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A mi prima se le iluminó la cara, parecía que había visto un cometa. - Esto tiene solución para ambas!!! - No te sigo – no conseguía ver dónde estaba la solución a mi problema, seguía teniendo un problema, me tenía que casar. - No lo entiendes Bella? Lo único que tenemos que hacer es hablar con nuestros padres, tú te casas con Edward y yo con Jasper. Definitivamente mi prima se había vuelto loca, no había otra explicación, pobrecita, la tendríamos que internar en un psiquiátrico y darle medicación el resto de su vida. - No lo ves Bella! Es el destino, tu y Edward y yo y Jasper!!!! - Alto, alto, alto! Yo y Edward? Te has vuelto loca? - Vamos Bella! Qué crees que no me di cuenta de cómo se miraban en el bar? - Eeee….yo no …. - Tu no que Bella? Te lo comías con la mirada! - NO! Eso no es cierto! Yo solo lo miraba por curiosidad, por lo que me explicó Rosalie de que podía leer las mentes, y porque Edward me pone nerviosa. - Aha! Lo ves! Te gusta! - No dije que me pone nerviosa! - Es lo mismo! Te pone nerviosa porque te gusta! Y por eso de leer la mente ya ni te preocupes, no puede leer la tuya! - Como? Que dijiste? - Que Edward no puede leerte la mente! Por eso te miraba con el ceño fruncido esta noche, estaba intrigado por saber porque podía leer las mentes de todas las personas que habían allí excepto la tuya, no dejaba de mirarte y maldecir en voz baja. Estaba pendiente de tu conversación con Jasper a través de la mente de él! - Pp..pp..pero…él no puede leerme la mente? Por eso me miraba enfadado? - Ai! Bella, nunca había visto a Edward mirar a nadie del modo en que lo hacía anoche contigo, te aseguro que no es simple curiosidad. No podía creerlo, Edward no podía leerme la mente! Eso quiere decir que no sabe nada de mis sentimientos. Sentimientos? Espera un momento Bella? Que sentimientos? Pero que estás diciendo si lo acabas de conocer? Esto me pasa por dejarme enredar por Alice, incluso mis pensamientos se confunden! - Tenemos que hacer muchos planes, mañana necesito hablar con Edward y con Jasper!!!! Bien, ahora había pasado de tener un prometido con el que no me quería casar, a tener que romper el compromiso para prometerme con su hermano y el hasta el momento prometido de mi prima, el cual siempre me miraba con mala cara porque era una especie de bicho raro al que no podía leerme la mente. Perfecto!
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