Bella POV
Ya han pasado tres días desde que encontré el anuncio en el periódico, tres días en los cuales me ha resultado casi imposible localizar al dueño o dueña del teléfono. Pero ayer, cuando ya me iba a dar por vencida contestaron el teléfono.
- ¿Diga? – contestó una voz muy estridente desde el otro lado de la línea.
- Hola, llamo por lo del anuncio , en el que buscan niñera –
- Pues te debes de haber equivocado porque en esta casa no necesitamos los servicios de ninguna extraña – después de haberme dejado estupefacta la muy fresca y me colgó el teléfono. Yo no entiendo a la gente.
Desde ese día ya no he vuelto a insistir, pero no puedo entender cómo puede haber gente tan maleducada en el mundo. Pero bueno haya cada uno con lo suyo.
Después de esa ácida conversación, sigo mirando el periódico y me doy cuenta de que necesitan una camarera en la cafetería Newton’s.
Tanya POV
He de admitir que soy una chica con suerte. Tengo todo lo que siempre desee, una gran casa, dinero y lo mejor de todo, la fama. Gracias al tonto de mi marido y de la mocosa esa. No puedo entender cómo puede quererla tanto. Seguro que si supiese la verdad sobre la niña me echaría de la casa, pero como eso no me interesa mejor me lo guardo para mí misma.
Aunque debo decir que me resulto demasiado fácil engañar al pobre de Edward. La noche en la que lo conocí la suerte estuvo de mi lado, ya que cuando aquella noche estaba muy borracho. Entonces en cuanto lo vi un plan se me pasó por la cabeza. Después de invitarlo a unas cuantas copas más y de asegurarme que al día siguiente no recordaría nada, lo llevé a mi departamento, una vez allí lo tiré sobre la cama y lo desnude. Más tarde, después de hablar con mi amor y decirle el plan que tenía en mente, me fui a dormir, eso sí, tuve que desnudarme para que cuando el despertase se pensase que habíamos mantenido relaciones.
Y por lo visto la farsa me ha servido de maravilla, porque aquí estoy yo con mi amor James, quien es el verdadero padre de Sophie, y los dos estamos disfrutando de los placeres del dinero de Edward. Lo que también ha ayudado mucho, es que James tiene los ojos verdes y el pelo cobrizo, la niña ha sacado esos dos aspectos de James pero para la gente que no sabe la verdadera historia, la niña se parece a Edward. Que ingenuos.
Pero hay algo que me preocupa. Últimamente Edward anda muy pendiente del teléfono como si estuviese ansioso porque alguien llamara. Por eso, me dedico a investigar sobre que puede ser, y me doy cuenta que ha publicado un anuncio buscando a una niñera para la niñata. Esa idea no me gusta nada, ya que si entra otra persona en la casa se podría dar cuenta de la farsa y arruinarme la vida.
Ring, Ring…
- ¿Diga? –
- Hola, llamo por lo del anuncio, en el que buscan niñera – Así que esta chica quiere ser la niñera pues no se lo voy a permitir.
- Pues te debes de haber equivocado porque en esta casa no necesitamos los servicios de ninguna extraña – Le respondo de una manera muy ácida para que no vuelva a llamar.
Una vez que ya he terminado con la chica me dedico a divagar por internet, donde consigo encontrar el número del periódico y cuando convenzo al director que quite el anuncio cuelgo, y suelto un gran suspiro. Parece que todo vuelve a su normalidad, o por lo menos eso espero.
Edward POV
Ya ha pasado un mes desde que puse el anuncio en el periódico, pero nadie ha llamado. Estoy realmente desesperado, mi princesa cada día está más triste porque necesita el calor de una madre. Hoy es sábado y tengo pensado invitar a desayunar a Sophie a la cafetería Newton’s, se que le encanta aquel lugar, aunque últimamente no hemos podido ir. Así que mejor voy a despertarla y a darla la sorpresa.
- Hola mi vida, es hora de levantarse – le digo mientras ella se hace la remolona en la cama.
- Un ratito más papi –
- Es que si tardamos mucho, no podremos ir a desayunar al sitio al que te gusta ir … - antes de que terminase de decir la frase mi princesa ya estaba saltando encima de la cama
- ¿Iremos a Newton’s? Yupi –
En un visto y no visto, ya la tenía vestida, peinada e impaciente esperando a que terminase de arreglarme.
Una vez en el coche, me obliga a poner su CD de las canciones Disney. Así que con la canción del Libro de la Selva nos dirigimos hacia la cafetería.
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