Por fin había llegado el momento de la verdad, el día del baile, donde tenía que darlo todo, no podía dejarme nada en el tintero si quería conseguir a Bella.

Para ello había contado con la mejor ayudante que puedas encontrar en tu vida, Alice Cullen, mi hermana y con la cual estaba más que agradecido por toda la ayuda que había recibido de su parte durante estos días.

Ella me había ayudado en el mismo momento en que pronuncie el nombre de su mejor amiga y habíamos trazado una especie de plan para la noche del baile, donde según Alice todo saldría perfecto. Ella era la organizadora y podía fiarme de ella para todos estos temas.

Después de todo si mi hermana decía que todo saldría bien, es por que todo saldría bien y yo no tenía que preocuparme por nada.

¿Por qué debería de preocuparme?

Ella era su mejor amiga y la conocía mucho más que yo o eso creía ella, por que yo sabia que si que debía de preocuparme, no estaba totalmente seguro de si Bella me aceptaría y estaría conforme con escucharme de nuevo. La ultima vez que lo intente no me salio muy bien…

En las semanas en las que habíamos estado dando clases la había llegado a conocer más que a mi mismo, mucho mas de lo que conocía a Tanya en estos dos años de relación. Sabía que cuando Bella se mordía el labio inferior era por que estaba nerviosa por algo, cuando se acariciaba el pelo algo le preocupaba…Miles de detalles que me había percatado que ella repetía diariamente, que había aprendido a leer.

Para mi Bella era algunas veces como un libro abierto, aunque en muchas ocasiones un libro muy difícil de leer.

Aquel día en la playa, cuando le había confesado por primera vez que me había enamorado de ella, aunque me dolió, tenía razón en todo lo que me dijo.

¿Cómo podía jurarle amor si a unos metros estaba Tanya?

Pero ahora todo era diferente, ya no estaba con la bruja de mi ex y estaba libre como una perdiz para ser completamente suyo… si ella quería claro.

Estaba impaciente por que Alice me mandase el mensaje que habíamos acordado para hacer acto de presencia en el pabellón. Realmente no se a que tenia que esperar para poder entrar y soltarlo todo, pero según ella eso seria algo muy apresurado y no saldría bien. Bella se asustaría, se encerraría en ella de nuevo y me rechazaría sin piedad alguna.

Eso quieras que no acojonaba un poco. Lo último que quería con todo esto era eso…

Deje mi mente vagar sobre Bella y lo preciosa que estaría esta noche con aquel vestido azul que había comprado para ella.

Las chicas me habían ayudado un poco en la elección y en la talla, puesto que yo no tengo ni idea de esas cosas. Habíamos elegido un vestido realmente precioso de color azul, en palabra de honor según estuvieron explicándome las chicas, con volantes. Para mi era el mejor vestido para ella y tenia la certeza de que le quedaría perfecto.

Quedamos en que el vestido lo habían comprado ellas, yo no había tenido nada que ver en la elección y muchos menos había ido con ellas a comprarlo. Según Alice, y yo sabia que tenia toda la razón, era lo mejor por que si Bella se enteraba que ese vestido lo había comprado yo para ella, se negaría en rotundo a ponérselo para el baile.

No sabia de que artimañas se habían servido las chicas para convencer a Bella de que asistiera al baile. Me daba un pelín de pena, las chicas podían llegar a ser unas manipuladoras sin sentimiento alguno cuando querían algo y hasta que no lo conseguían no paraban. Lo había experimentado en más de una ocasión en mis propias carnes.

El sonido de mi móvil me saco de mi ensoñación.

El pájaro esta en el nido,

Repito, el pájaro está en el nido.

A.

Rodé los ojos por la tontería de mensaje que mi querida e imaginativa hermana me había envidado para hacerme ver que ya era hora de que entrase.

Baje del coche, no sin antes mirarme de arriba abajo y comprobar que todo esta bien colocado y que iba según el criterio de Alice, perfecto.

Me pare en la puerta del pabellón y armándome de valor entre con los nervios a flor de piel.

Estaba muy pero que muy nervioso, esta noche le diría a Bella todo lo que pasaba por mi cabeza y si no me aceptaba hoy… dudaba que lo hiciese alguna vez en su vida.

Abrí las puertas y la música estridente inundo mis oídos.

Comencé a buscar en la multitud a mis hermanos y sobre todo a aquella castaña que me robaba el sueño.

Por el camino pude ver a varias personas con las que compartía clase como Mike bailando con Jessica la mar de contento; Ben y Ángela, una pareja bastante agradable y de las mejores personas que había en el instituto de Forks junto con mi familia y por supuesto Bella; y como no Victoria y James. Cuando pase por el lado de estos, Victoria me miro de arriba abajo con una mirada que pensé, si las miradas matasen ahora mismo estaría más que muerto.

Por fin pude ver a mi pequeña hermana a lo lejos haciéndome una serie de gestos que nadie podría interpretar en su sano juicio. La mire con cara de interrogación y sin disimulo ninguno apunto a una dirección, que obviamente seguí con la mirada.

Allí estaba Bella, tan guapa y radiante como me había imaginado, con el vestido que le había regalado. No me equivocaba nada al decir que le quedaría como anillo al dedo. Me quede sin palabras hasta que vi la persona que estaba a su lado, Eric. Otro pesado de turno, al igual que su gran amigo Mike, que no paraba de molestarla sin parar según me había contado alguna que otra vez Alice. La había invitado a salir unas cien veces y había estado pidiéndole que lo acompañase al baile casi todo el mes. Ella había rechazado todas y cada una de sus peticiones de forma muy educada, algo que a decir verdad me encantaba.

Me quede mirándola más tiempo del debido, puesto que estaba más que preciosa con aquel vestido, ese peinado y toda ella irradiaba un aura que me dejaba ko.

Decidido avance entre mis compañeros hasta donde se encontraba ella con el pesado de Eric para arrebatársela y finalizar este drama de una vez por todas.

Cuando me encontraba a menos de diez pasos de ella, giro la cabeza con gesto cansado en mi dirección y se percato de que me dirigía hacia ella. Nuestras miradas se quedaron enganchadas, hasta que una voz se escucho desde el escenario.

-Buenas noches chicos-dijo el director Crimes subido en aquella especie de tarima que habían montado en un lateral del pabellón-Veo que todos vais muy guapos para el baile de primavera. Os preguntareis que hago aquí subido estropeando la fiesta, pero es por una buena causa-sonrió-muchos sabréis por que estoy aquí subido, sobre todos las chicas-se oyeron risas femeninas entre el publico-En este instante… ¡Voy a anunciar el rey y la reina del baile de primavera 2010!

Aplausos y vitores se escucharon y volví a mirar hacia donde se encontraba Bella, que para mi sorpresa ya no estaba allí. Comencé a mirar a todos lados para ver si la veía y la divise hablando o más bien discutiendo con mi hermana y Rosalie.

-En primer lugar anunciaremos al rey del baile-dijo el director cogiendo un sobre que un alumno le entregaba con una gran sonrisa.

Hice caso omiso al director y volví a encaminarme hacia donde se encontraba Bella, para hablar con ella de una maldita vez. Era más escurridiza de lo que me imaginaba.

-El rey de primavera 2010 es… ¡Edward Cullen!-grito el director y me pare de sopetón por el impacto de la noticia. ¿Yo rey del baile? Debía de ser una broma-Vamos Edward, sube al escenario campeón-volvió a decir alegremente el director y no me quedo otra que obedecer, puesto que todos mis compañeros habían comenzado a empujarme hacia el escenario, sin hacer caso de mis quejas-Parece que es un chico tímido-dijo el director contento una vez que estuve a su lado-Aquí tienes tu corona muchacho.

-No…-intente explicarme. Busque a Bella y a mis hermanos con la mirada y vi que estaban muy sorprendidos, todos menos Alice que tenia una gran sonrisa pintada en la cara. Esperaba por su bien que esto no fuese idea suya, no me había dicho nada de esto por lo que no entraba en nuestro plan. La mataría lentamente…

-No pasa nada Edward, has sido el elegido y es normal que tengas un poco de vergüenza al estar aquí subido con todo el instituto mirándote-dijo dándome unas palmadas en las espalda. Iba a protestar de nuevo y a anunciar que yo no quería estar aquí subido y mucho menos ser el rey del baile, yo lo único que quería era hablar con Bella de una vez y quitarme este nudo que se había instalado en mi estomago desde hace unos días-Ahora anunciare a la reina. Preparaos chicas-bromeo cogiendo otro sobre que le ofrecía el mismo chico que le entrego el mío. Maldito chico-La reina del baile de primavera 2010 es… ¡Tanya Denali!-dijo el y todos los alumnos comenzaros a aplaudir como lo habían echo conmigo.

¿Tanya que…?

Esto no podía ser verdad. Había pensado que algo podría salir mal esta noche, claro que podría pasar, pero esto… esto era inimaginable para mí, era lo peor que podía suceder hoy.

Mire desesperado a Bella mientras mi ex subía al escenario con una gran sonrisa y ahogada en llanto. La mirada de Bella pasaba de Tanya a mí y se notaba un tanto sorprendida por la noticia de ser los reyes del baile. A mi hermana se le había borrado la sonrisa de la cara y note que esto no lo tenia planeado para nada, por lo menos no tendría que matarla…

-Eddy mi amor-dijo Tanya sacándome de mi ensañamiento y plantándome un beso en los labios-Somos reyes del baile, lo que siempre hemos querido cariño.

-¿Perdona?-le dije separándola de mi cuerpo-¿Amor? ¿Cariño? ¿Tanya se te ha olvidado que tu y yo ya…?

-Ni se te ocurra decirlo Edward, no me arruines del momento-me susurro entre dientes cabreada.

-De eso nada. Tu y yo ya no somos novios, no somos nada para que me llames de esa forma y yo no quiero ni he querido nunca en mi vida ser rey del baile, eso es cosa tuya que eres la mujer mas superficial que he conocido en toda mi vida-le dije bien alto para que todos, sobre todo Bella, me escuchasen-Muchas gracias a todos por haberme elegido como rey del baile, de verdad que muchas gracias. Pero yo no quiero ser rey con esta reina-señale a Tanya que tenia la boca abierta-entre Tanya Delani y yo ya no hay nada, absolutamente nada, puesto que ella ha estado engañándome estos meses con alguien y yo pues… simplemente me he enamorado de otra persona-solté sin pensar-Por lo que quería pedir una cosa, acepto seguir siendo rey del baile si me concede el honor Isabella Swan de ser mi reina-dije quitándole la corona de la cabeza a Tanya y bajando de un salto del escenario hacia donde se encontraba la aludida que se encontraba estupefacta-¿Qué dices Bella, quieres ser mi reina del baile?