Mi Princesa Gitana (+18)

Autor: aliceancuhal
Género: Romance
Fecha Creación: 02/08/2013
Fecha Actualización: 13/12/2013
Finalizado: SI
Votos: 6
Comentarios: 67
Visitas: 26308
Capítulos: 21

California del siglo XIX.

Alice es una gitana a la que han cogido presa y es vendida a un burdel. Jasper Whitlock, el soltero más codiciado de la ciudad. Al encontrarse el la comprara y la convertirá en su esclava. ¿Pasara algo más entre ellos?

Edward Whitlock casado con su joven esposa Isabella, estan esperando un hijo. ¿Todo ira como tenian planeado o el futuro les deparara otra cosa?

Rosalie Hale, despues de ser violada es repudiada por su familia y empieza a trabajar en el negocio "más antiguo" conocido. Emmett será su salvacion... o su perdicion.

 

Todos los personajes son de Stephenie Meyer, excepto alguno que he sacado yo.

 

Mi twitter: @Angy_sp07

Imágenes del fic

TRAILER

 

 

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 3: Negación y Rosalie

Cuando Alice entró el señor Whitlock tenia su torso completamente desnudo. Una fina capa de vello rubio se alojaba en supecho haciendo un triangulo que descendia en otra fina línea que surcaba su estomago perdiéndose en sus pantalones. Alice jams había visto tanto de un hombre.

"Dejaré el vaso y me iré lo más rápido que pueda" Penso Alice. Pero Jasper no tenia esas intenciones. La muchacha se apresuro a dejar el vaso encima de una mesilla de noche situada al lado de la cama. Cuando se giro para irse el señor Whitlock estaba delante de ella.

-¿Dónde va tan deprisa señorita…? –Fingio no saber el nombre de la chica.

-Alice –dijo automáticamente- Tengo trabajo señor y debo atenderlo.

-Tu trabajo acaba de cambiar. Acercate mujer –Alice vacilo durante un momento, pero finalmente fue en dirección del hombre rubio que se había alejado unos pasos.

Jasper se regocijaba viendo como ella se acercaba. Esta noche se lo iba a pasar muy bien sin la necesidad de María. Sin previo aviso la agarro de la nuca y empezó a besarla apasionadamente. Noto que ella se resistía y empujaba el torso desnudo con sus manos para alejarlo de ella, pero de nada servia porque el hombre era mucho más grande y fuerte que ella.

Entonces Jasper sintió un fuerte dolor en la entrepierna. Alice le había dado una patada en sus partes bajas. Por puro instito bajo sus manos hacia la zona adolorida, algo que aprovecho Alice para huir. Su fuga no duro mucho porque Jasper la cogio de su largo pelo, seguidamente le preto con fuerza el brazo y la tiro bruscamente a la cama.

-¡Niña estúpida! Tu no sabes con quien estas jugando –Dijo Jasper enfurecido posicionándose encima de ella. Y Alice hizo lo que toda mujer en su situación gritar como una loca, pero Jasper acallo sus gritos besándola y se aseguro de que sus rodillas estuviesen apartadas del lugar todavía sensible.

En los ojos de Alice se veía el temor que no había sentido en todo el día. Empezo a lanzar patadas, a arañarle, pero seguía sin servir de nada. Entonces le mordió todo lo fuerte que pudo en el labio inferior provocando que de él saliese sangre.

-¡Víbora! Ramera ahora si que te vas a enterar –La sonora bofetada sono en toda la habitación y fue tal que casi perdió el sentido. El empezó a desabrocharle los lazos del vestido rojo que llevaba.

Ella todavía se removía cuando se abrió la puerta y por ella entro Carmen alarmada por los gritos.

-¡Jasper! Largate ahora mismo de aquí. Me lo prometiste, dijiste que no la forzarías. –Decia Carmen horrorizada por lo que estaba ante sus ojos.- Acabas de romper toda la confianza que tenia en ti.

-Carmen… -Intento tranquilizarla Jasper al ver en sus ojos el dolor.

-Nada Jasper. Vete ahora mismo. –La miro, después miro a Alice que observaba la escena encogida y asustada como un conejillo que estaban a punto de asesinar y finalmente se fue. –Niña, por Dios. ¿Estas bien?

-¿Ibas a dejar que el se acostase conmigo? –Le dijo Alice con lagrimas en los ojos, pues por raro que pareciese había empeezado a confiar en esa mujer en tan solo un dia.

-Siempre y cuando tu quisieras. Ven te preparare una habitación, también mandare que te hagan un baño. Es mejor que descanses.

Alice asintió y se fue con Carmen por un pasillo oculto que no había visto antes, ni si quiera cuando le había obligado a ponerse aquel vestido tan vulgar. De allí paso a una habitación grande con una cama con doseles. Carmen salió y le pido a una de las mujers que preparasen un baño.

-Alice, tienes que estar tranquila. Yo voy a ocupar tu puesto como camarera. Rosalie, una de las chicas vendrá a ayudarte… en todo. –añadio la mujer. Cuando iba a desaparecer por la puerta se volvió- Recuerda niña, nunca confundas atracción con amor. –Sabiendo que es lo que le había pasado a ella misma.

Alice se quito el vestido, las horquillas del pelo, los zapatos hasta que se dejo solo las finas enaguas que cubrían su desnudez. Estuvo esperando un largo rato y empezaron allegar cubos de agua que iban destinados a la tina entibiando el agua fría para que estuviese a una temperatura perfecta. Cuando el baño ya estuvo completamente preparado entro una chica mas o menos de su edad. Su pelo era rubio, tenia unos bonitos bucles que le caian a lo largo de la espalda, unos ojos verdes llamativos y un cuerpo en dorma de reloj de arena.

-Hola –Saludo tímidamente la chica- soy Rosalie. –Alice se quedo impresionada por el tono de hablar que tenia. Solo había escuchado hablar asi a pocas personas y es cuando su pueblo había acudido a realizar los bailes a las ciudades cuando había fiestas. Esas personas pertenecían a la alta sociedad.

-Yo soy Alice. Tienes una forma de hablar muy distintiva como para que estes aquí –se atrevió a decir. Entonces la chica sonrio amargamente y dio un largo suspiro.

-Carmen me ha traido contigo porque yo puedo ayudarte con lo que ha estado a punto de pasarte. –Alice espero a que continuase con el ceño fruncido.- Hace un año y medio el señor Royce King II, mi prometido, -dijo con repulsión- en uno de los tantos paseos que dabammos a solas, me… meforzó -explico tan deprisa que a Alice casi le costo entender lo que dijo Mi familia, los Hale, al enterarse en vez de hacer justicia me repudiaron. No tenia a donde ir, estaba ya medio muerta de hambre cuando Carmen me encontró y me trajo aquí con ella.

Empecé a trabajar aquí, los primeros meses fueron difíciles, pero entonces llegó él. Emmett McCarty, desde que fui suya por primera vez solo estoy a su servicio. Él es… es…

-¿Te has enamorado de ese hombre verdad? –Le pregunto Alice que había estado escuchando la historia mientras Rosalie le había ayudado a bañarse. Rosalie se quedo sorprendida, luego pensativa y finalmente sonrio sonrojándose violentamente.

-Sí, supongo que en algún momento me enamore de él, pero por supuesto que no se lo voy a decir. Seguramente se alejaría de mi y no soportaría estar lejos de él.

-¿Y por que me cuentas todo esto? –Le pregunto a la rubia.

-Para que tengas fuerza y no te rindas y que sepas que siempre hay alguien que tal vez espera por ti y que has tenido suerte de que no te haya pasado nada y sobretodo no te deprimas como hice yo –Le sonrió Rosalie sinceramente cuando por fin acabo de darle el baño a Alice.

-Gracias Rosalie…

-Rose, solo Rose –la interrumpió- me has caído bien.

-Bueno pues gracias Rose, has sido muy amable conmigo. Le diré a la vieja Sounya que le hecho un mal de ojo a ese mal nacido.

-¿La vieja Sounya? –repitió riendo divertida Rosalie.- Tranquila ahora estoy contenta, si no fuese por ese bastardo nunca habría conocido a Emmett.

-¿Emmett sabe lo que te pasó? –Rosalie asintió en silencio.

-Y me costo muchas horas de sueño calmarlo para que no fuese a volarles la cabeza a Royce y a mi padre con una de sus escopetas –Le explico pícaramente Rosalie.- O al menos eso es lo que decía. Ya llevábamos dos meses "juntos".

Capítulo 2: El burdel Capítulo 4: ¡Perdón!

 
15014035 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 11065 usuarios