, estudiantes como ustedes se merecen una salida de vez en cuando
— Oh no Sr Jensen, todo irá bien, es algo…familiar sabe, pero procuraremos regresar a mas tardar el lunes
— Muy bien, no esperaba menos, bien señora Cullen, Renesme...y ¿Stevens cierto?— dijo él acercándose a la puerta, Sally bufo asintiendo — me retiro, tengo otros proyectos en mente, no dude en contactarse conmigo— le recordó mientras salía de la puerta
— No lo tomes a mal, el viejo apenas recuerda su nombre— le dije a la chica una vez que solo quedamos las tres en el aula, Renesme jugaba con mi cabello
— Lo sé… solo me gustaría que la gente recordara si quiera mi nombre, que supiera quién soy, algún día yo…— dijo ella perdiendo la mirada en el futuro, sea cuales fueran sus pensamientos, nunca lo sabría, parecía como si supiera mi habilidad de leer su mente y siempre me distraía del pensamiento principal, alguna vez quise preguntarle directamente pero pensé que sería muy arriesgado
— Nosotros no te olvidaremos Sally— y eso…era verdad, tal vez no porque impactara en mi vida, si no que para nosotros era imposible olvidar…lo bueno es que ella no lo sabía— cuando los demás se den cuenta de la chica que tienen frente a ellos se darán cuenta de lo que se están perdiendo— la anime sonriendo, ella me observaba profundamente hasta que sus mejillas se encendieron y después sonrojada bajo la mirada
— Lo se... gracias Isabella— dijo ella
— Bien— dije bajando de la mesa, Renesme ya casi dormida en mis brazos— creo que será mejor que nos marchemos, cuídate ¿quieres?— le dije antes de salir por la puerta
— Regresen pronto…por favor— escuche
…
El viaje continuó, salimos y en menos de doce horas habíamos cruzado la mitad del país, estábamos a algunas horas de alcanzar nuestro destino, Renesme había quedado prácticamente inconsciente desde que habíamos subido al auto, la mano de Edward siempre sujetando la mía
— ¿Jacob no ha mencionado algo acerca de nuevos…visitantes?– pregunto Edward rompiendo el silencio y en un tono bajo para no molestar a Nessie
— ¿Por qué, sabes algo…?
— No, no es eso, es que…las cosas han estado algo…calmadas estos años, pero no entiendo cómo es posible que Jacob no haya dejado de entrar en fase, y como es que Leah al momento de tener al niño…ella haya regresado a su condición metamorfa…es intrigante ¿no lo crees?— preguntó él con la mirada clavada en el camino, la verdad era que todos nos preguntábamos lo mismo, creímos que la condición de Leah duraría por siempre, el hecho de no transformarse y seguir creciendo…envejeciendo, pero eso no fue lo que pasó, apenas a unos días de dar a luz al pequeño Ethan, en plena mañana ella sintió como el temblor de la transformación regresaba, Jacob me llamo inmediatamente esperando que Carlisle supiera algo, cuando nos enteramos que no faltaron más que unas horas para saber que Leah se había transformado y seguía en la manada, hasta ahora era un misterio, no había presencia de vampiros en Forks, ni en la reserva… ¿entonces que provocaba ese estancamiento?
— No entiendo cómo, pero te seré sincera, me alegra saber que los tendré por mas años junto a nosotros, la idea de ver a Jake envejecer y…bueno alcanzar su destino no es exactamente una idea que espero con ansias, si fuese por mi…tendría a todos para siempre a nuestro lado
— Bella…
— Si, lo entiendo, sé que no es posible, pero…es más sencillo así, me duele pensar en lo que haremos en tres días…— le dije recargándome en su hombro, nuestra fecha límite con Charlie había llegado a su fin…estas serian mis últimas horas a su lado, lo habíamos discutido mientras viajábamos, quedarnos en Juneau unos meses mas no seria inteligente…
— Sé que será difícil pero es lo mejor Bella, nos hemos distanciado lo suficiente para que no sea tan repentino para él , también lo extrañaré Bella, es un buen ser humano tu padre, se que le dolerá, especialmente Renesme, tal vez deberíamos cambiar la estrategia, lo del accidente es…
— Es nuestra única opción, lo acepto— le dije — tiene que ser definitivo, si no es así me temo que no podre hacerlo— respondí el solo asintió y continuó manejando , la nieve caía copiosamente mientras las luces de los demás automóviles iban disminuyendo y difuminándose con el tiempo, la gente prefería detenerse con el mal tiempo que azotaba la región, nosotros apenas y disminuimos un poco la velocidad, con la vista y los reflejos de Edward al volante no era necesario tomar tantas precauciones
…
— ¿Falta mucho mami?— escuche a Renesme mientras se tallaba los ojos con sus manos, su boca formaba una O mientras bostezaba
— Justo a tiempo, en menos de quince minutos estaremos con el abuelo – le respondí
— ¿Has dormido bien princesa?— preguntó Edward, ella se soltó de la silla y con agilidad se recargó entre los asientos de adelante, acomodó su cabeza en el hombro de Edward mientras su mano estaba en mi hombro, era tan adorable ver su pequeño y perfecto rostro cuando brindaba una sonrisa que hacía que cualquier cosa valiera la pena
— Mucho— respondió ella sonriendo, señalo con su mano hacia afuera— ¿es día o noche?— preguntó, me percate del mal tiempo, no solo era malo, el clima parecía sacado de algún libro de terror, gruesas y oscuras nubes cubrían el cielo, tanto que incluso pareciera como si en cualquier minuto fuese a oscurecer, me gire al reloj del auto y me percate que eran apenas las once de la mañana
— Es temprano, nos quedaremos con el abuelo toda la tarde, creo que no habrá flores en el claro Renesme— le dije suspirando, llegamos y como siempre Charlie saludo tan efusivamente a Renesme que prácticamente olvido que íbamos nosotros también, su bigote ya se manchaba con algunas motas grises, pero se veía muy fuerte…esperaba que continuara así después de la noticia que le daríamos en unos días, o más bien que Carlisle le diría
— Adelante adelante chicos!, no se queden ahí, se congelarán, ¡Dios Renesme estas enorme!— grito mi padre, Edward tomo las maletas del coche y en menos de un segundo ya estaban en la habitación, claro con lo atento que estaba con Nessie mi padre ni se entero, pasamos a la sala donde tenía una gran caja con regalos para mi hija, ella encantada veía todo lo que el abuelo Charlie tenía preparado esta vez solo para ella, sentí los brazos de Edward cerrarse alrededor de mi cintura
— ¿Cómo esta Leah y el bebe? — pregunté , la última vez que lo había visto era una pequeña copia, una miniatura de Jake pero con los ojos de Leah
— Jake ha estado llamando desde las siete viendo si han llegado o no, ¿pueden creerlo? ¡Se despierta temprano!, definitivamente ha cambiado el muchacho, se ven felices ¿sabes?, el chico, Ethan cada vez me recuerda más a Jake, no deja de andar de un lado para el otro, gatea como si quisiera correr, sin duda será muy fuerte—dijo Charlie mientras le pasaba una pequeña muñeca a Renesme que sonreía— y tu Nessie, ¿no quieres ver a Ethan?, el chico no deja de sonreir cuando ve tus fotos pequeña— añadió Charlie
— ¡Puaj!, no Ethan es aburrido— fue todo lo que dijo Renesme continuando con su juego, era bastante precisa con sus palabras, aunque podía recitar sin problemas ella prefería hablar…bueno, poco pero conciso
— Renesme…
— Es aburriiiiido, y no sabe jugar, el abuelo es más divertido— dijo ella y Charlie sonrió despeinándole los cabellos un poco
— Iremos esta tarde
— ¿podemos ir al claro después?— preguntó ella
— Con este frio ni se les ocurra, ahora vamos, he preparado algo de…bueno en realidad ha sido Sue, tengo que confesarlo, esta con Leah, pero nunca me deja mal cuidado— dijo el sonriendo, después de que regresaron hace dos años, finalmente habían decidido darse una oportunidad y vivir juntos…había funcionado, no había visto a Charlie tan feliz desde hace algunos años me alegraba que por lo menos cuando yo ya no estuviera él no se quedaría solo
— Hemos almorzado algo en el camino pero Renesme estará encantada de comer algo— dijo Edward
Las horas pasaron y en esos momentos aprovechamos para tratar de poner al corriente a Charlie de nuestra vida en Juneau, aunque mi padre solía ser un hombre de pocas palabras al parecer estas reuniones lo transformaban por minutos y no paraba de contarnos cualquier detalle que creyera esencial…casi todo, nosotros escuchamos tranquilos, hasta que el reloj marco las cinco de la tarde, me asome por la ventana y vi el cielo un poco más claro, la nieve ceso un momento y creí oportuno adelantar nuestra reunión; Charlie no se opuso, subimos al auto y el desde la ventana nos lanzo una mirada de esas de padre que dicen “vayan con cuidado”, justo esa mirada, llegamos unos minutos más tarde a la reserva, Renesme aun renuente en visitar al pequeño
…
Después de unos minutos cuando finalmente llegamos, un sonriente Jacob nos esperaba en el marco de la puerta, sus blancos dientes resplandecían haciendo un contraste con su piel oscura, en cuanto nos vio se lanzó hacia nosotros, en ese momento me percate de cuanto extrañaba esa sonrisa, aunque en mis recuerdos era lo suficientemente vivida y real, en comparación con lo que veía ahora esa imagen era totalmente opaca, salí del auto antes de que Edward frenara completamente, Jacob me abrazo y me levanto del suelo
— ¡Bella!, lograron venir— dijo él emocionado, Edward bajo del coche unos segundos después y Renesme estaba en sus brazos, aun con su cara de disgusto
— ¿Que hay Jacob?— pregunto Edward, Jacob asintió levemente pero sin bajar la sonrisa ni un segundo, entonces me bajo del suelo y corrió hacia Renesme
— Nessie, ¿eres tú?— preguntó él— Bella creo que ha habido un error, ¿Donde has dejado a Nessie?, aquí solo veo a una hermosa señorita— me pregunto sonriendo, Renesme sonrió también y finalmente abrazo a Jacob
— Soy yo tío Jake, soy Nessie
— ¡Oh…Es verdad!, que tonto soy pero si es mi sobrina favorita, que tonto soy— dijo el actuando y la cargo en sus brazos— vamos adentro no quiero que te resfríes…— dijo el entrando a la casa invitándonos a seguirlo, sentí la mano de Edward cerrarse alrededor de la mía, me gire sonriendo y el la levanto y besó
— Primero las damas— dijo el ofreciéndome el frente, apenas había dado un paso cuando sus brazos estaban rodeando mi cintura
— Lamento no haber podido esperarlos con Charlie, pero no quería dejarlos solos, con este clima no quiero arriesgarme— dijo él — Leah, cariño están aquí— dijo él mientras entrabamos, bajó a Renesme con cuidado y le entrego una pequeña bolsa a Renesme con un regalo de cumpleaños retrasado, ella sonrió y corrió hacia la pequeña sala
— ¿Cómo esta todo Jake?— pregunté
— Perfecto Bella, no podrías creer lo mucho que Ethan ha crecido, me pregunto en ocasiones si nuestros genes…lobunos, no tienen un papel aquí— dijo sonriendo y comenzó a platicarnos de las travesuras del pequeño, una sensación cálida invadió mi pecho, el verlo tan orgulloso de esa pequeña personita que claramente ahora era su mundo me hizo recordarme a mi misma platicándole sobre Renesme poco tiempo atrás, cuando estábamos a mitad de la conversación Renesme apareció con una pulserita, una miniatura a la que yo misma tenía que Jake me había regalado, la lucio frente a nosotros y por su ancha sonrisa percibí que le encantaba
— No tenías que hacerlo Jake, gracias— le dije, Edward asintió mientras mecía a Renesme que se recargaba en sus brazos
— Vale no es problema, quería que tuviera algo que le recordara a nosotros, en realidad no soy yo esta vez, ¿puedes verlo?— dijo señalando el pequeño lobo de madera en la pulsera— es Ethan, bueno….una combinación de Leah y mía, claro que no es un lobo pero si lo fuera…creo que sería así— dijo el orgulloso
— Hablando del pequeño diablillo— dije mientras Leah bajaba por las escaleras con el pequeño en sus brazos…Jake tenía razón el niño aparentaba bien los dos años, su piel al igual que Jacob era cobriza pero brillante, su cabeza se asomaba entre las mantas y podría jurar que sonreía igual que Jacob, por suerte había adquirido el ondulado cabello de su madre, no muy notorio pero no era el cabello rebelde que Jake acostumbraba tener, y también los ojos, eran totalmente de Leah, sus facciones eran delicadas y a la vez definidas, podrías decir que era hijo de Jake con solo verlo, Leah sonreía mientras bajaba con cuidado y finalmente cuando llegó el niño abrió los brazos hacia Jake
— Siempre hace lo mismo…comienzo a sentirme celosa— dijo Leah sonriendo mientras pasaba a Ethan a Jake — Me alegra que hayan podido estar aquí, los esperábamos— dijo ella
— El placer es nuestro, el pequeño se ve muy… saludable— dijo Edward sonriendo, era algo…bizarro, si nos viéramos cuatro años atrás en esta situación creeríamos que el que lo pensara estaría loco de remate, por lo mínimo, lobos y vampiros reunidos amenamente mientras hacían cumplidos de sus pequeños…ver para creer, el simple hecho me hizo sonreír mas
— Son adorables a esta edad— dije sonriendo y levantando mis manos hacia el pequeño, el siguió mis dedos con la vista y sonreía como si fuese una broma, entonces sus ojos se perdieron en dirección a Renesme— Nessie ¿porque no saludas a Ethan, cariño?— le dije, ella hizo un ligero puchero pero me impresiono su comportamiento, bajo lentamente de las piernas de Edward y se acercó al pequeño
— Ya no es tan aburrido…sonríe, ¿puedo jugar con él?— dijo ella sonriendo
— No Renesme, es muy pequeño aun, pero créeme que estará encantado de jugar contigo en unos años
— Entonces…es aburrido aun— dijo ella y salió hacia la recepción en busca de su pequeña mochila, le encantaba cargar consigo algunos de sus juguetes, entonces regresó rápidamente con un oso de peluche que Edward le había regalado y lo levanto en dirección a Ethan, todos la vimos algo extrañados— para que sea más divertido— dijo ella entregándole el pequeño oso al bebe que lo tomo y lo estrujo dejándolo caer mientras sonreía, me gire rápido hacia Renesme, ella no entendía el comportamiento del pequeño y temía que esa acción que era obviamente un juego del pequeño la lastimase — no lo quiere…no me quiere— dijo ella y se escondió en mi regazo, yo acaricie su cabello
— No linda, no es eso, el te quiere, solo quería jugar contigo, ¿Ves como le gusta?— dijo Jake dándole el juguete al niño, Ethan como si entendiera lo tomo y juraría que lo abrazo, Renesme aun con unas lagrimas en su rostro pareció asimilarlo y dejo de llorar, pero…no se veía completamente convencida…
...
La fiesta de Ethan fue al otro día temprano en la mañana, todo salió de maravilla para ellos, incluso Renesme pareció abrirse un poco mas con el pequeño, incluso me pidió que le leyera una de las historias que le contaba para dormir, Charlie no dejaba de divertirse como niño con los dos pequeños, los cargaba de un lado a otro hasta que la espalda comenzó a molestarle, me sentía terrible al saber que sería la última vez que vería a Renesme, pero a largo plazo…eso era lo mejor que podía ofrecerle, un corte de tajo después de vernos, esperaba que Jacob pudiera ayudar en su duelo. Cuando nos despedimos sentí como si gruesas lagrimas fantasmas recorrieran mi rostro, ni siquiera mis rápidos reflejos y mis renovados y poderosos músculos dejaban el abrazo que me mantenía unida aun a mi padre, fue como si el también presintiera que nuestro tiempo juntos había llegado a su fin, besé su frente y le repetí lo mucho que lo queríamos a él y a Reneé, de mi madre…no tendría la misma suerte de despedirme, pero creí que para ella sería un poco menos…doloroso, nuestra separación en estos años la había…nos había preparado para este momento, dolería claro pero…sobreviviríamos.
Cuando subimos al coche y finalmente nos giramos hacia atrás por el retrovisor vi las lágrimas que mi padre dejaba escapar, quise bajar del auto y abrazarlo por última vez pero…no lo hice
— No veré mas al abuelo, ¿no es cierto?— pregunto Renesme, aunque le habíamos ocultado el plan, ella era muy perceptiva, se giro sobre el asiento y le mando un beso con su mano, entonces me sorprendió una vez más su madurez— es lo mejor para él verdad, ¿estará bien?— preguntó ella
— Estará bien, solo que no lo veremos en mucho tiempo— le dije, no quise decirle toda la verdad…ya lideraría con eso después, ella asintió y se acomodó en su asiento obedientemente abrochando su cinturón de seguridad
— ¿Es lo mejor…?— preguntó Edward
— Es lo mejor— le dije y no dimos vuelta atrás continuamos nuestro camino
…
Pasaron cuatro meses después de nuestra visita, nuestra “muerte” o desaparición estaba programada en una semana, justo después de terminar el curso escolar, lo más difícil fue despedirme de la chica que de cierta manera había aprendido a cuidar de ella, sabia la reacción que tendría al enterarse de nuestra “muerte” y la vida que le seguiría en la universidad sin sus protectores a lado, lo había visto en una visión un tanto subjetiva pero a grandes rasgos las cosas no pintarían bien para ella, deje una nota en su libreta de apuntes, justo a un margen esperando que algún día cuando ya no estuviéramos ahí la leyera… “Eres una gran persona Sally, no dejes que nadie diga lo contrario” le había escrito esperando que tuviera algo de repercusión en su futuro…
Tal como lo planeamos, en menos de tres días nuestra historia de cuatro años en Juneau desapareció, la historia fue “Trágico accidente termina con familia de jóvenes prometedores” preparamos todo lo necesario, el coche que tanto adoraba Edward se prendió en llamas mientras gente nos vio abordarlo, antes de que pudiera explotar salimos del coche ilesos, pero la gente no se percato de ese pequeño detalle, los restos para ellos quedaron…irreconocibles, la noticia se esparció como dinamita, en menos de una hora mi padre se había enterado de la noticia, tomo el primer vuelo de avión y Reneé hizo lo mismo, ni siquiera tuve el valor para verlos a lo lejos, mientras nuestro “funeral” era desarrollado en la casa de los Cullen en Juneau nosotros viajábamos a Copenhague, donde nuestra nueva vida comenzaría otra vez de cero…
— ¿Isabella C.S?— Le dije a Edward observando mi nuevo pasaporte
— Créeme no es necesario cambiar todo, nadie te buscara a donde vamos, nadie hará preguntas, ¿sabías que existen cientos de Isabellas en el mundo?, creo que incluso hay una Isabella Cullen por ahí, la gente no presta atención a esos detalles— dijo Edward besando mi frente tratando de tranquilizarme, sabía que el hecho de que no hubiera lagrimas no significaba que no me doliera lo que pasaba, el me conocía más que nadie en el mundo y estaba ahí para darme su cariño
— Al menos no será tan difícil para ella, comenzara desde cero y cuando comience a mezclarse con la gente se que todos la querrán — le dije señalando a Renesme que dormía plácidamente en mis brazos, me encargaría de darle una vida normal a donde fuéramos al menos toda la infancia que le quedaba
— La adoraran… — señaló Edward acomodando uno de los rizos de Renesme detrás de su oreja
Fin del Interlude
Continuara...
¿Que les parecio esta pequeña historia?, son solo 3 capitulos pero En el siguiente ya comienza La continuacion en sí, algunos años despues, ¿que sorpresas les esperan a Los Cullen, Que desicion tomara Nessie una vez que alcance su adolescencia...seguira humana o alcanzara la inmortalidad?, ¿Que le depara el futuro a Bella?, ya veremos como se responden estas preguntas.
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