Capitulo XXI: se mi compañera  eterna

Embry Nov.

Estaba nervioso,  hoy después de cinco años junto a bella afrontando todo los que nos ha ocurrido, hoy al fin Daria el paso final, todos los de la manada me habían ayudado a preparar el lugar de los acantilados mientras  que los chicos me ayudaron a elegir el anillo perfecto para bella, suspire sentándome en el salón esperando a bella.

-¿Embry?-musito bella parada frente de mí

-vaya pero si estas preciosa-dije sonriéndole, ella se veía perfecta en su vestido junto a los accesorios que Alice le había enviado-nos vamos

-vamos-dijo

Sonreí mientras salíamos de nuestra casa hacia el auto, le abrí la puerta del copiloto mientras caminaba hacia la puerta del conductor y subía

-puedo saber donde vamos –dijo  mirándome

-es sorpresa-dije

-Embry, no me gustan las sorpresas-lloriqueo

-esta te gustara-dije mientras arrancaba el auto

 Conduje por las calles lluviosas del pus y Forks, los cuales no han cambiado nada en estos últimos años, el paisaje pasaba muy borroso a nuestro alrededor, mientras bella refunfuñaba el hecho de no saber a donde íbamos, conduje hasta un lujoso restaurante de Port Ángeles, detuve el coche mientras bella  abría  los ojos como platos

-Embry… este lugar es carísimo-repecho bella mirándome

-calma bells… no te quejes todo te va a gustar-dije abriendo mi  puerta para bajar  del auto

Baje del auto cerrando mi puerta y caminando hacia la de ella abriéndola y teniéndole una mano sonriendo, bella tomo mi manos y nos dirigimos hacia el restaurante, entramos y nos dirigimos hacia la  entrada

-buenas noches, ¿tienen reservación?-dijo mirándonos

-si-dije

-nombre por favor-dijo

-call-dije simplemente

-OH claro sígame-dijo  guiándonos hacia unas mesas privadas-  ya le vendrán a atender

Bella y yo nos sentamos  mientras nos mirábamos a los ojos, todo era especial esta noche era especial para nosotros, la llegada de la camarera interrumpió nuestro silencio

-hola soy Annie y serré su camarera  ¿Qué desean ordenar?-dijo mirándome

-ravioles de setas-dijo bella con el ceño fruncido

 Después de unos minutos la camarera trajo nuestras órdenes,  bella comía en silencio, al igual que yo pero por mis nerviosismos, suspire

-¿paso algo Embry?-dijo mirándome

-hummm....... si-dije mirandola- ¿quiero pedirte algo?

-¿Qué cosa?-dijo curiosa

Es ahora o nunca, pensé mientras  metia la mano a mi bolsillo del pantalón y sacaba la pequeña cajita, donde estaba el anillo, coloque la cajita entre sus manos y la mire

-isabella-dije  abriendo la cajita- te he amado desde nuestra primera mirada que nos unio , eres mi mundo, mi todo, no puedo vivir sin ti  ni tu presencia-suspire mirando sus chocolatados ojos- me harias el honor de casarte conmigo

-claro que si acepto embry-dijo lanzandose a mis brazos