Bella Swan:

-Hola muchachos- Saludo Edward educadamente.

-Hola – Saludo Jane algo sorprendida por su presencia- chicos, el es Seth.

-Hola- dijo el chico estrechando la mano de cada uno de los presentes.

-¿Qué hay Bella?- también me saludo cuando estuve cerca.

-Creí que no vendrías- dije nerviosa.

Su mirada se entristeció un poco pero fue solo un segundo.

-Cambie de planes- se limito a contestar encogiéndose de hombros.

-Ah bueno, espero que te diviertas- murmure mas tranquila.

-Gracias- me regalo una cálida sonrisa.

Bajamos algunas otras mochilas y comenzó la excursión, caminamos unos cuantos kilómetros, Alice tomada de la mano con Jasper, Seth iba al lado de Jane y de vez en cuando le ayudaba a subir las rocas o la sostenía cuando casi caía. Yo iba algo atrás con Edward detrás de mi, nadie pronunciaba palabra alguna solo escuchábamos el alegre silbido de Seth.

Aquí es-anunciamos A  lie y yo al mismo tiempo.

-Muy bien, divisamos lo que debemos hacer- comencé a organizarnos- Allie, Jazz, busquen leña y hagan la fogata, Seth, Jane, levanten las tiendas mientras voy a pescar, Edward si quieres ayúdalos con las tiendas. También despejen el área para que quede confortable.

No espere respuesta de su parte, mejor me di la vuelta y hui al lago con mi caña y carnada, prepare todo rápidamente, lance el fino anzuelo al agua y luego me senté sobre una roca a esperar.

Estaba en mis ensoñaciones pero me sobresalte un poco al escuchar pisadas detrás de mi, aun así no voltee.

-¿Todo bien?- inquirió Edward cuando estuvo a mi par.

-Si- dije mirando al agua sin perder mi estado de serenidad

-¿te importa si me uno a ti?

Me encogí de hombros.

-¿vas a pescar?- pregunte lo obvio.

-Los chicos están bastante bien acompañados… no quise ser mal tercio-me explico- además Rosalie y su novio ya llegaron.

 Se situó a un metro de mi y rápidamente preparo su caña, luego la lanzo con precisión.

-¿te gusta mucho hacer esto?

-¿pescar?-pregunte y asintió- Si, me recuerda a mi niñez, mis…- trague el nudo de mi garganta- padres nos llevaban a mi hermana y a mi a diferentes lagos todo el tiempo. Ella apenas lo recuerda pero mis memorias son más claras, supongo que es lo único que me han dejado.

-¿ellos…?- susurro sin completar lo que iba a decir.

-Si, murieron en un accidente cuando tenia ocho años- relate con nostalgia.

-Lo lamento.

-Yo también.

-Pero, ¿ocho? ¿Cómo hiciste para sobreponerte a la situación a esa edad tan corta?

-No fue fácil- admití- menos teniendo una hermana mas pequeña, mis… tíos nos adoptaron y criaron desde entonces, pero también murieron, solo que ahora éramos adultas.

Claro solo la mitad de esa historia era verdad  pero debía contar esa versión en lugar de decir que un maniático nos recluto para ser asesinas a sueldo.

-Parece que has tenido una vida difícil- continúo.

-No importa- objeté- eso me ha hecho mas fuerte.

-Tienes razón- dijo de acuerdo.

Era extraño notar como me había desenvuelto con él  de manera tan normal. Le había contado parte de la tragedia de mi vida antes de darme cuenta.

Al ver que la conversación llevaba un rumbo  implícito hacia mi decidí evadirlo.

-Y ¿por qué decidiste venir después de todo a la excursión?- hice una pausa- supongo que una persona como tu tiene una vida social bastante activa.

-¿una persona como yo?- se pregunto a si mismo con una sonrisa, luego se puso serio- debo confesarte algo Bella,  así era hasta hace poco, quizás no debería decírtelo pero da igual me has contado algo de tu vida, me toca a mi.

Asentí para que continuara, tenia curiosidad de lo que me iba a decir.

-Durante diez años había cambiado de chicas como de ropa.

Baje la mirada con decepción , no debería haberme sorprendido, Edward prácticamente tenia la palabra “seductor” tatuada en la frente, hasta yo estuve a punto de caer en sus redes cuando lo conocí y eso es mucho decir.

-Hum- no tenía otra cosa que opinar.

-Hace tres semanas en un día como hoy tendría dos citas para esta hora- continuó.

-¿y porque has cambiado en eso?- inquirí esta vez con verdadera curiosidad.

-Esas chicas jamás llenaron el vacio que sentía aquí- señalo su corazón- y estaba cansándome de jugar con ellas, de que mi madre se avergonzara de mi actitud, al igual que mi padre,  y que Jasper se reprimiera respecto a interesarse en chicas por temor a terminar igual que yo… solitario al final del día.

Me atreví a levantar la vista y mirarle. Tenía los ojos clavados en sus pies con la vergüenza pintada en el rostro

-Pero aun no lo entiendo, ¿Por qué lo hacías? ¿Cuál es ese vacio que querías llenar?- no sabia si me estaba pasando con mis preguntas, si era así,  él no se molestó,  solo cambio su expresión de vergüenza por una de completa tristeza.

-Por… Tanya- su voz era solo un susurro, no hable por temor a que no quisiera continuar y porque me preguntaba ¿Qué tan importante debió ser para el esa chica? ¿Quién era?- ella era una parte de mi vida que no podía dejar ir. Me lastimo demasiado y desde entonces ninguna chica había llamado mi atención lo suficiente como para creer en…- dejo de hablar.

Me pregunte que estaba a punto de decir, seguro ya se había arrepentido de contarme sus cosas, aunque me dolía que su confianza se hubiese esfumado.

-Hasta ahora siento que he comenzado a olvidarla gracias a que conocí a alguien.

Lauren, esa rubia teñida y tonta debía ser a quien se refería.

-Ese alguien debe ser especial- opiné.

-Y que lo digas- volteo a verme y me sonrió, quise hacer lo mismo pero solo pude curvar la comisura izquierda de mi boca.

Desvié la vista y me quede callada. Permanecimos en silencio unos minutos más. Yo estaba a punto de preguntarle si era Lauren a quien se refería.

-¿Bells?- nos interrumpió mi hermana danzando hacia nosotros- lamento interrumpir pero ya casi todo esta listo.

-No te preocupes, ya te seguimos.

Mire nuestra pesca, nos había ido muy bien, ya teníamos lo suficiente para todos y mas. Este lago era muy abundante en truchas.

-Bueno- y se fue a toda prisa.

Mientras recogíamos las cosas me pregunto.

-¿sigues creyendo que soy idiota? Porque de verdad lo merezco.

-No- negué de inmediato- yo jamás pensé eso, además eres solo una persona herida que se esta recuperando del pasado y sus malvadas garras.

-Me alegra que lo entiendas- concluyó.

La verdad no entendí bien lo ultimo que dijo, ¿Qué importancia tenia lo que yo opinara de el? Con que me cayera bien como amigo era suficiente  para tener éxito en la relación que teníamos.

Para cuando atardeció apenas estábamos comiendo alrededor de la hoguera, era algo muy ameno estar con los demás, aunque a la vez me sentía abandonada ya que; Alice y Jasper estaban bien juntos platicando de algo, Jane y Seth se conocían mejor entre bocados y que decir de Rose y Emmett, dándose de comer en la boca uno al otro, al poco rato no resistí verlos mas porque sentía que invadía su intimidad, así que me limite a ver a mi alrededor, pero por supuesto no podía evitar de vez en cuando ver a Edward y no es que eso fuera malo, sino el echo de que cada vez que volteaba a verlo el hacia lo mismo y atrapaba mi mirada con la suya, tan penetrante que solo aguantaba sostenerla dos o tres segundos antes de bajar mis ojos y clavarlos en el suelo. Así se fue la tarde hasta que cayó la noche y la oscuridad llegó con ella.

-Creo que es hora de una buena historia de terror- propuso Emmett con una ancha sonrisa luego de dar un trago largo a su cerveza.

-Concuerdo contigo amigo- dijo esta vez Seth.

-Anda Em, asústanos- dijo Rose con tono burlón.

Los demás nos quedamos callados y expectantes.

-Hubo una vez una pareja que se fue de excursión al bosque…- y continuo una historia bastante interesante y llena de suspenso.

Clave un bombón en un palito y lo puse al fuego mientras contaba su escalofriante relato. Todos estaban muy atentos a lo que decía Emmett, quien efusivamente subía y bajaba su tono para ponerle más  intensidad.

Cuando termino, todo se quedo en silencio y de pronto un sonido nos sobresalto a todos, miramos a todos lados pero solo vimos a Emmett doblándose de risa, al parecer había lanzado una piedra para asustarnos y lo consiguió, ahora todos reíamos junto a él.

-Vaya Emmett, creo que tendré pesadillas- bromee animadamente con el mientras bebía de mi jugo de uva.

- Entonces hice bien mi trabajo- su sonrisa era contagiosa.

-Bueno, bueno- interrumpió Jasper- nos has puesto la piel de gallina Emmett, ahora es tiempo de ponernos románticos.

El grandulón levanto las cejas y luego asintió, Seth también se veía interesado y Edward le sonreía a su hermano. ¿Qué harían ahora? Mire a Alice pero ella también parecía confundida y eso que era tan intuitiva.

-¿Me ayudas Edward?- pregunto el rubio.

-Por supuesto- respondió y se estiro hacia atrás para alcanzar un gran objeto negro.

Edward desenfundo una hermosa guitarra negra con detalles en color plata y la acomodo para comenzar a tocar. Jamás me imagine que fuera músico, ahora moría de ganas por escucharlo.

-Esta canción Allie es para ti, gracias por coincidir conmigo, amor mío.

Ella solo pudo sonreírle a su romántico novio. (http://www.youtube.com/watch?v=oZEiivy6quk)

“Soy vecino de este mundo por un rato
y hoy coincide que también tú estas aquí
coincidencias tan extrañas de la vida
tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio… y coincidir

Edward tocaba mientras la sedosa voz de su hermano cantaba esas hermosas palabras Al llegar al que parecía el estribillo, Edward coreo con su aterciopelada voz, pero cada vez que lo hacia su mirada se posaba en mi, como si estuviera cantándome.

Si navego con la mente en los espacios
o si quiero a mis ancestros retornar
agobiado me detengo y no imagino
tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio… y coincidir

Si en la noche me entretengo en las estrellas
y capturo la que empieza a florecer
la sostengo entre las manos más me alarma
tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio… y coincidir

Ahora tenia un nudo en la garganta. Me pregunte si los demás también lo notaban pero de nuevo,  cada quien miraba embobado a su pareja. Al ver que ignoraban, decidí dejarme llevar por el momento y grabe con fuego en mi memoria cada nota musical que salía de las cuerdas del bello instrumento, mas que eso, grabe las letras entonadas que salían de la boca de Edward y por si fuera poco, grabe también su mirada.

Si la vida se sostiene por instantes
y un instante es el momentos de existir
si tu vida es otro instante... no comprendo
tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio… y coincidir”

Con tristeza observe que la canción llego a su fin cuando todos- sobretodo mi hermana- aplaudieron con entusiasmo a los talentosos hermanos.

-¡Gracias Jazz!- decía mi hermana entre enternecedoras lagrimas de felicidad- te amo, te amo- continuo entre besos.

Ver a Alice tan feliz y enamorada me hizo pensar que habría pasado si ella no hubiese luchado por su amor. No quería ni imaginarme lo infeliz que seria ahora. Pero mirarla ahí tan radiante valía la pena.

-Hey Ed- Emmett reclamo su atención.

Se acerco a el y le dijo algo al oído Edward sonrió y asintió.

-Bueno, Rose, se que no nos conocemos mucho pero tengo que hacer esto, esta canción, es para ti, me has cambiado la vida hermosa.

(http://www.youtube.com/watch?v=eo3Wkgrh_-o)

“Buenas noches, mucho gusto
eras una chica mas
después de cinco minutos
ya eras alguien especial
sin hablarme, sin tocarme
algo dentro se encendió
en tus ojos se hacía tarde
y me olvidaba del reloj
Estos días a tu lado
me enseñaron que en verdad
no hay tiempo determinado
para comenzar a amar
siento algo tan profundo
que no tiene explicación
no hay razón ni lógica en mi corazón
entra en mi vida
te abro la puerta
se que en tus brazos ya no habrá noches desiertas
entra en mi vida
yo te lo ruego
te comencé por extrañar
pero empecé a necesitarte luego
Buenas noches, mucho gusto
ya no existe nadie más
después de este tiempo juntos
no puedo volver atrás
tú me hablaste, me tocaste
y te volviste mi ilusión
quiero que seas dueña de mi corazón
Entra en mis horas
sálvame ahora
abre tus brazos
fuerte
y déjame entrar”

Edward me miraba de nuevo al cantar y tocar, pero ahora lo que importaba era que Alice, Jane, y yo estábamos boquiabiertas, Rose nos había dicho que ella y Emmett solo eran amigos con derechos ¿y ahora esto? Sinceramente se me hacia muy romántico pero no sabia que pensar. Mire a mi rubia amiga y tenia las dos manos en su boca, los ojos sonrosados e intentaba contener las lagrimas.

-Oh Em- dijo ella y lo abrazo.

Después de eso no dijeron nada, supuse que tendrían que aclaran hacia donde iba su relación y nosotros no debíamos escucharlo.

Estuvimos platicando entre todos un rato mas después de las hermosas serenatas, las mayoría de los temas que sacábamos ahora eran intrascendentes, solo bromas y anécdotas graciosas, hasta que decidimos que ya era bastante tarde y debíamos dormir.

Por supuesto siendo yo la mas “responsable” me asegure que los chicos durmieran juntos y todas las chicas durmieran en la misma tienda que yo. Extrañamente nadie puso resistencia, ni siquiera el par de amantes sexualmente activos.

Ya acurrucadas en las bolsas de dormir las muchachas aun no parecían estar satisfechas con el parloteo de la noche porque comenzaron a murmurar.

-Creo que te sacaste la lotería con Jasper- susurro Rose a Alice.

-Lo se Rose por eso lo amo tanto- respondió con un murmullo mi hermana- pero dime, ¿seguirás siendo solo la amiga con derechos de Emmett después de lo de hoy? Ustedes hacen una pareja tan hermosa…

-No lo se Allie- continuo la interpelada- él me gusta de veras y la química que tenemos es bastante además de que a pesar de su apariencia dominante puede llegar a ser bastante tierno.

-Eso ya nos quedo claro- comente esta vez yo.

-Pero sabes, nuestro trabajo es uno de los impedimentos que hay. Podrían separarnos de un momento a otro y seria muy doloroso- reflexiono mi rubia amiga.

-Rose tiene razón Alice, aunque Emmett me cae bastante bien, la inestabilidad de nuestra profesión podría llegar a ser un problema peligroso- opine- te lo digo yo, que pase por eso, esa también es una de las razones por las cual no le di una oportunidad a Jacob.

Se quedaron en silencio por mis palabras tan inesperadas, luego Rose volvió a hablar.

-Ni a Edward… aunque el es un chico perfecto para ti, el hecho de que trabaje para el bando enemigo lo hace muy peligroso. Maldita sea nuestra jaula de oro- mascullo con pesar.

-Si, de verdad así es- dije.

-Pero no puedes evitar decir que te agrada- hablo Jane por vez primera.

Y yo que ya la creía en los brazos de Morfeo.

-Jane creo que estas en lo correcto- agrego Alice- Bella, ¿de que hablabas con Edward cuando los interrumpí mientras pescaban?

Los intentos de mi hermana por ponerme en evidencia no cesaban. Decidí decirles la verdad para que ya no me molestara con el tema.

-Él me estaba diciendo que estaba enamorado de la chica rubia que iba con él, el día de la feria- bueno, no lo dijo con esas palabras pero yo lo interprete así.

-¿de verdad?- Rose y Jane preguntaron incrédulas.

-No se de quien hablan- replico mi hermana molesta desde su lugar.

-Si, así que dejen de hacerse fantasías tontas sobre Edward y yo por favor,

-Supongo que si- se rindió Alice- ni modo Bells, quizás aparezca alguien mas adelante. Aunque me gustaría conocer a esa tal rubia.

No dije nada. Continuaron hablando sobre la linda pareja que formaban Jane y Seth. Pero ella replico diciendo que ahora solo era amigos y que no quería quedarse con la primera persona que se lo propusiera. Entonces vino un flash a mi mente, quizás ese chico misterioso del otro di tenía que ver con sus palabras.

Hubo un momento en el que deje de oírlas y al dejar mi mente en blanco comencé a soñar de inmediato, en mi sueño tenia una misión y debía correr lo mas rápido que pudiera para alcanzar algo, pero cada vez mi objetivo se alejaba mas, hasta que legue al borde de un acantilado y al caer en mi sueño, mi cuerpo reacciono y salto despertándome agitadamente.

Pase mi mano por mis cabellos para apartarlos de la cara y volví a cerrar los ojos a ver si podía dormir de nuevo. No lo logre y el insomnio se hizo presente, las chicas estaban dormidas así que me sentí un poco claustrofóbica dentro de la tienda de campaña.

Me levante y me puse las botas de nuevo, me puse la chamarra y tome una de las mantas para salir al exterior la eche sobre mi hombro ya que un impulso extraño se había apoderado de mi.

Salí de la tienda y la ventisca  de la madrugada me golpeo con fuerza, pero no lo suficiente como para hacerme temblar.  Mire hacia arriba buscando solo una cosa; un gran árbol que trepar. Gracias al cielo la luna iluminaba lo suficiente como para no perderme. Luego de hacer un examen encontré uno perfecto que tenia gruesas y fuertes ramas en las que podría ver mejor el cielo, tenia tantas ganas de ver las estrellas brillantes que no me importo mi aversión a las alturas.

Avance a el, solo esperaba que el crujir de mi calzado contra la tierra y hojas secas de otoño no despertaran a nadie.

Me apoye en varias partes de la corteza para poder escalar con facilidad y llegue a el punto alto donde quería rápidamente. La rama no se movió ni un poquito cuando apoye mi peso sobre ella.

Mire hacia abajo, Si había subido un poco alto pero me sentí bastante a gusto en ese punto. Al escuchar unos sonidos mire con ansiedad al pie del árbol, había una persona ahí y ya estaba trepando para llegar hacia mi.

-¿Edward?- susurre pensando que lo estaba imaginando.

-¿Qué haces aquí Bella?- inquirió con una nota de diversión en su voz.

-Tengo insomnio y quería ver las estrellas- le explique- en la ciudad no se observan como aquí.

¿Por qué de pronto tenia esa necesidad de explicarle mis acciones?

-Es verdad- cada vez se acercaba mas.

-¿y tu que haces aquí?- exigí saber.

-No podía dormir y escuche tus pasos, creo que el insomnio se disfruta mas con compañía- agrego con dulzura.

-De acuerdo, siéntate y acompáñame- le invite.

 Con un ágil movimiento se sentó en la misma rama, solo que, por las dimensiones de esta quedamos muy cerca uno del otro, rozando nuestros costados.

El viento soplo y ambos nos estremecimos.

-Esto tiene sus desventajas- comento- hace bastante frio.

-Creo que eso tienes solución- sonreí y tome la manta que había colgado sobre mi hombro antes de salir.

La extendí para que nos cubriera a ambos.

-Gracias.

Nos silenciamos un minuto y luego reflexione la situación.

-Esto es un poco raro, de esta manera, aquí y como estamos, pareciera que hay gran confianza entre nosotros- opine.

-¿eso crees? Quizá si la haya- dijo.

-No. No lo creo, no te conozco bien- puntualicé.

-Bueno ahora es tu oportunidad, juguemos a las veinte preguntas.

-Mmm- dude- no lo se.

-No haremos otra cosa aquí arriba, anda, aprovechemos el tiempo.

-Esta bien- acepte- pero que solo sean… diez preguntas y tu también debes contestarlas o no vale.

Si preguntaba algo comprometedor yo no seria la única en contestar.

-De acuerdo- se tomo un minuto para formular su pregunta- una fácil ¿Qué música te gusta?

Me encogí de hombros, hubo un leve roce entre nosotros que me provoco esa extraña corriente eléctrica pero lo pase por alto.

-Creo que depende un poco de mi humor, si estoy de buenas o quiero sentirme tranquila y des estresarme escucho música clásica, si estoy enojada o simplemente tengo ganas escucho rock, si estoy neutral o no hay nada mas, escucho pop y si estoy deprimida o relajada jazz ligero.

-Oh- se limito a decir.

-¿y tu?

-es que prácticamente contestaste por mi-. Sonrió apenado- menos el pop, solo lo tolero pero no me gusta.

-¿de verdad? ¿Estas tan loco como yo?

-¿eso cuenta como pregunta?

-Creo que no- reí.

-Entonces si, un poco loco como dices tu.

Sonreí aun mas.

-Siguiente pregunta-me presiono – ¿tu hobbie?

Me mordí el labio, no tenia en sí tanto tiempo como para poseer un hobbie pero podía decirle algo que me gustaba hacer.

-Leer o si amo leer, me gustan mucho las obras clásicas, Shakespeare, Jane Austen, y amo la poesía, hay algo que me encanta hacer, leerlos en otros idiomas, te dan una perspectiva diferente.

-Son buenas lecturas y eso de leerlos en otros idiomas me parece interesante, no lo había pensado- reflexionó.

-Conteste tu pregunta, ahora dime tu hobbie- lo presione.

-Mmm, yo soy mas visual, me encanta le cine artístico, el teatro y adoro tocar el piano y mi guitarra es…

-¿También tocas el piano?-lo interrumpí.

-Si, de hecho si, es solo un pasatiempo ¿Por qué te sorprende?

-Es mi instrumento favorito, además del violín, yo solo se tocar el segundo y la guitarra también- presumí sin querer.

-Vaya eres como una agradable caja de sorpresas, ¿sabes? Seria lindo componer algún día ambos.

-Seria interesante- admití. Eres bueno con la guitarra debo admitirlo, pero habrá que ver que tal con el piano.

-Soy muy bueno- dijo sonriéndome de manera juguetona.

-Ya lo veremos.

-ahora tengo curiosidad por escucharte- dijo.

-Algún día.

-Algún día- coincidió- ¿tu animal preferido?

-El lobo ¿el tuyo?

-El puma, extrañamente ambos son animales salvajes- comento de nuevo sonriente- ¿color favorito?

-Verde Esmeralda- me apresure a decir, pero luego me ruborice, porque antes era el verde Jade y ahora, bueno supongo que se porque el cambio.

-El mío es azul oscuro- musito mientras me miraba raro.

Me di cuenta de que mi chamarra era de ese color, me sentí cohibida y rogué internamente que preguntara otra cosa.

-¿tu comida favorita?- continúo para mi suerte.

-La italiana, pero me gusta probar cosas nuevas.

Gracias al cielo sus preguntas eran sencillas y nada comprometedoras.

-A mi me encanta la pizza y las manzanas rojas.

-Que rico- pensé en voz alta.

-si- se volvió  sonreír- ¿tu sabor preferido de helado?

-¿Para que quieras saber eso?- pregunte extrañada pero divertida.

-Por si algún día te invito uno- explico de manera inocente.

-En ese caso, el de chocolate.

-El mío también.

-Cuantas coincidencias- sonreí.

-¿Cuáles son tus flores preferidas?

Pensé un momento mi respuesta, hacia mucho que las flores no me parecían interesantes, a mi madre le encantaban y como me recordaban mucho a ella prefería no pensar en eso.

-Creo que los tulipanes- murmure distraídamente- ¿me vas a contestar esa pregunta?

-¿Por qué no? Me encantan las violetas- contesto, aunque por un segundo su mirada se ensombreció.

Me agradaba que lo dijera sin pena, Jake habría dicho que esas eran cosas cursis de chicas. A veces le salía lo machista pero no era intencionalmente.

-¿puedes contarme el ultimo sueño que tuviste?- continuo sin detenerse- los sueños dicen mucho sobre las personas.

-Hum- hice una mueca- mi ultimo sueño, creo que caí de un acantilado.

-Eso significa que tienes miedo al futuro- dijo después de unos segundos de pensar.

-¿Cómo lo sabes?

-Leo muchos libros sobre psicología, me ayuda cuando hago un perfil y eso- me tense un poco cuando dijo esto.

-Ah entiendo, ¿y tu que soñaste y que significa?- pregunte para distraerme.

-Soñé que me ahogaba- también hizo una mueca- según sé, eso significa que estoy reprimiendo una emoción o sentimiento, puede ser angustia, remordimiento, amor, tristeza…

-Wow que mal.

-Si, supongo que pronto sabré cual es ese misterioso sentimiento oculto, penúltima pregunta, ¿Qué disfrutas más de estar viva?

-¿y esa pregunta?- la verdad no entendía muy bien a que se refería.

-Curiosidad- se encogió de hombros.

Otro roce.

-No se, a veces, cuando siento paz disfruto de todo, de los colores, de las cosas, de la extraordinaria capacidad que tenemos los seres humanos para sentir, de pensar de ser.

Nunca le había dicho eso a nadie, ahora era muy fácil decir lo que en realidad pensaba.

-Hum- murmuro

Era frustrante que me respondiera así, quería saber si pensaba que era una loca o una cursi, pero claro solo podía decir “hum”.

-Ahora tu dime- lo anime.

-Sencillo, disfruto de la vida, las cosas que tenemos y que por alguna razón ignoramos o nos pasan desapercibidas.

-¿Cómo que?- de verdad quería saber a que se refería.

Su rostro estaba bañado por la luz de la luna plateada y lo hacia ser mas bello de lo que ya era.

-A ver, cierra los ojos- ordeno.

-¿Para que?-inquirí nerviosa.

-Ciérralos no pasa nada- me tranquilizó.

-¿Qué sientes? ¿Qué escuchas? ¿Qué hueles?

No entendía muy bien al principio pero luego de concentrarme en mi cuerpo,  trate de olvidarme de todo lo demás.

-Siento la brisa, fresca pero agradable.

“siento tu mano sobre la mía que ahora sostienes por temor a que caiga”

-Escucho los grillos, se música y el mecer de las ramas de los arboles.

“Escucho tu aterciopelada voz que me hipnotiza como la de nadie y a pesar de que me resista me seduce”

-Huelo el bosque, la tierra, las hojas, las flores silvestres.

“Huelo tu dulce perfume, esa fragancia que despide tu piel, que ahora esta tan cerca de mi que me estoy desconectando y estoy a punto de olvidar lo que me preguntaste hace un segundo”

-Abre los ojos- me indico.

Los abrí lentamente y los suyos, de ese verde esmeralda infinito estaban a menos de cinco centímetros de distancia, estaba tan cerca que sentí su tibio aliento cuando habló.

-Eso… es lo que mas disfruto de estar vivo- susurro.

-Es hermoso- murmure sin darme cuenta.

Me quede como tonta viéndolo verme, trate de apartar la vista pero me tenia atrapada y aun sentía la calidez de su mano sobre la mía.

-Y que lo digas- sonrió enderezándose y volviendo a su postura inicial- me gusta como piensas Bella

 Estaba tan aturdida que si se le ocurría preguntar mi nombre no sabría cual era, luego sonreí por lo ultimo que dijo, a el le gustaba como pensaba, no, en realidad no sabia lo cruel que yo podía llegar a ser, esto me entristeció de manera inesperada.

-¿Lista para la ultima pregunta?

Estaba lista para terminar el cuestionario. Asentí para que continuara.

-¿prometes decirme la verdad?

-si- conteste antes de siquiera pensar.

- prometiste decirme la verdad- advirtió- , ¿Por qué cuando nos conocimos te portaste tan dulce al principio y después me rechazaste de manera tan abrupta?

Ahora estaba en problemas, él aguardaba mi respuesta pero no tenia idea de lo que le diría. Necesitaba concentrarme en inventar algo así que aparte la vista de su rostro y mire al cielo, ahí apareció un rayón de luz.

-¿Qué fue eso?- pregunte sorprendida.

Miro hacia arriba también y otra ráfaga de luz se hizo presente. Una hermosa sonrisa ilumino sus facciones.

-Es una lluvia de estrellas- me explico maravillado- ¿nunca habías visto una estrella fugaz?

-No- confesé- es tan… mágico.

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Hola, solo tengo que decir…. Awwwwwww , en lo personal se me hizo bonito jeja pero nos se a ustedes XD otra vez lo deje en suspenso, pero ya eran 14 paginas en Word y ya estaba larguito, tampoco quiero provocar sueño. ¿Qué raro no? Convenientemente Bella se queda dormida en ese momento. Se hizo un poco largo el interrogatorio pero quiero que ellos se conozcan un poco mas antes de dar ejem… el siguiente paso ñ.ñ lo siento asi es esto.espero sus coments ;)