Cuando pueda verla, ¿seguirá deseándola?
El multimillonario Edward Cullen había perdido la vista al
rescatar a una niña de un coche en llamas y la única
persona que lo trataba sin compasión alguna era la mujer
con la que había disfrutado de una noche de pasión. ¡Pero
se quedó embarazada!
Y eso provocó la única reacción que Isabella no esperaba:
una proposición de matrimonio. Él no se creía enamorado,
pero Bella sabía que ella sí lo estaba. Y cuando Edward
recuperó la vista, Bella pensó que cambiaría a su diminuta y
pelirroja esposa por una de las altas e impresionantes
rubias con las que solía salir.