aun no terminara el fic
Capitulo XXIII: la boda
Embry Nov.
Nervioso, asi me encontraba hoy, estaba muy nervioso, solo faltaban unas horas para casarme con bella, hoy me sentía el hombre mas afortunado del mundo, paúl a mi lado me trataba de calmar, mientras que los demás estaban en su lugar menos Jacob, quien era el alfa y jefe de la tribu, el debía estar junto al cura.
-cálmate Embry ya llegara-dijo SAM
Y como si hubiese sido llamada, allí en la puerta de la iglesia en manos de Charlie, se encontraba mi bella, mi hermosa, deje de estar nervioso y sonreí mirándola, bella levanto su mirada y me sonrío, lentamente se empezó a escuchar la marcha nupcial, mientras bella y Charlie avanzaban hacia donde me encontraba, el camino se me hizo eterno, hasta que Charlie llego con bella a mi lado
-cuídala –dijo entregándome la mano de bella
-con mi vida-dije
Tome la mano de bella y nos giramos hacia el sacerdote, bella y yo simplemente nos mirábamos a los ojos mientras como un murmullo sordo se escuchaba la voz del sacerdote diciendo las palabras que nos unirían eternamente
Bella Nov.
Nerviosa, asi había estado hasta que estuve al lado de Embry, solo con mirarnos, se me había ido todo el nerviosito que había sentido horas antes, y ahora aquí estaba escuchando a palabras del sacerdote y con mi mirada fija en la cara de Embry
-Isabela Swann, aceptas a Embry call como tu esposo, para amarlo, respetarlo, y seguir las tradiciones quileutes hasta que la muerte los separe-dijo el sacerdote mirándome
-si acepto-dije tomando el anillo de la mano de Jacob antes de decir mis votos- yo Isabela Marie Swann,-comencé a colocar el anillo en su dedo- te acepto a ti Embry call como mi esposo hasta que la muerte nos separe
- Embry call, tu acepta a Isabela Swann como tu esposa para amarla, respetarla, y seguir las tradiciones quileutes-dijo mirando a Embry
- yo acepto-dijo Embry tomando el anillo- yo Embry call, te acepto a ti Isabela Marie Swann como mi esposa para amarte hasta que la muerte nos separe
Sonreí y Embry lentamente coloco el anillo en mi dedo, nos miramos fijamente a los ojos
-os declaro marido y mujer, puedes besar a la novia-dijo el sacerdote- le presento a los señores call
Embry tomo mi rostro entre sus manos y me beso, nuestro beso paso lento y tiernamente a ser uno apasionado mientras la gente estallaba en aplausos
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