Habían pasado varios días y por fin hoy era el día de mi grado, por fin me graduaría y me iría lejos, mi mama y mi papa me habían dado unas llaves y no sabía para que eran me habían dicho que solo cuando llegara el día del grado me dirían para que eran las llaves, nada más pude aceptarlas y negar mi padre me había regalado dinero como para comprar un carro de grado pero no quería uno así que solo le di las gracias, el vestido que mi madre me había comprado para el grado era hermoso, era dorado claro con un lazo blanco en la cadera y encaje transparente de mangas unos tacones blancos demasiado altos pero que ya sabía usar o si no jamás me los hubiera puesto tanto por mi integridad física y la de mi bebe, mi papa me regalo una cadena de oro con la inicial de mi nombre era una hermosa i de oro con diamantes
mi papa se veia hermoso con un traje negro y mi mam un hermoso vestido verde corto con un solo hombro
Cuando llegamos al instituto todos ya estaban hay Edward se veía maravilloso me quede mirándolo pero en ese momento llego Jesica tomándolo del brazo y llevándoselo el me miro y yo lo mire con una cara de decepción y dolor, sentí dos brazos enormes abrazándome por detrás me gire y vi a mi adorado Emmet
- Hola hermosa – dijo dándome un beso en la frente .- como esta mi sobri – dijo
- Durmiendo – dije sonriente en verdad solo tenía un mes pero sentía que ya tenía vida
Emmet me miro con dolor y miro a su hermano que tenía Jesica y peleaba con ella quien solo trataba de tomarlo del brazo, camino conmigo hasta que vimos a mi rubia amiga con su toga puesta sonreí y me senté en mi lugar, la ceremonia fue hermosa y todos lanzamos nuestros birretes al cielo rosalie me abrazo llorando y Emmet también mire a Edward quien se acercaba a mi
- Bella- dijo el mirándome respire profundo u lo mire
- Edward felicidades-dije mirándolo
- Felicidades a ti, te ganaste el premio a la mejor alumna de nuestra generación –dijo mirándome
- Gracias-dije
- Bella nena nos vamos- dijo Emmet mirándome sonreí y asentí –
- Tengo que irme adiós- dije
- Podemos hablar – dijo
- Lo siento en unos minutos tengo que tomar un avión – dije mirándolo era cierto no quería la fiesta así que mis padres me llevarían Arizona a y Emmet se iría en dos días para ayudarme a instalar
- Que – dijo mirándome
- Si iré a vivir a Jacksonville – dije mirándolo – adiós Edward que tengas una buena vida
- No bella espera- dijo corriendo a donde yo iba pero llego tarde ya que me había montado en el auto de mi mejor amigo junto con mis padres que solo miraban a Edward quien había quedó en la mitad del campus del instituto ya me había despedido de sus padres y de Alice no podía solo irme así a pesar de que no les diría que estaba esperando un bebe almenos me despediría de ellos
Cuando llegamos al aeropuerto Emmet me dio un gran abrazo y rosalie también, mis padres me llamaron diciéndome que perdía el vuelo si no me movía
- Recuerda Emmet nada de esto a nadie –dije mirándolo
- Tranquila bells no le diré a nadie- dijo él sabía que podía confiar en el cómo en rosalie – y recuerda tu llamarnos dos días antes de tu ecografía
- No lo olvidare- dije
Camine con mis padres para poder viajar a Arizona ellos se irían al día siguiente ya que papa tenia trabajo.
Cuando llegamos mi papa pidió un taxi que nos llevó a un lugar que jamás había visto iba con la cara en la ventana viendo la lluvia caer se suponía que era un lugar cálido pero al parecer el clima estaba igual que mi estado de ánimo, no me di cuenta que el taxi ya se había detenido y mi papa me movía el brazo
- Pensé que te habías quedado dormida – dijo mirándome
- No estaba pensando – dije .- creo que el clima esta igual que yo – dije mirando a mi papa, el me abrazo contra su cuerpo dándole el dinero al taxista y tomando mis maletas junto con las de mama
Mire hacia el frente y me di cuenta que estábamos frente a una casa no muy grande pero si lo suficiente tenía una gran reja negra y dentro era hermoso con un lindo jardín en frente la casa era de color madera con un garaje de puerta más oscura y varias plantas en frente de la casa

- Que hacemos aquí – dije mirándolos
- Bueno recuerdas la llave que te dimos – dijo mama – bienvenida a tu casa linda- dijo mama dándome un abrazo
- Pero como – dije
- Bueno me dijiste que querías vivir lejos y cuando dijiste en donde recordé que ti tía Carmen vivía aquí y que dejo la casa le dije que me la vendiera y me la vendió amueblada – dijo mirándome
- Oh mama es hermosa- dije mirándola aunque no conocía a la tía carme porque se la pasaba viajando sabía que era hermana de mi hermana y que no tenía hijos porque así lo quiso para poder viajar
- Porque no vas a mirarla por dentro te aseguro que es mucho más linda que por fuera- dijo mirándome las llaves que tenía en la mano eran dos así que las de la reja también estaban aquí, tome las llaves y abrí cuando entre sonreí y papa me miraba con una linda sonrisa en la cara
Efectivamente la casa era mucho más hermosa por dentro que por fuera, entrando estaba la sala era de color blanco por completo, las ventanas daban una linda vista a un lindo jardín de la parte de afuera con cortinas blancas, un largo sofá de color marfil al lado de la ventana a su lado un sofá café oscuro, otro sofá al otro lado y una mesa de centro que era acolchada pero sabía que mi tía no tendría una así, había una puerta de cristal que daba a un jardín enorme pero vacío

- Mama porque la mesa de centro esta así – dije – se supone que mi tía es muy cómo decirlo alocada seria de madera o cristal pero no acolchada como las sillas
- La mesa de centro la compro Emmet dijo que tanto tu como un niño pequeño eran muy torpes así que no quería que se golpearan
- Él lo sabe – dije mirándola
- Si ese muchacho es muy lindo y atento sino estuviera con r rosalie juraría que le gustas
- Mama tanto Emmet como yo nos vemos como hermanos- dije mirándola
- Lo se hija por eso dije que si no estuviera con rosalie
- Pf mama ya- dije mirándola ella me sonrió y camino conmigo a la cocina esto si era una cocina era enorme y muy moderna obviamente estaba vacía
El techo era blanco con lámparas en él y tenía 3 lámparas más largas en la isleta del medio de la cocina con dos sillas de madera giratorias, varios muebles sobre el mesón de la cocina y la nevera era gris palta muy grande, el mesón de la cocina tenia varios cajones en la parte de abajo para las ollas y demás cosas

- Oh mama es hermosa- dije mirándola
- Lo se cariño en unos minutos si quieres podemos ir a comprar cosas como la losa y comida
- Claro –dije mirándola – quiero ver el resto de la casa
- Claro cariño son 5 habitaciones mas
Salimos de la cocina y caminamos a un lado donde estaban a las escaleras, eran de madera en forma de caracol subimos y habían dos pasillos a un lado quedaban dos habitaciones y al otro lado quedaban tres más.
Entre a la primera recamar y era muy grande pero estaba vacía
- Esta era el cuero de estudios de tu tía así que se llevó las pintaras que ella tenia
Salimos de la habitación y seguí con la otra también era grande y tenía dos ventanas las cortinas eran blancas y sobre esta una roja, tanto el suelo como la pared en donde estaba el cabezal de la cama eran de color rojo a cada lado una mesa negra pequeña, la cama era una enorme cama matrimonial hermosa con un cabezal blanco larguísimo y una silla roja a los pies de la cama en frente otra silla roja, y un gran armario que por supuesto estaba vacío

La otra recamara estaba vacía junto con las demás solo una tenia cama, las demás habitaciones eran donde mi tía colocaba sus cosas así que no había nada mas
- Bueno que te parece si vamos por algo de comer y hacemos mercado
- Me parece bien – dije mirándola ella sonrió y fuimos con mi papa que se había quedado abajo pidiendo un taxi cuando llego nos fuimos al centro comercial
Mi mama exagero compro frutas, harina, maíces, leche, cereales, huevos, jamos, queso y muchas cosas más para tanto desayuno como almuerzo, me compro platos y ollas, mi mama no podía tomar un carro de mercado porque o llenaba mi papa solo se reía de ella mirando como compraba, me compro las cosas de aseo, y demás
- Bueno en unos días llegan los libros y tus cosas de la casa así que puedes estar tranquila – dijo mirándome
Mire a mis padres que me sonrieron y me abrazaron llenándome de besos este era un nuevo comienzo
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