Pov Ness
Después de que mama dejara el cuarto Nate y yo igualmente nos fuimos para seguir con nuestras cosas.
Fui hacia mi habitación que estaba al final del pasillo y me tumbe en mi cama y observe por un rato mi cuarto; tenia tonalidades moradas en las paredes y muchos cuadros todos eran sobre la naturaleza y fueron pintados por mi abuela a base de fotografías que yo había tomado.
Algunas de las pinturas eran de Jake en forma de lobo lo había fotografiado infinidad de veces y le había pedido a mi abue que las hiciera, todas las demás pinturas eran de flores, ya que yo amaba las flores sobre todo las rosas y las margarita, eran mis favoritas.
Al ver los cuadros de Jake en forma de licántropo no pude dejar de pensar en el como era de costumbre, el y yo éramos novios desde hace un mes y era como un cuento de hadas; mi propio cuento de hadas y algo mejor no pude haber pedido. Lo amaba y lo amaba de sobre manera, amaba todo de el: su forma divertida de ser, su sonrisa, su carácter, su estruendosa risa, como se preocupaba por los demás… era simplemente perfecto.
Aun no podía creer que el se haya fijado en mi digo no soy nada fea pero no soy como tía Rose que parece súper-modelo. El decía que yo era su princesa de cristal.
Ese apodo me lo puso porque según el yo era tan frágil como el cristal de una joya y que yo gobernaba su mundo como si fuera una princesa.
Los gritos de mis padres me sacaron de mis pensamientos, se oían realmente alterados y eso significaba solo una cosa: Hillary. Había cambiado mucho de días hacia acá, ahora era muy fría, con un carácter de los mil demonios y se vestía siempre con ropas en tonos oscuros.
Algo debió haberle pasado aunque claro hace no mucho su novio bueno su ex novio había acabado su relación. Eso la destrozo porque antes no era así.
Estaba pensando en eso cuando sentí el chiflón de aire que se sentía cuando alguien pasaba corriendo a una velocidad inhumana seguramente a sido mi hermana como siempre.
Me asome por la puerta de mi habitación por acto reflejo pero ya no había nadie.
Cuando me iba a acostar de nuevo en mi cama escuche uno de los mejores sonidos del mundo; la moto de mi Jake. Salí corriendo a toda la velocidad que mis pies me permitían hasta que lo vi parado en la entrada con esa sonrisa tan hermosa que tiene mostrando sus blancos dientes.
Antes de que el pudiera si quiera decir una sola palabra me abalance sobre el a lo que este respondió cargándome y dándome vueltas en el aire con una facilidad impresionante.
-Creo que me extrañaste princesa- dijo Jake en mi oído antes de soltar una estruendosa carcajada seguida por la mía.
-Pues si te extrañe mucho Jake, aunque claro que te vi ayer jeje- dije apenada por el drama que hice por no haberlo visto un día solamente.
-Yo también te extrañe hermosa- dijo Jake dándome un beso enormemente dulce en los labios haciéndome sentir en la nubes, como siempre que estaba con él
.
|