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Capítulo 8: EL prodigio (parte III-final)
--- El lugar donde todo comenzó --- se quedó pensando Edward mientras miraba a su hija --- Mystic Falls, Virginia
Nessie asintió de acuerdo con él, recordaba ese lugar, como no hacerlo, fue el pueblo de sus innumerables travesuras y sacadas de quicio a las personas, donde su hermana se enamoró, donde el creyó estar enamorado. Donde encontró a sus dos primeros mejores amigos, donde conoció más sobre lo sobrenatural y sobre todo donde él Edward Mansen descubrió lo que en verdad era la magia.
No se equivoquen, Edward nació en Chicago y murió en Chicago, pero su infancia y adolescencia la vivió en aquel pueblo como uno de los fundadores, su padre fue una persona respetuosa y con un gran secreto, pero amaba a sus hijos sobre todo al par de terremotos de los mellizo.
--- ¿Con quién está? --- pregunto Edward mirando a su hija, la cual se mordía el labio dándole un parecido extraordinario a Bella, que no pasó desapercibido por Jacob, Alice y hasta la misma Bella.
--- Con mis tíos los Salvatore, ellos la cuidan, además de cuidar a Estefanía y a otras personas --- dijo ella mirándose las manos --- Los libros me los dio mi amiga Stephanie, pero son profecías viejas, profecías que mi tía ya había leído desde antes.
--- Ella sabe…
--- No debe saber que estamos aquí, porque si no ya hubiese venido, todo lo estamos haciendo a espaldas de todos, pero aun así Daniell sabe el futuro mejor que ni Alice.
--- ¿Cómo puede ser eso? --- pregunto Carlisle mirando a su hija que se sentía indignada por que hubiera una mejor vidente que ella --- creí que ese don era muy inusual.
--- Lo es en muggel --- dijo ella y se tapó la boca mirando a su padre el cual rodeo los ojos --- ¿ya te dije que te quiero mucho?
--- Boca floja cállate ya --- dijo Nahuel rodeando los ojos, esto iba a ser algo raro y loco como todo lo que rodeaba a Nessie y a Daniel.
Hablando de Daniel, una luz callo como ya estaban acostumbrados y aparecía otra figura, ya nadie se sorprendido porque desde inicio de este capítulo cosas, palabras y acciones raras habían perturbado la paz de leer unos simples libros. Enfrente de ellos estaba un chico de la edad de Nessie con el pelo negro, pálido y ojos de un color azul cielo muy hermosos, en su mano derecha tenía un gran libro viejo y en la derecha un palo largo y su mirada reflejaba enojo y odio.
--- OTRO IDIOTA --- grito Nahuel golpeándose la cabeza.
--- Nos vamos a casa --- dijo mirando a los cuatro niños --- Renesmeé, ¿Cómo se te ocurre cambiar las cosas?
--- Dime que Holly no te ayudo --- dijo ella parándose y asiéndole ojitos.
--- ¿Eso que tiene que ver? --- pregunto con su cara seria todavía mirando a una de sus mejores amigas.
--- Ahí idiota --- dijo Cary negando --- ¿Qué nadie lee los hechizos?
--- Los leí perfectamente, por eso estoy aquí.
--- La parte fácil no, sino de cómo tenemos que regresar, no podemos al menos que acabemos de leer los libros --- dijo Nessie mordiéndose el labio --- y resulta que no hemos podido ni terminar el tercer capítulo del primer libro.
--- ¡Te das cuenta de lo que hiciste no! ---- grito enfadado mirando a todo el mundo y a sus padres --- que puedes alterar las cosas, hasta un gran grado en no nacer, ¿Qué no te han enseñado nada en el colegio?, ¿Qué no puedes dejar de meterte en líos?, te pareces a James y eso que pensé era imposible encontrar a alguien más problemático, creí que te interesaba demasiado tu vida como para hacer cosas tan precipitadas como esta idiotez.
--- ¡No tienes por qué gritarme Daniel! --- grito ella parándose y encarándolo --- ¡SE LO QUE HICE, SE QUE NO PODRE VER A MIS PADRES HASTA TERMINAR ESTOS TONOTS LIBROS, QUE POSIBLEMENTE ME QUEDE ATRAPADA! --- se calmó y lo miro --- pero los tuyos no sufrieron lo mismo, quiero evitar que pasen cosas dolorosas e irreparables.
--- Nessie, no se puede cambiar lo ya escrito, solo asustarte de lo que va a pasar, por eso las profecías no son para cualquiera --- dijo poniendo su mano en su hombro --- eres mi amiga y aun cuando eres más grande que yo, siempre te cuidare, por eso vine, para evitar una tontería donde salgas más lastimada.
--- ¿Por eso no debiste haber traído al? --- iba a continuar Nahuel pero se cayó.
--- No, esta estresado, además tu padre dice que con uno en la misma habitación vasta, por eso me mando a mí --- dijo Daniel mirando a su amiga.
--- ¿Por qué no te presentas? --- pregunto Bella mirándolo con una sonrisa dulce --- para así terminar de leer e irnos a casa.
--- Bien mi nombre es Daniel Benjamín Cheney Webber --- dijo y los dos apellidados así se miraron unos a otros, Ben abrió la boca para decir algo, pero Daniel levanto la mano --- sí vengo del futuro, sí posiblemente sea tu hijo y sí no pienso decir nada acerque de lo que pasara, no soy Renesmeé.
--- ¡Deja de decir mi nombre completo! --- grito ella cursándose de brazos.
Aunque había muchas dudas sobre esa persona, sobre todo para Ángela y Ben decidieron seguir leyendo, sobre todo porque ya querían acabar con ese maldito capitulo. (NT: Yo también ya lo quiero acabar jejejeje)
Hablé con más severidad de la que pretendía.
—Me debes una explicación —le recordé.
—Te salvé la vida. No te debo nada.
Retrocedí ante el resentimiento de su tono.
--- Idiota, tarado, imbécil, grosero --- le gritaban las mujeres ya sea a gritos o en su mente.
--- Estaba nervioso y algo asustado por lo que hizo, cualquiera hubiese reaccionado así --- dijo Bella tomando su mano, él le sonrió pidiéndole una disculpa.
—Me lo prometiste.
—Bella, te diste un fuerte golpe en la cabeza, no sabes de qué hablas.
--- Oh, yo creo que ella si sabe de lo que habla --- dijo Paul mirándolo con una ceja levantada --- ¿no es más fácil decirle una explicación como un instante de adrenalina o algo por el estilo?
--- No sabía qué hacer, estaba presionado y no puedo leer la mente de ella ¿Qué arias en esas circunstancias? --- dijo Edward rodeando los ojos y Paul bajo la cabeza de acuerdo con él.
Los Cullen y los lobos se estaban dando cuenta que cada vez eran más participativos y más relajados, todo desde que esa niña apareció para ponerlo todo de cabeza.
Lo dijo de forma cortante. Me enfadé y le miré con gesto desafiante.
--- Oh, hazle algo, lo que sea, golpéalo, ahórcalo, pero hazle algo --- dijeron a la vez Jasper y Emmett y Edward empezó a reír al recordar.
--- Sí las miradas matase estarían todos bajo tres metros --- dijo él mirando a una niña de quince años.
Era la copia de él, pelo cobrizo, pálida y con dos grandes ojos esmeraldas, vestía un uniforme de colegio y traía el pelo suelto por toda la cara, lo veía con ojos furiosos, pues estaba molesta porque Slythering había ganado la copa y los de Griffyndor se lo merecían más.
--- Ya me vengare, ya sea golpeando a uno por uno.
--- Te cansarías demasiado --- dijo su hermano tomando un libro y leyéndolo.
--- Ahorcándolos con una soga gigante.
--- Va en contra del reglamento y seamos sinceros Daniell no tienes mente asesina --- dijo mirándola con ojos de cachorrito.
--- Les are algo, de eso estoy segura, o me dejo de llamar Daniell Mansen…
--- No te olvides de Elisabeth --- eso le gano una aventada de cojín a su hermano.
--- No te escucho proponiendo bromas --- dijo ella levantando una ceja.
--- Tal vez se me ocurrió una forma, tal vez no
--- Tal vez hizo algo tal vez no --- dijo Edward con el mismo tono que su recuerdo y riéndose por su similitud.
--- Creo que ya se volvió loco --- le murmuro Emmett a Jasper, el cual asintió de acuerdo con él y miro a Ben para que continuara.
—No me pasaba nada en la cabeza.
Me devolvió la mirada de desafío.
— ¿Qué quieres de mí, Bella?
—Quiero saber la verdad —dije—. Quiero saber por qué miento por ti.
--- De echo eso es razonablemente justo --- dijo Daniel mirando a Nahuel --- como aquella vez en la que me pediste…
--- Sí, sí, ya cállate --- dijo este pensando en la vez que Daniel mintió para ayudar a zafar de haberse olvidado del cumpleaños de su novia y eso que tiene mente vampírica.
--- Tienes razón Daniel, es justo y razonable, te di la explicación --- dijo Edward mirando a Bella a los ojos.
--- Tarde.
--- Pero te la di.
— ¿Qué crees que pasó? —preguntó bruscamente.
—Todo lo que sé —le contesté de forma atropellada— es que no estabas cerca de mí, en absoluto, y Tyler tampoco te vio, de modo que no me vengas con eso de que me he dado un golpe muy fuerte en la cabeza. La furgoneta iba a matarnos, pero no lo hizo. Tus manos dejaron abolladuras tanto en la carrocería de la furgoneta como en el coche marrón, pero has salido ileso. Y luego la sujetaste cuando me iba a aplastar las piernas...
Me di cuenta de que parecía una locura y fui incapaz de continuar. Sentí que los ojos se me llenaban de lágrimas
--- Apuesto veinte a que es de rabia y no de tristeza --- dijo Jasper y Emmett asintió de acuerdo con la apuesta.
--- Esta mal que la hagas llorar, aunque sea de rabia --- dijo Esme mirando a su hijo y este asintió de acuerdo con ella.
--- Lo siento amor.
--- No lo tengo presente.
De pura rabia
--- Ja --- dijo Jasper recibiendo el pago a escondidas, todo tras bambalinas para que no se diera cuenta Esme.
--- Tío querido, ¿ya te dije que eres el mejor del mundo? --- dijo Nessie mirando a su tío Jasper que se sorprendió por las palabras se paró y lo abrazo, para en el oído susurrarle --- quiero el diez por ciento de todo lo que apuestes, o mi abuela Esme se enterara ¿de acuerdo?
--- Tan adorable como tu padre --- murmuro este abrazándola, era uno de los pocos que ya se habían hecho a la idea quien era en realidad esa niña, la intriga ahora era ¿Cómo paso?
--- Eso me dicen --- dijo ella sentándose en su lugar, todos miraron la escena con la boca abierta pero ni ellos ni Edward (que cabe decir estaba carcajeándose de la risa) iban a decir algo.
“Con ustedes dos, estas apuestas me dejaran pobre” pensó Jasper para más risa de Edward.
Después de unos minutos y que Edward se calmara ¡POR FIN!, Ben se dispuso a volver a leer, los amigos de Nessie la veían con interrogación en la cara, pero ella solo sonreía y murmura ya tener dinero para el concierto.
Rechiné los dientes para intentar contenerlas. Edward me miró con incredulidad, pero su rostro estaba tenso y permanecía a la defensiva.
— ¿Crees que aparté a pulso una furgoneta? Su voz cuestionaba mi cordura, pero sólo sirvió para alimentar más mis sospechas, ya que parecía la típica frase perfecta que pronuncia un actor consumado.
--- Claro, Edward eres un tonto ¿ya lo sabías verdad? --- pregunto Rosalie y el solo le sonrió de lado.
Apreté la mandíbula y me limité a asentir con la cabeza.
—Nadie te va a creer, ya lo sabes.
Su voz contenía una nota de burla y desdén.
—No se lo voy a decir a nadie.
Apreté la mandíbula y me limité a asentir con la cabeza.
—Nadie te va a creer, ya lo sabes.
Su voz contenía una nota de burla y desdén.
—No se lo voy a decir a nadie.
--- ¿Entonces por qué tanto drama? --- pregunto Embry mirándola intrigado con comida en la boca.
--- ¿De dónde sacaron comida? --- pregunto Bella mirando a los lobos que se atragantaban, los humanos también querían saber.
--- Esme --- dijeron todos y la aludida se para y les trajo a los que faltaban.
--- Es que pobrecitos, tenían hambre --- dijo ella mirándolos con ternura.
--- NO coman a sí, o Esme pensara que nunca los alimentamos --- dijo Emily rodeando los ojos y Sue estaba también molesta por los modales, pero viendo ahora a la madre de los Cullen con distintos ojos, no era el vampiro despiadado y ruin que todos creían.
Hablé despacio, pronunciando lentamente cada palabra, controlando mi enfado con cuidado. La sorpresa recorrió su rostro.
—Entonces, ¿qué importa?
—Me importa a mí —insistí—. No me gusta mentir, por eso quiero tener un buen motivo para hacerlo.
--- Ah, ya veo --- dijo Embry mordiéndole a la pata de pollo que devoraba.
— ¿Es que no me lo puedes agradecer y punto?
—Gracias.
Esperé, furiosa, echando chispas.
—No vas a dejarlo correr, ¿verdad?
—No.
—En tal caso... espero que disfrutes de la decepción.
--- ¡Edward! --- gritaron todas las mujeres hasta Bella ya no recordaba esos momentos groseros de su novio.
--- Ahora sí te mereces un regaño --- dijo Nessie molesta --- digo, a ti no te gustaría que mi novio me tratara así.
--- Ya lo hubiera matado --- dijo Cary riéndose y mirando a Quill que seguía confundido.
--- ¿Novio? --- preguntaron Jasper, Alice, Rosalie, Bella y Edward dos emocionadas y los otros tres molestos, el primero era por la reacción de los dos últimos que superaba a la de su hermana y su novia.
--- Ya no digo nada --- dijo ella cruzándose de brazos.
Corría el peligro de que su rostro, hermoso y lívido, me distrajera.
Jajajajaja, se escuchó por toda la habitación, mientras trataban de controlar la risa y Bella de controlar sus diversos cambios de tonalidades de rojo. Ben volvió a leer después de veinte minutos que les costó calmarse.
Enfadados, nos miramos el uno al otro, hasta que al final rompí el silencio intentando concentrarme. Era como intentar apartar la vista de un ángel destructor.
— ¿Por qué te molestaste en salvarme? —pregunté con toda la frialdad que pude. Se hizo una pausa y durante un breve momento su rostro bellísimo fue inesperadamente vulnerable.
—No lo sé —susurró. Todo en el cuarto se quedó en silencio.
--- Yo sí sé, aparte de que estés enamorado, no eres malo, eres una buena persona y no dejarías que nada le pasara si puedes evitarlo --- para sorpresa de todos fue Emmett el que dijo aquello.
Después de ese revelador mensaje que dejo a todos boca abierta Ben decidió continuar con la lectura, antes que él mismo arruinara su momento tan emotivo que dejo a todos sorprendidos y hasta algo intrigados de sí el tuviera algo de cerebro, después de todo.
Entonces me dio la espalda y se marchó. Estaba tan enfadada que necesité unos minutos antes de poder moverme. Cuando pude andar, me dirigí lentamente hacia la salida que había al fondo del corredor. La sala de espera superaba mis peores temores. Todos aquellos a quienes conocía en Forks parecían hallarse presentes, y todos me miraban fijamente. Charlie se acercó a toda prisa. Levanté las manos.
--- Cuidado que la atropellaran todas las personas del mundo --- dijo Emmett arruinando su momento, pero causo risas por partes de la mayoría.
—Estoy perfectamente —le aseguré, hosca. Seguía exasperada y no estaba de humor para charlar.
— ¿Qué dijo el médico?
—El doctor Cullen me ha reconocido, asegura que estoy bien y puedo irme a casa.
Suspiré. Mike y Jessica y Eric me esperaban y ahora se estaban acercando.
—Vámonos —le urgí.
--- No se sientan mal --- dijo Daniel saliendo en defensa de la madre de su mejor amiga --- ella solo no quiere seguir llamando la atención.
--- Ni nos importa, ni nos interesa --- dijo Jessica molesta y el solo se encogió de hombros.
Edward vio lo que su hija le había dicho, muy parecido a Ben, pero igual de bueno, bondadoso y generoso que su madre Ángela, por eso le gustaba para amigo de su hija, se preguntaba por qué no era él su novio.
Sin llegar a tocarme, Charlie me rodeó la espalda con un brazo y me condujo a las puertas de cristal de la salida. Saludé tímidamente con la mano a mis amigos con la esperanza de que comprendieran que no había de qué preocuparse.
Fue un gran alivio subirme al coche patrulla, era la primera vez que experimentaba esa sensación.
Todos rieron ante esos, Emmett todavía se imaginaba al volante de la patrulla con el sombrero de policía y tocando la sirena para detener a todas las personas en el camino de la casa de su cuñada a la escuela, seria divertidísimo.
Viajábamos en silencio. Estaba tan ensimismada en mis cosas que apenas era consciente de la presencia de Charlie.
Estaba segura de que esa actitud a la defensiva de Edward en el pasillo no era sino la confirmación de unos sucesos tan extraños que difícilmente me hubiera creído de no haberlos visto con mis propios ojos.
Cuando llegamos a casa, Charlie habló al fin:
—Eh... Esto... Tienes que llamar a Renée. Embargado por la culpa, agachó la cabeza. Me espanté.
— ¡Se lo has dicho a mamá!
--- Creo que alguien está en problemas, aparte de Bella --- canto Emmett despreocupadamente y todos rodearon los ojos.
—Lo siento.
--- Pues yo creo que hizo bien --- dijo Sue mirando a sus hijos --- Si algo les pasara quisiera estar enterada, aun cuando no fuera algo grave.
Al bajarme, cerré la puerta del coche patrulla con un portazo más fuerte de lo necesario.
--- Aquí a relucir el carácter de Bella --- dijeron varios entre lobos y vampiros, ella solo se sonrojo lo más que pudo.
Mi madre se había puesto histérica, por supuesto. Tuve que asegurarle que estaba bien por lo menos treinta veces antes de que se calmara.
--- Es normal en cualquier madre, lo primero es la seguridad de sus hijos --- dijo Esme sonriéndole a Bella y después a sus otros hijos --- aunque estos sean desagradecidos y groseros en muchas ocasiones.
--- También te queremos mamá --- dijeron los Cullen con sarcasmo
Me rogó que volviera a casa, olvidando que en aquel momento estaba vacía, pero resistir a sus súplicas me resultó mucho más fácil de lo que pensaba. El misterio que Edward representaba me consumía; aún más, él me obsesionaba. Tonta. Tonta. Tonta.
--- Bella yo…
--- No empieces, si me puse en peligro me puse yo solita, si me quise quedar fue mi decisión, te aseguro que no tuviste nada que ver en eso --- dijo Bella callándolo antes de que dijera una de sus tantas disculpas.
No tenía tantas ganas de huir de Forks como debiera, como hubiera tenido cualquier persona normal y cuerda.
--- Lo que pasa es que no eres una persona normal y mucho menos cuerda --- dijeron todos a la vez asiendo sonrojar a Isabella.
Decidí que sería mejor acostarme temprano esa noche. Charlie no dejaba de mirarme con preocupación y eso me sacaba de quicio. Me detuve en el cuarto de baño al subir y me tomé tres pastillas de Tylenol.
--- De perdido a esos haces caso --- dijo Carlisle regañándola como cualquier padre lo aria.
Calmaron el dolor y me fui a dormir cuando éste remitió. Esa fue la primera noche que soñé con Edward Cullen.
---- Ah que tierno --- dijeron todos a la vez.
--- Se acabó el capítulo --- dijo Ben serrando el libro, los ojos también se le cerraban.
--- Creo que es hora de irse a dormir --- dijeron varios y los Cullen asintieron.
Esme repartió las recamaras para que todos estuvieran a gusto, Jessica no pasó desapercibida que a Bella no le había dicho donde dormiría y se lo hizo saber, ella solo sonrió y la miro divertida.
--- Dormiré en la habitación de mi novio, ahí es donde tengo mis cosas --- dijo sacándole la lengua, Edward se acercó y la beso en la boca --- buenas noches Jess.
--- Mira a tu derecha --- dijo Edward y ella volteo Ben y Ángela hablaban con Daniel, pero la segunda lo abrazaba y este parecía estar desesperado --- tenemos que hablar.
--- Sí, de Renesmeé y muchas cosas más --- dijo ella subiendo con Edward de la mano a su habitación.
NOTAS DE LA AUTORA:
1. No me tarde tanto como la otra vez, pero aun así no como yo quería, el capitulo lo tenía escrito desde hace algunos días, pero estaba preocupada por mi examen de Administracion cosaque tuve el día de hoy, pase, con seis, pero pase. Digo no estoy conforme con mi calificacion y mis padres tampoco. Mamá solo me dijo ajam, de estoy enojada pero para que te grito si ya paso y mi padre que le hechara más ganas y mejorara mis calificaciones si quería la beca para ir a estudiar fuera (Quiero España jajajaja).
2. Bueno total, la memoria se me perdio hace dos o tres días y no la encontraba, total como ya no estaba precionada la busque mas calmada y sin la precion de la escuela y pues la ¡encontre!, tenía miedo, para que mentirles de que la hubieran barrido y tirado a la basura, es que mi cuarto era un desastre, pero ya recogiendolo aparecio en una carpeta jajajaja soy demasiado desorganizada y por eso tampoco había podído actualizar.
3. El cap que sigue no es del libro es completamente de mi imaginacion, la platica de Bella y la aparicion por fin de Daniell, quiero poner una foto para que la vean pero no se como, de hecho no le entiendo el de poner fotos en esta pagina ¿alguien sabe?
4. Espero que me comenten y boten un beso y nos vemos pronto.
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