Me sentia adolorida, cansada y desganada, seguro que era secuela de la operacion de la cual me estaba recuperando pero le dije a todos que estaba bien solo para que me dieran el alta de esta clinica y poder volver a mi vida, ya llevaba dos semanas aca y al fin podia moverme por mi misma. Me habian sometido a una cirujia para solucionar un problemita que tenia el los intestinos, y ya me dijeron que cuando me recuperara por completo y si segui bien, en unos meses me someterian a otra operacion para ver si al fin podia solucionar los daños que me habia probocado con mis tonterias.
Pasaban los años y todavia me seguia persiguiendo mi pasado del cual me arrepentia terriblemte, pero yo me lo busque y me tenia que aguantar sus consecuencias.
Termine de acomodar mis cosas en el pequeño bolso de mano que tenia y lentamente me puse de pie, no me queria mirar al espejo porque se que me asustaria con la espantosa apariencia que tendria, me puse mi lentes de sol y me sombrero para no ser reconocida, nadie sabia que estaba aqui. Camine por esos palidos pasillos hasta la entrada donde me esperaba un chofer, ya que yo no podia conducir, inclino la cabeza cuando me vio
-buenos dias, señorita Dwyer-me saludo el hombre
yo solo asenti con la cabezo y me meti dentro del auto, lo menos que tenia era ganas de hablar, ya mi asistente le habia indicado mi direccion por lo que no era necesario hablar. Habia utilizado mi segundo apellido para hacer todo esto ya que nadie me conocia por el, eran menos las posibilidades para que me descubrieran.
El auto comenzo a avanzar por las calles mientras yo veia por la oscura ventanilla, iba pensando en todo lo que tenia que hacer en estos dias, personas a las que tendria que ver hasta que el auto paro por un semaforo rojo y mi vista se cruzo con un edificio vidriado, en el cual me reflejaba. Me habia sacado mis lentes de sol y mi imagen era tal cual presentia, un rostro palido con terribles ogeras, ojos dorados apagados y expresion de cansancio.
Pero bien llegue a casa me tenia que enfundar en un traje elegante, maquillarme bien y partir a la oficina a hacerme cargo de mis responsabilidades, estan dos semanas intente mantener controlado todo a la distancia por lo que esperaba no llevarme sorpresas porque no se si las iba a poder soportar con el cansancio y el dolor que llevaba ensima.
Y asi era mi vida, lo unico en lo que me enfocaba era en el trabajo, mis padres murieron dejandome, no tenia hermanos ni nada; poseia una muy buena amiga que la canocia de toda la vida y la consideraba mi hermana de otros padres pero por mis estupideses la aleje para que no se aflijiera por mi. La ultima Swan en pie, decian varios. Pero era cierto, yo estaba... sola

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