Descubriendo mi Destino

Autor: JanetCullen
Género: General
Fecha Creación: 13/03/2013
Fecha Actualización: 10/11/2013
Finalizado: NO
Votos: 6
Comentarios: 13
Visitas: 18259
Capítulos: 21

Desperté, la luz de la luna que se colaba por la ventana iluminaba todo a mí  alrededor. El miedo impedía que pensara, las sombras me rodeaban como criaturas fantasmales. No sabía qué hacer, no sabía quién era, toda mi vida era una mentira, lo único verdadero que tenía, yo misma me había encargado de perderlo y todo, por mi estúpido orgullo, por idiota había perdido al amor de mi vida.

Quería pensar en lo que había pasado pero mi mente se negaba a eso porque dolía, dolía y mucho el recordar como mi vida, mis 17 años de vida se habían convertido en polvo en solo un día, pero sabía que tenía que calmarme y pensar con claridad las cosas para actuar de la mejor manera posible.

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 17: Capitulo 17

DESCUBRIENDO MÍ DESTINO…

LO SIENTO, LO SIENTO, LO SIENTO… SE QUE ME TARDE MUCHISIMO EN ACTUALIZAR Y LA VERDAD ES QUE NO TENGO EXCUSA PERO ESPERO QUE ME PERDONDEN SI?

¿QUE LES PARECE LA NUEVA PORTADA DE LA HISTORIA? YO LA AME… MILLONES DE GRACIAS A LAS DISEÑADORAS FFAD… Y PRESTENLE ATENCION PORQUE SI SE FIJAN BIEN Y LA OBSERVAN DETALLADAMENTE QUIZAS DESCUBRAN EL SECRETO DE BELLA EN LA IMAGEN JAJA…

AQUÍ LES DEJO UN NUEVO CAP. ESPERO QUE LES GUSTE NO LAS ENTRETENGO MAS…

¡A LEER!

.

.

.

.

Y lo siguiente que sentí fueron sus labios sobre los míos.

Su sabor en mi boca.

Su suavidad en mis labios.

Y por fin, sentí que pude volver a la vida luego de la muerte.

ho por Dios como lo amo…

Mi vida.

Mi amor.

Mi todo.

Mi hogar.

"-por fin estoy en casa- pensé"

o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

¡Por dios como extrañaba esto!

Edward, me está besando como si ho hubiera mañana…

Con todo el amor y la pasión que teníamos guardados desde hacen cuatro meses…

Nuevamente estamos en nuestra burbuja, una donde solo existen Bella y Edward, dos personas que se aman a pesar de todo. Una burbuja donde todos los problemas y el resto del mundo dejan de existir, donde el mundo se detiene, una burbuja a la que pensé que jamás volvería.

Pero de repente la burbuja se pincha y la realidad golpea mi cara…

Tania y Edward

El hospital en construcción

Cuatro meses solos

Sufrimiento

Noches en vela llorando

Tantas cosas…

-por Dios, ¿te dice dos palabras y a ti se te olvida todo por lo que pasaste?-

Por primera vez decido hacerle caso a la voz dentro de mi cabeza

-detente- le digo alejándome de sus labios, pero él los vuelve a juntar.

-Edward, por favor detente- susurro y termino alejándome completamente de él.

-¿Qué pasa?, ¿Por qué?, no sabes lo que te he extrañado, mi amor-

-¿Qué pasa?, pasa que no puedo olvidarme de cuatro meses de sufrimiento- respondo mirándolo a los ojos- y ¿Por qué?, porque ¿de qué sirve besarnos ahora si tu vas a seguir con Tania?, porque realmente dudo que ya se haya arreglado todo-

En ese momento el brillo de sus ojos desapareció dándole paso al dolor nuevamente.

-lo siento, lo siento, es solo que no pude resistirme, no sabes lo que he esperado esto- susurra- no sabes lo que daría para que me perdones-

Y las lágrimas que se habían detenido vuelven a aparecer.

-no puedo- susurro con la voz entre cortada por mis sollozos- lo siento pero no puedo… no puedo olvidarme de cuatro meses de sufrimiento, cuatro meses en los que pensé que no te importaba, que nunca me habías tomado en serio, que solo había sido solo un juego para ti, que solo me habías enamorado para después dejarme… cuatro meses en los que descuide mi persona por ti, no dormía porque cuando lo hacía revivía ese día o porque todos los recuerdos venían a mi mente, cuatro meses en los que me aleje de mis amigas, no tenía ganas de comer, lo único que quería hacer era estar encerrada en mi habitación, cuatro meses donde preocupe a mis padres con mi falta de ánimo, donde caí en depresión, cuatro meses donde me sentía morir cada vez que te veía tan feliz con ella, cuatro meses intentando odiarte sin conseguirlo- rompo en llanto.

-perdón, perdón, perdón… no tienes idea de lo que desearía volver el tiempo atrás y cambiar las cosas-

-no puedo olvidarme de todo lo que paso Edward, simplemente no puedo-

Lo siguiente me dejo helada por unos segundos y totalmente sorprendida.

Hay estaba Edward Anthony Cullen;

El más popular del colegio;

El más increíblemente hermoso;

El líder del equipo de futbol;

El único hijo de una de las familias más ricas e importantes del país;

El chico por el que más de la mitad del colegio, si no es que todo, muere;

El amor de mi vida;

La razón de mi existencia;

La única persona que me hizo conocer el amor;

La persona que más feliz me había hecho;

Pero… también la persona que más daño me había hecho…

Nada más y nada menos que Edward Anthony Cullen esta arrodillado, abrazando mis piernas, llorando y rogando mi perdón.

No lo soporte y me derrumbe a su lado quedando ambos arrodillados y cara a cara.

Y sin darle tiempo a la voz de mi cabeza junte nuestros labios nuevamente.

¿Cómo podía ser posible que, de estar sintiendo que el mundo se te viene encima a, sentir que nada mas en el mundo importa solo haya un solo paso… solo tenga que juntar sus labios con los míos?

-te amo- susurra sobre mis labios sin dejar de besarme- lo siento… perdóname… te amo- susurra una y otra vez.

Nos separamos solo un poco para quedar con nuestras frentes unidas.

-por favor, te suplico que me perdones, por favor-

-lo siento- ¿Cómo es que aun quedaban lagrimas en mis ojos?- lo siento pero no puedo- volví a juntar nuestros labios brevemente- no puedo… perdóname.

-no tengo nada que perdonarte, eres tú la que tiene que perdonarme-

Sé que quizás sea la última vez que lo bese en mucho tiempo asique sin pensarlo vuelvo a unir nuestros labios.

Su halito choca contra mi cara mandando una descarga directa a mis sentidos y sumergiéndome en las más placenteras sensaciones, sensaciones en las que no me había sumergido hacía ya tanto tiempo.

Estuvimos besándonos, no sé si fueron segundos, minutos u horas, solo soy consciente de que quiero que su sabor, la sensación de su boca sobre la mía, sus manos pasando de mi cintura, a mis mejillas y luego a mi cabello dure para siempre.

Necesito sentirlo más cerca, sabiendo que no sabría si algún día podría volver a disfrutarlo, pero no me es suficiente… estoy desesperada y comienzo a tirar suavemente del cabello de su nuca para acercarlo a mi provocando que un pequeño gemido escape de sus labios.

Cuando nos hace falta el aire vamos reduciendo la pasión del beso hasta que se convierten en pequeños y castos.

-ojala algún todo el dolor que te cause cambie y se transforme en tu perdón y así puedas salvarme de este horrible dolor que siento-

No puedo responder, siento un nudo en la garganta y sé que en el momento en que abra mi boca para decir algo otra vez romperé en llanto asique sin más, me pongo de pie sin mirarlo y echo a correr alejándome de él… dejándolo allí.

o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o

Me encuentro en mi habitación.

Luego de lo sucedido con Edward corrí, corrí y corrí hasta mi casa, salteándome el resto de las clases.

No puedo dejar de llorar, tengo tantos sentimientos encontrados.

Alegría y alivio al saber que nunca dejo de amarme y que no fui solo un juego para él, rabia y enojo, porque nunca me conto… no confió lo suficiente en mi como para contarme algo tan importante como eso y tristeza por saber que el hecho de que yo sepa todo esto no va a hacer que volvamos a estar juntos.

Lo único que queda por hacer es hacer lo que mi amiga Alice siempre dice "hombros atrás y cabeza en alto" y tratar de seguir con mi vida normal, aunque dudo que pueda, pero como dice el dicho "el que no arriesga no gana".

o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

-cariño- escucho un suave susurro- cariño despierta, Al y Rose están aquí-

Abro mis ojos y me encuentro con mi madre sentada en el costado de la cama mirándome dulcemente pero notaba la preocupación en su rostro.

¿En qué momento me quede dormida?- pensé.

-hija, ¿está todo bien?, ¿has estado llorando?-

-sí pero no quiero hablar de eso, por favor, mama- respondo tratando de no hacerla sentir mal.

Ella solo sonríe y asiente- ok pero cualquier cosa sabes que me puedes contar, ¿cierto?-

-si mama, no te preocupes y diles a las chicas que en un momento estoy con ellas, por favor-

Cuando mi madre sale de la habitación me dirijo al baño y me tomo una ducha rápidamente. Me pongo unos jeans azules, una camiseta negra, mis infaltables converse, me hago una coleta alta y bajo.

En la sala me encuentro con mis dos locas amigas riéndose, me aclaro la garganta y cuando voltean a verme las sonrisas de sus rostros desaparecen rápidamente.

Maldición, ¿Por qué se me tiene que notar tanto cada vez que lloro?-

-Bells, ¿Qué ocurre, cariño?- pregunta Alice haciéndose a un lado para que me pueda sentar en el sillón, entre ella y Rose, que me miraba con el ceño fruncido.

-¡lo matare, juro por Dios que lo matare!- habla una muy enojada Rosalie- ¿fue Edward cierto?, ¿el tiene la culpa de que estés así?-

Yo bajo la mirada.

-¿de qué me perdí?- pregunta Alice, confundida.

-Emmet me dijo que los dejo solos en el salón de clase, que tenían que hablar y ho casualidad tu desapareces del colegio faltando al resto de tus clases, te venimos a ver y tienes los ojos rojos en señal de haber estado llorando, es obvio que ese idiota tuvo algo que ver-

-¿nos quieres contar?- Dice dulcemente Al.

-no aquí… vamos a otro lado por favor- susurre.

-ok, ¡RENE, CHARLIE NOS VAMOS Y NOS LLEVAMOS A SU HIJA!- grita el pequeño duende mientras me arrastra a su coche.

Durante todo el viaje voy en el asiento trasero en silencio, solo escuchando como Rosalie planeaba mil y una forma de vengarse de Edward y Alice tratando de calmarla diciéndole que primero tenían que dejar que yo les cuente antes de planear cualquier cosa.

Pero mi mente esta con unos hermosos ojos verdes llenos de sufrimiento, dolor y arrepentimiento, pero sobre todo… llenos de amor.

Solo han pasado unas horas pero ya extraño estar entre sus cálidos brazos, donde me siento segura y protegida. Extraño sus palabras de amor. Extraño que me mire de esa forma que me hace creer que soy la única mujer en su vida. Extraño sus besos. Por Dios extraño absolutamente todo de él.

¿Cómo puedo extrañarlo y necesitarlo tanto habiendo solo pasado unas horas desde que estuve con él si aguante cuatro meses pensando que no me amaba?

-ese es el problema genio, antes pensabas que no te amaba por eso podías soportarlo pero, ahora que te dijo dos palabras de amor ya estás loca por él nuevamente-

Hasta que tuviste que aparecer nuevamente.

-oye solo di mi opinión, ya me voy-

Sabes que nunca vas a ningún lado porque estas dentro de mi cabeza.

-touche… es solo una manera de decir… ya me callo ¿está bien así? –

Mucho mejor, ahora cállate.

Si, definitivamente tengo que internarme.

-llegamos- anuncia Alice interrumpiendo mis pensamientos.

-ho, ¿en serio?- pregunta sarcásticamente Rosalie a lo que el pequeño duende responde mostrándole su lengua infantilmente.

Sip… señoras y señores, les presento a mis muy maduras amigas.

Bajamos y nos dirigimos a la habitación de Alice.

-bien, ahora sí, somos todo oído- dice Al una vez que nos acomodamos en su cama.

-ok- respondo y comienzo a contarles absolutamente todo, sin omitir ningún detalle, digo ¿por algo son mis mejores amigas, no?

Cuando termino ambas me ven totalmente sorprendidas mientras yo seco las lágrimas que derrame.

-¿seguro que Jazz y Em, no sabían nada?-

-si-sorbo mi nariz- él no quiso decirles nada porque sabía que si ustedes se enteraban que ellos sabían todo y no mes habían dicho nada se enfadarían con ellos-

- y tenía toda la razón-

-entonces, el idiota no resulto ser tan idiota- habla Rose y Alice y yo la miramos- digo, al menos lo hizo por una buena causa y resulta que si te ama-

-a decir verdad Bells, yo nunca dude que él te ame, solo que no lograba entender porque había actuado de esa forma, hasta ahora-

Yo solo sonrió tristemente.

-bella, cariño lo siento mucho- me dice Rose mientras me abraza.

-pero no nos vamos a quedar aquí llorando o lamentándonos, no, no, no señoritas, nos vamos ya mismo al centro comercias ¡salida de chicas!- chilla emocionada- pero antes, hay que maquillar a esta señorita aquí así no se le nota tanto que ha llorado-

Al principio pienso en negarme, pero después me decido a que si quiero seguir con mi vida normal, la idea de salir con ellas un rato es un buen paso para comenzar aunque tenga que soportar ser Barbie Bella.

Luego de varias horas de ir de tienda en tienda y de probarme miles de prendas de ropas y tomar un helado finalmente nos dirigimos a mi casa.

Al llegar me despido de ellas agradeciendo por todo y entro a casa extrañada por las dos enormes camionetas aparcadas fuera.

La primera es de un color dorado y la segunda, un poco más antigua, de color rojo y la reconocí porque mi abuelo Charles había tenido una parecida, es una pick up, no sé de qué año pero al verla la ame. Cuando era chica siempre que iba a visitar a mi abuelo, él me llevaba de paseo en su camioneta, a veces hasta comíamos en ella porque yo simplemente la amaba.

Al entrar me encuentro con un hombre en una silla de ruedas, mi padre y ¿Jacob?-

-¿Jake?- pregunto confundida.

-Hola Bells- responde mi amigo sonriendo y me abraza-

-Hola… humm, ¿Qué haces aquí?-

-ho no sabes lo que ocurrió, resulta que mi padre y el tuyo se conocen de cuando eran jóvenes, se reencontraron hace unos días y bueno, al parecer se convirtieron en los mejores amigos-

En ese momento me doy cuenta que no he saludado al señor me que mira con una enorme sonrisa en su rostro.

-hola señor Black, un placer conocerlo- saludo amablemente.

-hola Bella, no te preocupes, puedes llamarme Billy-

-ho, humm bien… Billy- respondí también con una sonrisa.

Luego de unos minutos en los que los dos reencontrados amigos contaran algunas anécdotas de su juventud pude comprobar que Jacob y Billy son muy parecidos y muy alegres también, cosa que me sorprendió al conocer su triste pasado pero me alegre por ellos al verlos tan bien.

-ho Bella, hija estoy olvidando el motivo más importante de tener estas agradables visitas- hablo Charlie.

-¿ha si? Y ¿Cuál es?-

-vamos afuera- responde.

Una vez fuera me mira y me dice- hija, creo que es hora de que tengas tu propio vehículo asique aquí esta- dice y señala a la hermosa pick up.

-¿en en serio?- pregunto perpleja y con una enorme sonrisa en mi rostro.

-claro que si cariño, ¿te gusta?-

-¿gustarme?, ¿en serio lo preguntas papa? ¡CLARO QUE ME GUSTA! Es increíble, me recuerda tanto a la que tenía el abuelo Charles y tú sabes que yo amaba esa camioneta-

- sí, claro que lo sé, por eso cuando la vi en casa de Billy no lo pensé dos veces y la compre para ti-

-ho, muchísimas gracias papa- respondo totalmente emocionada y salto encima de él abrazándolo con fuerza.

- de nada Bells, me alegro que te guste-

-vallan con Jacob a dar una vuelta- sugiere Billy y sin pensarlo me metí dentro de mi hermosa camioneta.

-bien, esta es la llave- dice Jacob del lado del conductor entregándomelas- ya la revise y todo esta en perfecto estado asique no creo que tengas algún problema-

-fantástico- susurre rebosante de alegría.

Luego de varias vuelta, René nos dijo que la cena ya estaba lista asique todos nos dirigimos hacia el comedor.

Fue una cena muy agradable y yo estaba más que feliz con mi nueva camioneta.

Despedimos a Jake y Billy y yo me dirijo a mi habitación.

Estoy exhausta, muchas emociones por un día.

Me pongo mi piyama agradeciendo internamente en que Jake no haya preguntado porque desaparecí del colegio, aunque me dio varias miradas dándome a entender que no quedaría así y que obviamente tendría que contarle.

Una vez que apoyo mi cabeza en la almohada los recuerdos golpean mi mente y los ojos comienzan a humedecérseme de nuevo.

-mañana será un largo día- pienso.

Y en ese momento mi celular suena informándome de un nuevo mensaje.

Al leerlo las lágrimas vuelven a aparecer.

-buenas noche Bella. Ojala algún día puedas perdonarme, lo siento no pude contenerme y no escribirte… que descanses, te amo- Edward.

¿Cómo voy a hacer para no derrumbarme después de esto cuando lo vea con ella?

Te amo-

Y sin poder evitarlo me duermo con una estúpida sonrisa en la cara.

.

.

.

.

BUENO NIÑAS, NO ME ODIEN… CREANME QUE FALTA POCO PARA QUE LAS COSAS SE ARREGLEN Y DESCUBRAN EL SECRETO DE BELLA…

¿MEREZCO REVIEW? QUIERO SABER QUE LES PARECIO

GRACIAS POR LEERME…

LAS QUIERO…

NOS LEEMOS PRONTO…

BYE :D

 

Capítulo 16: Capitulo 16 Capítulo 18: Capitulo 18

 
15223412 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 11144 usuarios