Voy camino al colegio. Ayer después de hacer los deberes del colegio, las chicas se quedaron a cenar, ya que René espero a que llegue mi padre y salieron junto a la otra mujer. Las dudas en mi mente seguían pero cuando les conté a mis amigas lo que me pasaba dijeron que quizá solo había soñado con ella porque su imagen había quedado guardada en mi mente, que no me preocupe y decidí hacerles caso.

Llego al colegio y me veo prácticamente atacada por un duende hiperactivo que se me tira encima y yo como torpe que soy me tambaleo pero no logro caer gracias a Rosalie que me sostiene.

-¡¿Alice me quieres matar?!-

-lo siento Bells, es que no sabes lo que tengo para contarte-

-mmm… no, no lo sé-

- ¡HAY UN ALUMNO NUEVO!- grita eufórica.

-ajamm, y ¿Qué tiene eso de emocionante?-

-nada, no tiene nada de emocionante, es un engreído- habla Ros.

-hay Rosalie no seas así-

-yo solo digo lo que vi-

-como sea – dice restándole importancia- Bellita es un morocho alto, con un cuerpo de infarto, conmigo fue muy amable, y no sé, estaba pensando que podrías ser su amiga- insinúa levantando las cejas una y otra vez-

-estás loca- respondo y comienzo a caminar dejándolas atrás-

-hoo, vamos Bella ¡por favor!- dice mientras me toma del brazo haciéndome voltear y pone carita del burro de Shrek.

-no Alice, es mi última palabra- respondo pero al voltear choco contra un chico, morocho, ojos color negros, y por lo que se veía a simple vista al parecer tenía un excelente físico, inmediatamente lo identifique… él era el chico nuevo.

-Discúlpame, ¿estás bien?- dice pero al verme pone cara de sorprendido.

-he, yo emm, si… si estoy bien- no logro hablar coherentemente al notar que me está inspeccionando con la mirada de pies a cabeza.

-¿segura? Lo siento soy un idiota tendría que haber sido más cuidadoso-

-está bien, no te preocupes-

-ok, ¿nos vamos Isabella?- pregunta una Rosalie de muy mal humor.

-Asique te llamas Isabella, mi nombre es Jacob Black, un placer conocerte- se presenta ignorando a mi amiga.

-sí, Isabella Swan y gracias igualmente-

-Bella llegas tarde a tu clase- definitivamente a Rose Jacob no le cae nada bien.

- ¿en qué año estás?- a este chico al parecer le gusta que mi amiga lo odie.

- ¿en el ultimo y tu Jacob?- interviene Alice, definitivamente esta loca si piensa que yo voy a ser algo más que amiga de él.

-en el último, me cambie porque a mi papa lo transfirieron de Seattle a Forks-

-que interesante y ¿qué clase te toca?-

-ahora tengo Filosofía, pero no sé dónde queda el salón-

- ¿en serio? A Bells le toca esa misma materia asique pueden ir juntos ¿Qué dicen?-

No pude negarme al pedido de Alice asique aquí estoy en Filosofía sentada con el chico nuevo.

La clase se me pasa rapidísimo, es que realmente Jacob es muy simpático. En todas las clases que compartimos se sentó conmigo y nos hicimos amigos rápidamente, aunque ¿Cómo no hacerlo si ha estado todo el día haciéndome reír?

Ya ha pasado un mes desde que conocí a Jacob. Nos hemos hecho muy amigos, algo que a Rose no le gusta mucho pero al notar que él me hace bien no dice nada solo por eso, asique al menos soportan estar juntos aunque obvio que las peleas siempre están presentes no me quejo.

Este tiempo que he pasado con mi nuevo amigo todo se me ha hecho más fácil, ya que el está siempre para sacarme una sonrisa cuando no tengo ganas de nada. Gracias a Jacob la vida sin Edward se me hace más fácil, pero eso no quiere decir que ya no esté presente en mi pensamiento gran parte del tiempo, que no me siga doliendo verlo con Tania o que en las noches antes de dormir no recuerde todo lo pasado y lagrimas vuelvan a salir de mis ojos, pero al menos el día es más llevadero, pero como ya dije solo el día, porque en las noches esa misma pesadilla me sigue atormentando y sigo sin entender el porqué.

Desde la vez en que me desmaye en la clase se biología no volvimos a hablar. Lo extraño, lo extraño demasiado, hay momentos en los que me dan ganas de correr donde se encuentra el y abrazarlo, besarlo, decirle que lo amo, pero recuerdo lo que paso, que me dejo sin siquiera importarle como quedaba yo, me dan ganas de gritarle y reprocharle todo, gritarle en la cara que lo odio, porque es así, por momentos siento que lo amo, y por momentos siento que lo odio.

CHICAS AQUI ESTOY ESPERO LES GUSTE Y PROMETO QUE EL PROXIMO SERA MAS LARGO.. :)