Soy un idiota. Nunca me había pasado algo así, podía hablar con chicas lindas sin problemas, que es lo que tenia ella para hacerme quedar como un zopenco? Seguramente si no hubiera actuado así habríamos platicado agradablemente sobre música, había dicho que tenia buen gusto musical y bueno a ella le encantaban los Beatles, claramente había algo en común, luego de nuestra agradable conversación en el ascensor, la hubiera invitado a tomar un café o a cenar, nos hubiéramos conocido mas, nos haríamos amigos y luego pues todo podía pasar.

Pero no, mi yo adolescente y patético había decidido salir a la luz y me había dejado en ridículo frente a Bella. Ahora tenia que buscar una ocasión para reivindicarme y demostrar que estoy bien de mis capacidades mentales.

Pase a comprar comida china de regreso a mi departamento, llegue y me tumbe en el sillón a comer y ver la tele, mientras lo acompañaba con siempre amiga cerveza. Después de ver unas cuantas películas, me dirigí a mi cuarto haber si podía dormir temprano, si, así de aburridas son mis tardes después del trabajo, seguramente ahora le dan la razón a Tanya y creen que debería de salir con ella no?

Justamente cuando me iba a meter a la cama el teléfono comenzó a sonar, me estire para tomarlo del buró.

-Diga?

-Hola hermanito. Como estas?- contesto mi hermana Alice con una voz que conocía muy bien.

-Lo que tengas que decir dilo Alice, no andes con rodeos.- le dije acostándome en la cama.

-Uy siempre tan arisco, ni porque soy tu hermanita. Pero bueno hable con Emmett hace un rato y me contó sobre la nueva chica.

-Enserio que le afecta los chismorreos de la oficina, por eso se llevan tan bien verdad?

-Calma, solo me interesa lo que pasa en tu vida y pues como tú apenas y llamas, me tengo que enterar por alguien.- aseguro.

-Si, seguro.

-Créeme si quieres. Ahora cuéntame que hay con esa chica?- inquirió.

-Lamento aburrirte Alice, pero no hay nada que contar, la chica llego hoy, no soy tan rápido.

-Uy Edward Cullen esta perdiendo el toque.- se burlo, rodeé los ojos.- Pero bueno, creo que mañana te veré, subiré a dar una vuelta para ver que hay de nuevo.

-Alice porque sientes la necesidad de meterte en la vida de todos?

-No es eso, tú nunca entenderías. Pero bueno me voy, voy a salir a cenar con Jasper, te veo mañana hermanito.

-Desgraciadamente.

-Tonto, adiós.

-adiós enana.

Después de eso colgamos. Como siempre mi hermana enterada de la vida de los demás con la ayuda de Emmett, a veces me dan ganas de sugerirle a Aro que lo coloque en la sección de chismes, creo que funcionaria muy bien. Mañana tendría que lidiar con él y mi hermana haciendo preguntas y tratando de interferir. Alice trabaja en una revista de modas, que tiene sus oficinas unos pisos debajo de las del periódico, así que fácilmente podía tomar el ascensor y darnos una visita, como lo haría mañana.

…

Llegue al trabajo temprano con mi dosis diaria de café, iba en el elevador y casi me doy de topes en la pared recordando lo sucedido aquí. La puerta se abrió dejando a la vista la recepción, Tanya ya había llegado, seguramente estaría enojada por mi actitud de ayer, pero ya era hora que se diera cuenta que no estaba interesado.

-Buenos días.- salude con cortesía.

-Ah, hola.- saludo con indiferencia aun con los ojos pegados a los papeles en su escritorio.

No le preste mayor intención y seguí mi camino, llegue a mi cubículo, prendí mi computadora y cuando se inicio abrí el reproductor y me puse a escuchar música, haciéndome ajeno a lo que sea que sucediera en la oficina.

-Que tal chico?- saludo la estruendosa voz de Emmett.

-Me podrías decir porque intercambias chismes de oficina con mi hermana?- reclame de inmediato.

-OH, yo dormí muy bien Edward gracias por preguntar.- lo mire feo- ok, ya sabes como es esa enana, siempre quiere sacar información de todo.

-Creo que en lugar de meterse en mi vida, tú deberías buscar una novia y ella una amiga. Así se mantendrían ocupados.

-Bueno, ya, lo siento.

-Prepara tus mejores chismes, nos hará una visita mas tarde.

-Enserio? Eso es genial!

Yo me reí y rodee los ojos.

-Enserio Emmett, una novia urgentemente.- le sugerí ahora burlándome de él.

El resto de la mañana la pasamos trabajando, Bella llego a los pocos minutos después de Emmett, podía verla desde mi lugar de trabajo, me sentía un poco psicópata observándola cada que podía, pero que mas da, un defecto mas ante ella no importaba. Se veía preciosa con su falda negra, tenia unas piernas de infarto y su cabello caía en suaves ondas por cada lado de su rostro, que estaba maquillado de forma natural, no necesitaba maquillaje, así era perfecta. Como si mi obsesión no fuera suficiente, había memorizado sus tics, cuando se concentraba mucho fruncía su ceño, su gesto para cuando estaba confundida era morderse el labio y ladear su boca. Ahora mismo me podría considerar un enfermo.

Mi escrutinio hacia Bella se vio interrumpido cuando la temida visita llego.

-Que tal, como están mis hombres favoritos?- dijo abrazando a Emmett y luego a mi.

-Ahora que llegaste mucho más feliz.- dije con sarcasmo, ella entorno los ojos.

-Detecto tu sarcasmo hermanito. Pero sabes que en el fondo me adoras.- dijo revolviendo mi rebelde cabello.

-Somos hermanos, que se le puede hacer. Es mi obligación quererte.- bromee dándole una sonrisa.

-Y bueno, quien es la chica afortunada de tener tu atención?- cuestiono sin rodeos.

-Tenias que arruinar el momento de fraternidad verdad?

-Todavía de que estoy halagando te pones así. En verdad hermano, tienes el humor de un señor de 50 años.

-Y también lo hábitos. Creo que el que necesita una novia es otro.- interfirió Emmett. Le hizo un gesto a Alice con la mano para que se acercara.- La chica es aquella.- le anuncio señalando hacia donde estaba.

-Tan siquiera podían ser un poco mas discretos.- demande hundiéndome más en mi silla y tapando mi rostro con mis manos.

-Es linda y se ve que es una chica simpática. En verdad creo que los rumores de la oficina son falsos Emmett.- dijo Alice, dio un gritito ahogado y destape mi rostro y Alice tenia los ojos abiertos desmesuradamente, la cuestione con la mirada.- ups, creo que se dio cuenta de que la observaba.

-Alice!- le regañe molesto.

-Ya no esta.- dijo Emmett, ladee la cabeza para verificar y efectivamente ya no estaba- y bueno varios concedían en que no era agradable, yo solo te conté lo que escuche.

-Pues creo que exageran.

-Si, exageran. No es para nada engreída.- asegure.

-Ah si? Y como estas tan seguro.

-Pues porque ayer me la encontré en el elevador y hable con ella.- tan pronto las palabras salieron de mi boca supe que había sido un error.

Ahora Alice y Emmett me miraban expectantes por saber el resto de la historia, planee la acción evasiva, abrí mi cajón y saque mi cajetilla de cigarros y me levante.

-Ahora tengo que ir a alimentar mi adicción.- dije y camine rápidamente hacia el balcón que estaba del otro lado de la oficina, a mis espaldas escuche la voz de mi hermana.

-No te salvaras Edward Cullen, tendrás que contarme.

Hice como que no la escuchaba y seguí mi camino, abrí la puerta corrediza y salí al aire fresco, me recargue en uno de los muros sacando un cigarrillo y prendiéndolo.

-Hola- dijo una voz que reconocí de inmediato.

Voltee y ahí estaba Bella, parada con los brazos cruzados sobre su pecho y sonriéndome de manera agradable. "Ok Edward concéntrate, esta vez no puedes quedar como un tonto"

-Hola.- dije. Ok por lo menos había dicho algo.

-Eres el chico Beatles verdad?- cuestionó. Genial ni siquiera sabía mi nombre.

-Edward.- me presente ofreciéndole mi mano, ella la tomo y su piel era tan suave, incluso sentí un pequeño cosquilleo que fue subiendo por todo mi brazo.

-Que bien ponerle nombre al chico con buen gusto musical. Me presentaría pero creo que estuviste presente en la junta no?

-Si.- dije feliz de que me halla notado. Dios parecía que había vuelto a la secundaria!- quieres uno?- le ofrecí la cajetilla.

-Si, gracias.- dijo tomando uno, lo encendí.- gracias.- dijo de nuevo inhalando el humo.

Piensa Edward, no te quedes callado de nuevo, no des la impresión de que eres un adolescente nervioso. Busca un tema seguro.

-Y bien… cual fue el motivo de que te mudaras?- cuestione.

-Mmm... Bueno principalmente el aburrimiento, tu sabes cambiar un poco de aires y de clima también.- me explico y le dio otra fumada a su cigarro.

-No te agradaba el clima en Phoenix?- genial ahora estaba hablando del clima, un tema demasiado aburrido, pero era mejor que no decir nada no?

-Me aburrí de él, desde que nací viví ahí. Ya hacia falta algo nuevo.

-Si tienes razón. Y te mudaste con alguien? Algún familiar?- esperaba que no me encontrara un poco chismoso.

-No, también quise independizarme, mi madre se acaba de casar de nuevo.- contó.

-Y el tipo no te agrada?

-No, no es eso. Phil es genial, me cae muy bien, pero quise darles privacidad en su vida de casados.

-Ah, ok y tu padre?

-Él de hecho vive en un pueblo cercano llamado Forks. Solo que también esta casado, me parecía extraño inmiscuirme en otra relación, además esta mi hermanito Connor de 12 años, lo adoro.- dijo con adoración.- tu tienes hermanos?

-Si, tengo una pequeña hermana, se llama Alice. También la adoro, pero a veces puede ser exasperante.- dije haciendo una mueca.

-Porque?

-Digamos que sufre de excesiva animosidad, es un poco hiperactiva.

-Bueno y cuantos años tiene?

-21.- conteste.- de hecho estoy huyendo de ella en este momento, gusta meterse en mi vida con frecuencia.

-Oh! Era la chica que estaba en tu cubículo?- pregunto. Genial si había notado que la miraba, hice una mueca.

-Si, esa es mi hermana. La animosa Alice!- dije con falso entusiasmo, Bella rió.

-Si, se ve animosa- me reí- aunque me dio un poco de miedo el modo en que me observaba.- genial, si lo había notado.

-Disculpa si te hizo sentir incomoda. – me disculpe.

-No te preocupes, me acostumbre por la forma en que tú me mirabas antes.- dijo y mis mejillas de repente se sintieron muy calientes. Mierda! Pensé que había sido cuidadoso, doble mierda!

-Yo…este…- balbucee.

-No te preocupes…-pidió restándole importancia y riendo, le dio la ultima fumada a su cigarrillo antes de apagarlo- ahora tengo que volver al trabajo, gracias por el cigarro.

-Por nada.- dije avergonzado.

Fue a la puerta y la abrió.

-Era linda la forma en que mirabas.- murmuro antes de desaparecer por la puerta.

Me quede de nuevo plantado en el piso, sintiendo varias sensaciones, entre vergüenza, felicidad y bueno sinceramente estaba orgulloso de mi mismo por haber mantenido una conversación decente esta vez. Aunque me golpee mentalmente por haber permitido que se diera cuenta de que la observaba, aunque bueno su última frase hizo que sonriera como un tonto.

Apague mi cigarrillo y también entre nuevamente aun con la sonrisa idiota en mi rostro. Llegue a mi cubículo, afortunadamente mi hermana ya no estaba así ya no me cuestionaría la evidente expresión de mi rostro.

-Wow picaron, a que se debe tu sonrisa? Aunque lo intuyo viendo entrar a Bella hace un momento.- no estaba mi hermana pero aquí estaba Emmett para hacer su trabajo.

-Si, te imaginas entonces porque preguntas.

-Quiero saber detalles, no solo suposiciones.

-Pues te quedaras con la duda, se que voy a tener que contárselo a mi hermana también y no pienso contarlo dos veces, así que te aguantas.

-Oh, enseguida llamare a Alice.-dijo.

Me incline para ver su computador que me había llamado la atención.

-Wow, una pagina de citas?- pregunte riéndome.

Enseguida Emmett cerró la ventana y colgó el teléfono.

-Bueno, ya sabes tu dijiste que necesitaba a alguien.

-Pero una pagina de citas? Enserio?- me burle mas.

-No te burles. No se que hacer para conocer chicas.- confeso.

-Emmett tienes que salir, conocer gente, tu sabes ser sociable.

-Sabes que eso no se me da muy bien, además las únicas chicas que se me acercan son cabezas huecas que solo sirven para sexo, pero ya me aburrí de eso, estaba bien en la universidad, pero quiero algo serio.

-Umm… pues desafortunadamente no soy el mejor para aconsejarte, solo tengo que decir que las cosas llegan cuando tienen que llegar. No hay que forzar las cosas y mucho menos suscribirte en una pagina de citas.

-Ok. Esperare, solo no sigas diciendo que necesito una novia, me presionas y en todo caso yo te puedo decir lo mismo.- dijo señalándome.

-Creo que mi momento llego.- dije volteando a ver hacia la oficina del jefe.

Escuche la risa de Emmett, pero no le preste atención. En ese momento Bella volteo y me sonrío, le devolví la sonrisa embobado. Si, mi momento había llegado.

Bueno aquí el segundo capitulo, que les ha parecido la historia con estos primeros capítulos que he subido no se olviden de sus comentarios y votitos que serán bien recibidos.

Nos leemos pronto, saludos