Sus rostros estaban cada vez más cerca, estaba a milímetros, sus respiraciones se mezclaron, ambos cerraron instintivamente los ojos, Edward tomo a Bella por la cintura y la acerco más a su cuerpo, mientras ella enredo sus manos en el alborotado y cobrizo cabello de Edward.
El no aguanto más y poso sus labios sobre los de Bella, primero fue solo un rose, luego los labios de ambos cobraron vida, se movían en sincronía, sus labios se acoplaban perfectamente, como si estuvieran hechos el uno para el otro, su beso era tierno y suave. Edward rozo su lengua con los labios de Bella, pidiendo permiso para profundizar el beso, ella lo acepto gustosa.
Edward no podía creer, que estaba besando por fin a Bella, sus labios eran dulces y suaves. Nunca la dejaría ir <<esto es lo el inicio>> pensó, como le gustaría hacerla suya en ese momento, besar cada parte de su cuerpo, sintió como algo entre sus piernas cobraba vida. Sus manos inquietas subían y bajaban por la espalda de Bella, hasta llegar a sus caderas. Esta mujer era su perdición.
Bella sentía grandes descargas eléctricas con cada rose, pensó <<como desearía que me hiciera el amor en este momento>> sentía que no había suelo firme bajo sus pies, además de las virilidad de Edward contra su abdomen. <<que grande>> pensó.
Lentamente terminaron su beso, pero él siguió dejando suaves y húmedos besos en las mejillas y cuello de Bella.
- ¿Qué vas hacer mañana? – pregunto Bella aun con los ojos cerrados, por lo bien que se sentía la boca de su Edward sobre su piel.
- No se – beso – Bien – beso – Solo – beso- Se que – beso – Te veré – beso-
- Que tal si vienes con Alice y no sé ¿hacemos un día de piscina?-
- Me parece muy bien… a ¿Qué hora quieres que vengamos?- pregunto Edward con la voz un poco ronca por la excitación.
- Te parce bien a las 10:00 de la mañana –
- Perfecto aquí estaremos puntuales, creo que es mejor que me vaya – dijo Edward sin soltar a Bella, era mejor que se fuera antes de cometer una locura.
- Llámame cuando llegues a tu casa, así sabré que llegaste bien a tu casa –
- claro que lo hare –
Se dieron un tierno beso en los labios de despedida, él la soltó a regañadientes; pues no la quería dejar, claro que ella tampoco quería que se fuera. El subió a su auto y Bella lo despidió agitando la mano, no podían borrar la sonrisa de tontos de sus labios.
Bella entro a su casa y se tiro sobre el gran sofá de la sala, allí empezó a reír como desquiciada. Que romántico fue todo, pensó.
- ¿De qué te ríes hermanita? – Bella se sobresalto y vio a Jasper acercarse con un vaso de agua en su mano.
- Jazz me asustaste – Jasper rio.
- y se puede saber ¿Dónde se encontraba la señorita? – Jasper fingió enfado y achino los ojos – aunque por tu cara, la respuesta es obvia… estabas con Edward Cullen. ¿Verdad? –
- Si estaba con él – suspiro Bella – Que hombre tan maravilloso, y tu; ¿Qué haces despierto a esta hora? , es la 1 de la madrugada -
- Te estaba esperando, como no dijiste para donde ibas y tu celular no tenia señal… y bueno llegue hace poco, estaba con Al –
- Y ¿Cómo sigue todo con ella? – Bella seguía acostada en el sofá y Jasper estaba sentado en el otro.
- Bien, está un poco prevenida, sé que no va a estar tranquila hasta que María se vaya –
- Y no sabes ¿Cuándo se va? –
- No, no lo sé, espero que sea pronto, no soporto ver a mi Al así de angustiada –
- Todo va a salir bien Jazz –
- Eso espero, Y tu y Cullen ¿Qué? –
- Solo te puedo decir que me siento muy bien con él –
- Me agrada, creo que hacen una bonita pareja… se les ve la química entre ustedes. Nada que ver cómo te veías con Black – Jasper conocía muy bien la historia entre Jacob y Bella, no le agradaba pero no se podía meter en esa relación… Por eso en parte sintió un alivio cuando se entero de la boda de Jacob, sabía que su hermana sufriría por eso, pero al fin se acabaría esa relación tan “truculenta”.
- si lose entre Edward y Jacob no había punto de comparación. Edward es un gran hombre, eso se le nota por encima. Ah! Por cierto invite a Edward y Alice a venir mañana a piscina y pues le diré a los empleados que preparen todo para una barbacoa –
- Me parece genial, además así conozco un poco más a mi cuñado – los dos rieron, pero empezó a sonar el móvil de Jasper, se le hizo extraño que lo llamaran a esas horas, además que el numero era desconocido.
- Si, ¿Diga? – pregunto Jasper.
- ¡Hola bebe! ¿Cómo estás? – sonó la voz chillona de María, así que para molestarla le dijo:
- Alice, amor ¿eres tú?- dijo tratando de contener la risa.
- Cual, “Alice”, Amor soy yo, María, como me puedes confundir con esa – dijo indignada María.
- ah! María eres tú, si tienes razón, como voy a confundir la hermosa voz de MI NOVIA, con la tuya que es horrible aparte de chillona –
- Eres un grosero –
- Y tu eres insufrible, ¿Quién te dio mi numero?-
- Bebe, eso no importa –
- No me digas ni amor, ni bebe, ni nada que se le parezca y NO ME VUELVAS A LLAMAR – y corto la llamada.
- Esa mujer está completamente loca – dijo Bella – Sera mejor que cambies de numero, conocemos a María y va seguir llamándote – volvió a sonar el celular de Jasper.
- Es ella otra vez – Jasper rodo los ojos – mejor lo apago y mañana mismo cambio el numero –
- Bueno Jazz, me voy a la cama, que descanses – le dio un beso en la mejilla a su hermano.
- Descansa pequeña –
Bella enseguida se dirigió a su habitación, se puso la pijama y cuando se disponía a meterse en la cama, sonó su móvil, observo la pantalla y era Edward.
- ¡Hola! – dijo Bella.
- Hola bonita, ¿te desperté? –
- No apenas me disponía a acostarme en la cama, y tu ¿Qué haces? –
- También me voy a la cama –
- Que bien, ¿le dijiste a Alice lo de mañana? –
- Si claro, dijo que encantada ira –
- Perfecto, entonces aquí los espero, no olviden sus trajes de baño –
- Claro que no, Bueno bonita, nos vemos mañana, descansa y sueña conmigo –
- También descansa y sueña conmigo –
- Dalo por hecho, un beso – los dos cortaron la cama, y quedaron profundamente dormidos soñando el uno con el otro.
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A la mañana siguiente, unos suaves rayos despertaron a Bella. Miro el reloj y eran las 8 de la mañana, tenía el tiempo justo para alistarse, antes de la llegada de sus invitados, tomo su bata y se la puso mientras se dirigía a la cocina.
- Ana, Buenos días –
- Buenos días niña, ¿Qué deseas para desayunar? –
- Por favor, me sirves hot-cakes, con jarabe de maple y jugo de naranja… ah y un poco de fruta –
- Enseguida te sirvo –
- Gracias… Oye y mi hermano ¿Ya desayunos? –
- Si señorita, salió hace poco dijo que tenía que resolver un asunto relacionado con su teléfono celular –
- Ah veo, Y ¿mis padres? Ayer no los vi y no los veo por ningún lado –
- Señorita, sus padres salieron de viaje ayer por la noche –
- ¿Por qué no me avisaron? – dijo tristemente.
- Niña, sus papas la llamaron pero su celular no tenia señal y pues como salió, con el señor Cullen, sus papas no se preocuparon –
- Bueno. Se me olvidaba decirte algo Ana, necesito que tu y Sara preparen todo para una barbacoa, para cuatro personas; cocteles y refrescos –
- Si señorita, ya mismo organizamos todo lo necesario –
- gracias – le sirvieron el desayuno, cuando termino subió a su habitación, tomo una larga ducha, salió del baño envuelta en una toalla, y abrió su amplio armario, tenía que escoger el bikini más sexy, así que escogió uno azul, que resaltaba en su no tan broceada piel. Era pequeño, la parte de abajo la llegaba justo a la cadera, resaltando su plano y bien trabajado abdomen, la parte superior eran dos triángulos unidos por unas tiras, que tapaban lo justo de sus senos.
Se miro en el espejo y sonrió al imaginarse la cara de Edward cuando la viera. Se aplico crema bronceadora, tomo su pareo y sombrero, que hacia juego con su bikini, al igual que sus sandalias.
Salió corriendo de la habitación con las gafas y el bloqueador en sus manos, cuando escucho el pito de carro de Edward.
Al llegar a la sala, Jasper estaba recibiendo a los invitados, Alice estaba colgada a su cuello y se estaban dando un tierno beso. Bella aclaro la garganta y todos voltearon a mirar.
- Hola bonita – a Edward la brillaron los ojos cuando vio la cara de Bella, pero al observar su cuerpo se la callo la boca.
- Hola guapo – dijo Bella que tenía una sonrisa impecable. Ella salió corriendo y la dio un gran abrazo a Edward, él la recibió gustoso.
- Estas… hermosa – Edward llevaba puesta una bermuda negra y una camisa con cuello en V, sandalias y gafas negras.
- Tu estas, muy guapo – y Edward no aguanto más y junto sus labios. Jasper cayó un grito que iba a salir de la boca de Alice.
Se dirigieron hacia la parte trasera de la mansión donde estaba la piscina, Jasper y Alice se adelantaron, Edward y Bella caminaron despacio, tomados de la mano. Cuando llegaron a la piscina, Ana y Sara ya tenían todo listo para la barbacoa.
Tomaron el sol por un rato, Edward no se separaba de Bella ni por un segundo, se daban besos cada vez que tenían la oportunidad. Así pasaron un muy buen rato. Ana y Sara, sirvieron la comida, todos se sentaron a la mesa y comieron entre risas, bromas y relatos. Después de un rato Edward tomo a Bella entre sus brazos y se lanzo con ella a la piscina. Por eso bella se subió sobre el tratando que tomara un poco de agua. Jasper y Alice, se desaparecieron.
- ¿crees que Al y Jasper están en su habitación? – pregunto Edward.
- Yo creo que sí, bueno tenemos la piscina para nosotros solos –
- Me parece perfecto –
De esta manera empezaron una acalorada sesión de beso, dentro del agua, Bella estaba contra la pared con las piernas alrededor de la cintura de Edward, mientras que El, besaba apasionadamente su cuello, soltó una de la tiras del bikini de Bella. Esta parte salió flotando dejando libres los redondos y bien formados senos de Bella. Edward con su boca se apodero de uno de los senos de bella y con una mano daba placenteros masajes al otro. De la boca de Bella salió un audible gemido, que aumento la ya marcada erección de Edward. Lo que hizo que juntaran sus sexos más.
- Creo que es mejor que paremos – dijo Edward con la voz ronca – No quiero que nuestra primera vez sea así – tenia la respiración agitada – además alguien puede vernos.
- Sí, creo que tienes razón – dijo Bella muy agitada, Edward beso tiernamente la boca de ella. Busco la parte del bikini que estaba flotando y se la ayudo a poner. Jugaron una rato en la piscina, después llegaron Jasper y Alice, continuaron jugando los cuatro, y así se fue la tarde…
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