-¿Alice? ¿Qué sucede?-pregunte cerrando la puerta detrás mío y acercandome a ella.

-Bella, ¿Qué acaso no utilizaste esto?-me enseño una caja color azul.

-No tuve la necesidad de usarla Alice, no te entiendo-Alice me miro extrañada.

-Pero Bella, tú misma me dijiste que empaque uno de estos porque al sexto día en la isla supuestamente comenzaba tu ciclo menstrual ¿Qué no lo recuerdas?-pregunto Alice y entonces comprendí.

-Pero Alice, no lo utilice porque no...me...vino...-logre decir mientras mi cerebro reaccionaba a lo que Alice quería saber y yo también, por lo que empecé desesperada con los cálculos mentales, Alice se dio cuenta y saco su celular del bolsillo y puso la calculadora, yo empecé a teclear los números y...no, volví a intentarlo y lo mismo.

-Alice, estoy retrasada, tengo casi dos semanas de retraso-logre decir y mi cuñada se froto las sienes con las manos.

-¿Qué crees que sea?-pregunto lo más tranquila posible.

-Espero que sea cualquier cosa menos lo que estoy pensando-le dije con la desesperación en la voz. Entonces recorde, aquella noche, la segunda noche de nuestra luna de miel, me acorde que esa noche con Edward no nos cuidamos, pero...yo creí que sí pero, no.

-Ay, Alice, hubo una noche que no nos cuidamos, los sintomas, tuve vomitos hasta hoy en el avión. Ay dios mio-me deje caer al suelo del baño y tape mi rostro con mis manos mientras lagrimas se derramaban por mi rostro.

-Bella, tranquila, no estamos seguras todavía, mañana iremos a que te hagan un analisis así estaremos cien por ciento seguras, puede ser otra cosa, pero tú tranquila, llamare a la clinica a sacar turno, le diremos a Edwrad...

-No le diremos nada a Edward, Alice prometeme que no le diremos nada hasta tener los resultados no quiero que se sufra conmigo-le dije desesperada y ella se agacho y me acaricio la mejilla limpiando una lagrima.

-Tranquila Bella, todo saldrá bien, ahora trata de recomponerte, Edward lo va a notar-hice lo que me dijo que inhale fuertemente tratando de limpiar las lagrimas, debía ser fuerte, no tenía que sufrir Edward conmigo cuando yo era la irresponsable, cuando yo era la involucrada en este tema, cuando yo era la que me prometí que nunca quedaría embarazada y si...¿si lo estaba?...más lagrimas se desparramaron y Alice me abrazo fuertemente.

-Oh, Bella, tranquila, respira, inhala y exhala, todo estará bien-me consolo Alice mientras yo trataba de recomponerme.

Así estuvimos por unos minutos hasta que sentí que alguien subía por las escaleras, era Edward, me incorpore rapidamente y lave mi cara tratando de borrar la evidencia del llanto, Alice tomo su celular y salio del baño, yo me quede un rato allí observandome al espejo y tratando de recomponer mi cara para Edward, Alice volvió con la misma cara de preocupación y guardo su celular.

-Conseguí un turno para mañana a las ocho a.m. Pasare por ti siete y media, si Edward se despierta solo dile que iremos de compras, que hay descuento o inventate algo, tranquilízate, Esme y Carlisle ya se fueron, Jasper vino por mí y esta hablando con Edward, te quiero mucho, solo respira y controlate-me abrazo fuertemente y mi labio inferior temblo en señal de debilidad y ganas impresionantes de llorar, Alice beso mi mejilla y salió del baño mientras yo me quede allí pensando en que hacer, me lave de nuevo la cara y me asegure de que se vea mejor, no logre mucho resultado pero debía salir del baño, inhale fuertemente y con la mirada en el piso me dirigí a la habitación, para mi suerte Edward no estaba aquí, por lo que piernas teblorosas logre sentarme en la cama y controlar mi respiración a la vez que aguantaba las lágrimas.

Se hizo de noche, todo era oscuro y el ruido en la cocina me indicaba que Edward preparaba la cena, pero no tenía hambre, los nervios me jugaban en contra, así que no dude un segundo y me incorpore para ponerme mi ropa de dormiry prendí la tele a la vez que me acurrucaba en la cama, me tranquilice bastante y pude alejar los pensamientos entreteniendome con la televisión. Pero luego sentí como abrían la puerta y me percate de que Edward se acercaba a mí.

-¿No vas a cenar?-pregunto hechandose en la cama y acariciando mi cabello.

-No tengo mucha hambre-le respondí secamente.

-De acuerdo, mamá hizo algunos sandwidches por lo que ya estoy listo para dormir con mi esposa-se acerco y me beso la mejilla suavemente para despues incorporarse y cambiarse por su ropa de dormir, una vez que se cambio se acosto a mi lado y el tenerlo cerca me hizo darme cuenta que esta noche lo necesitaba y mucho, me acerque más a él y me acurruque en su cuerpo entrelazando mis piernas con las suyas, un hábito entre nosotros, mientras que él me abrazaba, estaba cansada por lo que me estire y lo bese dulcemente para despues quedarme dormida entre sus brazos.

El sonido de mi celular me desperto abruptamente, era un mensaje de Alice.

"Bella, estoy a unas cuadras, apúrate"

Mire la hora y eran las  siete de la mañana, observe a Edward que se encontraba completamente dormido y sus brazos me apretaban con fuerza, delicadamente salí de su agarre y me vestí en silencio para despues dejarle una nota sobre su mesita de luz.

"Fui de compras con Alice, volvere en unas horas, te amo, Bella"

Le deje la nota, cepille mis dientes, mi cabello, tome mi bolso, mi celular y me dirigí a la puerta no sin antes darme cuenta de la carta que ayer deje sobre la mesada, la tome y la metí en mi bolso sin intenciones de leerla, ya que sabía que no me agradaría lo que contenía dentro, camine hacía fuera y vi el auto de Alice aparcado en frente de la casa, corrí hacía el y entre en la puerta del copiloto.

-¿Como amaneciste?-pregunto Alice a la vez que aceleraba rumbo a la clinica.

-Nerviosa, con nauseas y bien acompañada-le dije dandome cuenta que mis manos temblaban.

-Bella, respira-me recomendo y yo inhale y exhale como pude.

Alice aparco en frente de la clinica y ambas nos dirigimos hacía el interior de esta. Sentía que me mareaba a cada rato y por lo que pude notar Alice también estaba algo nerviosa, hablo con la recepcionista y ella nos guío a un consultorio en el que nos dijo que esperemos por el doctor. Yo me senté en una silla de cuero negro algo desgastada, mis pies golpeteaban contra el suelo mientras que Alice caminaba de aquí para allá, la puerta se abrió de golpe y vi entrar a un doctor de cabello morocho y baja estatura.

-Buenos días yo soy Thomas-nos estrecho la mano a Alice y a mí para despues leer unas anotaciones.

-¿Están aquí para una prueba de embarazo?-pregunto y ambas asentimos.

El doctor me obligo a sentarme en la camilla, entonces cuando me percate de la aguja cerré los ojos con fuerza y aguante la respiración, sentí un ligero pinchazo y un poco de dolor pero fue rápido y luego me encontraba sosteniendo un algodón en mi brazo.

-¿Son parientes o algo?-pregunto el doctor mientras se concentraba en mi sangre.

-Es mi cuñada-le respondí con la mejor voz que pude.

-Oh. Qué bien, bueno chicas hoy están de suerte, no hay tantos análisis por lo que los resultados estarán en una hora y media o dos ¿Desean esperar?-pregunto una vez que tuvo mi sangre en un frasco y se acercaba a la puerta.

-Esperaremos-le conteste.

-De acuerdo, quédense aquí, vendré en un rato-el doctor salió y yo me quede sentada en la camilla con los ojos de Alice interrogándome.

-¿Cómo te sientes?-me pregunto Alice tomándome de la mano.

-Sinceramente ni yo sé cómo me siento-respondí cabizbaja.

Alice y yo nos quedamos charlando un rato y ella trataba por todos los medios de animarme y me contaba que Rosalie la llamo ayer para decirle que Emmy al fin empezó a decir papá y Emmett se puso tan contento que corrió por toda la casa emocionado. Me reí sin alegría ante lo que me contaba, pero en medio de la conversación mi celular sonó, lo saque de mi bolso y el identificador decía "Edward"

-Es Edward ¿Qué hago?-le pregunte a Alice.

-No contestes, deja que suene y apaga el celular, luego tendrás tiempo de hablar con él-me recomendó e hice lo que me dijo, me dolía en alma mentirle a Edward y más sobre este tema tan delicado pero no podía decírselo, no todavía, necesitaba las pruebas en mi mano y luego ver que hacer.

-Bella, necesito que me prometas algo-me pidió Alice mirándome a los ojos.

-¿Qué cosa Alice?-le pregunte viendo que su cara era seria.

-Prométeme que si esa prueba da positivo no te alejaras de la vida de mi hermano, que no huiras con su hijo, prométemelo-me pidió seriamente, yo la mire un tanto sorprendida.

-Alice, te juro que nunca haría eso, jamás, yo sé que si llevo un hijo dentro es de Edward y nunca lo podría separar de su padre al niño, además de que no puedo separarme yo de Edward, pero si te deja más tranquila prometo no hacerlo-le dije sinceramente y ella asintió.

Abrí mi bolso para guardar mi celular y me percate de la carta, la saque y Alice la miro detenidamente, ella sabía el significado de esas cartas, las conocía tan bien como yo, se la entregue ya que no quería ni saber lo que decía y ella la abrió para después comenzar a leer, se quedó vacilante un momento y luego negó con la cabeza.

-Bella, te conviene saber lo que dice la carta-me dijo algo decaída.

-Dímelo tú, no quiero leerla-ella suspiro.

-Jane vendrá a visitarte a la empresa, no dice específicamente cuando pero vendrá, dice que quiere verte después de tanto tiempo y que se volvió a casar con un abogado, que ahora está viviendo en New York y que vendrá aquí por un tiempo para verte-me relato y yo apreté los dientes con fuerza para reprimir las lágrimas ¿Qué acaso justo ahora se le ocurre venir a visitarme? Una lagrima traicionera se escurrió por mi mejilla y la limpie rápidamente.

-Odio todo esto-masculle mordiéndome el labio con fuerza.

-Lose, pero Bella, nosotros estaremos para ti, todos nosotros, no estarás sola-me dijo abrazándome fuertemente, entonces el doctor entro por la puerta y al ver la escena frunció un poco el ceño, las dos le dedicamos la mejor sonrisa que pudimos para después incorporarnos.

-Bien, señoritas aquí tengo el resultado y por lo que intuyo prefieren leerlo solas, les dejo el sobre así lo ven tranquilas-me entrego el sobre en mis temblorosas manos, me dedico una sonrisa amigable y salió de la habitación, yo respiraba agitadamente mientras el sobre ahora pesaba más de lo que creía posible. Tome aire y Alice hizo lo mismo. Saque el papel del sobre y comencé a leerlo en voz alta.

Paciente Isabella Marie Swan. Análisis de sangre para verificar embarazo.

                     RESULTADO: *POSITIVO*

Lo leí fuerte y claro y entonces me percaté de que todo mi mundo se vino abajo, pero no todo fue malo, al leer la última palabra de la hoja no todo se sintió tan mal de cómo lo esperaba, sino que también sentí un pequeña oleada de felicidad, me sentía la persona más rara del mundo, me sentía feliz, una vida estaba creciendo en mi interior un pedacito de Edward y mío, un fruto de nuestro amor, un pequeño tesoro que me provoco algo, un sentimiento extraño que opaco a las demás emociones pero no duro mucho, no duro el tiempo que yo esperaba y se me hizo imposible soltar el grito ahogado que vino a continuación seguido de lágrimas y a una Alice llorando y tratando de consolarme, ahora si no sabía cómo me sentía, solamente no podía pensar con normalidad.

Chicas!!! Aquí les dejo uno de los capítulos que va a dar inicio a toda la trama que viene despues, espero que lo disfruten y que no se enojen con los que sigue, todo es parte de la historia. Gracias por su compañia, espero sus comentarios y sus votos, necesito sus opiniones acerca de todo, besos.